El primer ministro Haider Al Abadi recorrió las calles y se reunió con sus tropas para felicitarlas. El grupo extremista respondió a través de un comunicado.
En Al Nuri, y su icónico minarete de ocho siglos, el grupo terrorista proclamó su califato. Iraquíes aseguran que fueron los yihadistas al verse acorralados.
A 17 personas ascendió la cifra de víctimas mortales. Según autoridades, en el asalto participaron cinco terroristas nacidos en Irán que combatieron en el Estado Islámico.