El concejal de Bogotá Andrés Barrios, quien estaba con Miguel Uribe Turbay el día que el precandidato presidencial sufrió un ataque sicarial en el barrio Modelia, en el occidente de la capital colombiana, abrió su corazón con María Elvira Arango, directora de Los Informantes, en el programa digital ‘En Aguas Profundas’. “Ha sido una pesadilla. Muy duro por él, por lo que él es como ser humano; por el país, ese miedo que nos genera a todos volver a ese pasado que no estamos dispuestos a regresar. Quedas en un estado de shock, de susto y pánico. Gracias a Dios estamos aquí”, reconoció. Mientras el senador y precandidato a la Presidencia permanece en cuidados intensivos en la Fundación Santa Fe, en donde los médicos le han hecho varias intervenciones quirúrgicas tras ser herido de bala en la cabeza, el concejal Barrios – de 36 años - afirma que tanto él como toda la familia y los allegados de Miguel Uribe Turbay siguen esperando esos “micromilagros que darán el milagro completo”: su recuperación total. Sin embargo, reconoció que “es un proceso lento, pero vamos bien y estamos con la fe intacta”.Sobre la traumática experiencia que vivió al presenciar el ataque a Miguel Uribe Turbay, el 7 de junio de 2025, y los momentos de pánico vividos en medio del caos, Barrios recalcó ‘En Aguas Profundas’ que una de las enseñanzas que esta situación le dejó fue “no dejar que el afán me haga salir de la casa sin despedirme de mi esposa con un beso, de mis hijas, y eso era lo que más le agradecía a Dios”.“A veces en la rutina se nos olvida y normalizamos que nuestra familia siempre va a estar ahí. A la final la vida es como la neblina: a veces está y de repente se va. Entonces, valorar a la familia ha sido de las cosas que he aprendido”, subrayó, aunque reconoció que “salir a la calle me ha costado mucho; estar en multitudes le genera a uno preocupación”.Así fue el momento del ataqueEl cabildante también recordó que tanto en el momento del ataque sicarial como en el recorrido previo por varios locales comerciales del sector de Modelia, en Fontibón, siempre estuvo detrás del precandidato porque el mismo Miguel Uribe le dijo: “tú me transmites como paz”.“Yo recuerdo que cuando este sicario viene y atenta contra él, a mí me dio fue un dolor en el oído, yo me cojo el oído, porque quedé como con un pitido, y caigo al piso. Ahí es que el esquema de seguridad mío se arroja encima mío y me pregunta: concejal usted está bien y yo les digo que sí”, contó. De hecho, la camioneta a la que inicialmente suben a Miguel Uribe Turbay es la de su esquema, pero cuando “milagrosamente llega esta ambulancia” todo cambia.Agregó que en la ambulancia “yo solo oraba, le pedía a Dios por él, que protegiera su vida y oraba mucho también pidiéndole a Dios misericordia con Alejandro, su hijo, porque si algo sé que cargaba el corazón de Miguel era haber crecido sin su mamá”, la periodista Diana Turbay asesinada en 1991 en un confuso operativo de rescate mientras estaba secuestrada por los extraditables.https://youtu.be/RaJRyYI3A-QEl concejal comentó también que ha decidido consultar con expertos para tratar un posible estrés postraumático luego de estos hechos: “uno necesita una caja de herramientas para enfrentar lo que viene”. Según dijo, está enfrentando tanto alteración del sueño como la falta de apetito tras el episodio violento.En el diálogo con María Elvira Arango, Andrés Barrios indicó que hicieron lo que pudieron “instintivamente” en el momento del atentado a Miguel Uribe Turbay y le respondió a quienes lo han señalado de “ser parte de todo esto”: “hicimos, en cuestión se segundos, lo que había que hacer y la llegada a este centro médico en Fontibón fue vital”.Para él, la fe y la esperanza son hoy los factores más fuertes que mantienen con vida a Miguel Uribe Turbay, pues dice que si él sigue “acá en la Tierra es porque Dios tiene un propósito muy grande con él”.¿Seguirá en la política?Aunque reconoce que lo vivido con el atentado es impactante y ya hasta su familia y amigos cercanos le han pedido que se aleje de la política, Andrés Barrios fue contundente al indicar que “está lleno de fe y ganas por trabajar por Colombia y sacar adelante nuestro país; creo que no nos podemos llenar de miedo, temor, sino de convicción”.“Es difícil, esto nos toca como nadando contra la corriente, pero se puede y en este momento está la responsabilidad también de seguir uniendo y no de permitir que este país se siga polarizando, se siga dividiendo”, puntualizó 'En aguas profundas'.
Colombianos han denunciado agobiantes situaciones con sus arrendatarios que terminan, en muchas ocasiones, siendo protagonistas de casos mortales. En esta recopilación de casos de Séptimo Día, vea historias estremecedoras desatadas tras solicitar pagos oportunos o sencillamente una convivencia pacífica.“Uno arrienda para beneficiarse y resulta que termina siendo el perjudicado”, así resumen varios arrendatarios la pesadilla en la que se les ha convertido alquilar sus casas o apartamentos en Colombia. Mientras en algunos casos los inquilinos son incumplidos para hacer los pagos del arriendo y hasta dejan de pagar durante años, en otros hay quienes cruzan barreras, agreden a los propietarios, se convierten en enemigos bajo el mismo techo y terminan siendo acusados por homicidio.Los afectados por deudores morosos se sienten desprotegidos y sin herramientas eficaces, pues ley 820 de 2003 en Colombia exige un proceso judicial para desalojar a un inquilino, incluso si no paga, lo que puede tardar años. Pero en otros casos, más allá de lo económico son varias vidas las que han estado en riesgo.Séptimo Día conoció en 2024 casos en los que inquilinos han matado a los propietarios de viviendas que decidieron alquilar habitaciones dentro de su casa con el fin de obtener ingresos extra. Entre ellos, se cuentan Marta Cecilia, en Medellín; María Victoria, en Cali y Lina, en Cundinamarca.Mujer asesinada en MedellínMarta Cecilia Puerta, de 68 años, fue brutalmente asesinada por Lilia Salcedo, una mujer llanera que llevaba más de dos años viviendo como inquilina en la misma casa.Un día las autoridades descubrieron el cuerpo de Marta con signos de violencia en la cocina y envuelto en bolsas. Por ello, durante la investigación el cuarto de Lilia Salcedo fue inspeccionado. “Los colchones, todo estaba manchado de sangre y todo estaba mojado, eso fue que ella le boleó cepillo”, aseguró el esposo de la víctima.Aparentemente, la mujer no tenía un perfil criminal. Sin embargo, Álvaro se percató de otro detalle que alertó a las autoridades: “Empezó muy cumplida con el arriendo y ya a lo último llevaba tres meses sin pagar”, afirmó. Por ello, la familia de la víctima y la comunidad la señalaron de lo ocurrido.De acuerdo con la investigación, el móvil aparente fue evitar pagar el arriendo.Inquilino asesino en CaliEn Cali, Valle de Cauca, en febrero de 2024 María Victoria Loaiza fue brutalmente asesinada por su arrendatario frente a su hijo Freddy, de 27 años y quien también resultó gravemente herido. La mujer recibió más de 20 heridas con un cuchillo y su hijo, un joven con parálisis cerebral, la vio morir a manos de un inquilino llamado Alejandro Trullo Salas.Freddy recibió más de 20 heridas con arma cortopunzante, fue hospitalizado 11 días en UCI, y quedó con afectaciones permanentes en su voz y condición física. El joven dice que quisiera borrar ese día de su mente, devolver el tiempo y no haber confiado en un extraño. "Un error grave, un error que no me voy a perdonar nunca”, añadió.Entre tanto, el agresor fue retenido por la comunidad y, posteriormente, judicializado.Vecino obsesionadoEl 30 de diciembre del año 2023, Lina Gamboa, de 36 años, llegó hasta el hospital Santa Matilde, de Madrid, Cundinamarca, con heridas de alta gravedad en el cuello. Aunque sobrevivió, quedó con secuelas físicas y neurológicas.Como en los casos mencionados anteriormente, en el de Lina su atacante también era un inquilino bajo el mismo techo: Jair Antonio Orjuela, quien llevaba tres meses como arrendador y, según las denuncias, había desarrollado una obsesión enfermiza con ella.Aunque fue capturado el mismo día, Jair fue dejado en libertad dos días después, lo que generó temor y frustración en la víctima y su familia.La investigación de Séptimo Día reveló que los agresores suelen ganarse la confianza de sus víctimas que, por necesidad económica y falta de verificación de antecedentes, terminan abriéndole las puertas de su casa a un sinnúmero de peligros.
Leidy Johanna Soto, madre de cuatro hijos, desapareció misteriosamente en Cali, Valle del Cauca, el 22 de mayo de 2019. Días después, su cuerpo fue hallado en avanzado estado de descomposición flotando en el río Cauca, cerca de Chinchiná, Caldas. Desde entonces, las autoridades emprendieron una intensa búsqueda para dar con el responsable de este atroz crimen. El Rastro reconstruyó el caso. La mujer de 34 años salió de su casa y nunca regresó. "Los niños me llamaron como a las 11 y me dijeron: 'mi mamá nos dejó encerrados, nos preparó el desayuno, cogió las llaves y dijo que ya venía'", recordó Rubiela Muñoz, mamá de la víctima.El día de su desaparición, Leidy dejó a sus hijos solos en casa con la promesa de que regresaría pronto. Incluso, le dijo a su madre que antes del mediodía pasaría a verla para ayudarla a sacar unas citas médicas.Tiempo después, uno de sus hijos llamó a su abuela al ver que su madre no volvía. Fue entonces cuando la familia se alertó, pues Leidy no respondía el celular, y todos coincidían en que no era habitual que se ausentara sin avisar, mucho menos dejando a sus hijos solos. "Ella nunca desaparecía ni dejaba solos a sus hijos. Cuando me avisaron, todo fue un caos", contó Angélica Montero, tía de Leidy.¿Qué pasó con Leidy Johanna Soto?Las autoridades iniciaron la búsqueda de Leidy y, para ello, no solo recopilaron testimonios de vecinos, sino que también comenzaron a interrogar a su círculo más cercano. Uno de los primeros en ser contactados fue John Alexander, su expareja y padre de sus cuatro hijos, con quien compartió casi 18 años de relación.La relación comenzó a deteriorarse después de que Leidy se sometiera a una cirugía bariátrica. Con el cambio físico, ella empezó a recuperar su confianza y autoestima, lo que, según su familia, desencadenó una serie de episodios de celos por parte de John. La situación se volvió insostenible y, en 2017, Leidy decidió separarse de él.Sospechosos en la desapariciónTras la desaparición, John Alexander aseguró que hacía mucho tiempo no tenía contacto con Leidy y sugirió a la Policía que investigaran a su nueva pareja. Esta afirmación sorprendió a la familia, que no tenía conocimiento de que Leidy tenía un nuevo romance.Yesid López Medina, de 30 años, era la nueva pareja de Leidy, con quien llevaba cuatro meses de relación y estaba planeando mudarse con él. Desde el inicio de la investigación, las autoridades notaron que Yesid participaba activamente en la búsqueda, lo que en un principio no despertó sospechas.Desde entonces, tanto la expareja de Leidy como su nuevo novio se convirtieron en los principales sospechosos de su desaparición. Sin embargo, Yesid López declaró que siempre le resultó extraño que Leidy no lo presentara oficialmente a su familia. "Ella nunca me llevaba a la casa de su mamá y yo me preguntaba: '¿si soy su pareja, por qué me deja en la esquina?'”, relató y aseguró que Leidy le confesó que no hacía pública la relación por miedo a la reacción de John Alexander, su expareja."La tiraron al río”Una semana después de la desaparición, la hermana de Leidy recibió un mensaje anónimo que confirmaba lo peor: "A su hermana la mataron y la tiraron al río Cauca", se leía en el texto.Al día siguiente, un pescador alertó a las autoridades sobre el hallazgo del cuerpo de una mujer en el río Cauca. Debido al avanzado estado de descomposición, no fue posible identificarla de inmediato. El cuerpo fue trasladado a Medicina Legal, donde se solicitó la presencia de familiares de personas desaparecidas. Fue entonces cuando Diego, hermano de Leidy, confirmó que se trataba de ella. "Son imágenes que uno quisiera borrar de la cabeza. Tenía la misma ropa con la que había salido de la casa, un anillo y era de ella. Ya la habíamos encontrado".Taxi fue clave en la investigaciónUna testigo del barrio Naranjos le informó a las autoridades que el día de la desaparición vio a Leidy discutiendo con un taxista. La descripción física del hombre coincidía con la de John Alexander, su expareja. Al avanzar en la investigación, los agentes descubrieron que él había comenzado a trabajar como taxista utilizando una identidad falsa.En su declaración, Yesid López aseguró que, días antes de la muerte de Leidy, su exesposo había comenzado a comportarse de forma extraña. Incluso relató que en una ocasión un taxi intentó atropellarlo. “Ella me dijo: ‘Ese es Alexander’”, declaró Yesid.Ante esta versión, la Policía decidió rastrear el vehículo, que fue hallado abandonado en un taller mecánico. Tras realizar las pruebas forenses correspondientes, encontraron rastros de sangre en el interior, lo que reforzaba la hipótesis de que John Alexander estaba detrás del crimen.“El carro fue revisado para ver si tenía alguna falla. La persona que lo trajo no se identificó. Normalmente, el carro venía sucio y olía mal, pero ese día estaba limpio por dentro y por fuera, y olía bien. Recién lavado”, aseguró Angélica Villota, propietaria del taller. Esta fue justamente la pista que las autoridades siguieron y, al revisar el vehículo con elementos especiales, encontraron en él residuos de sangre, por lo que la expareja de Leidy fue identificada como responsable e iniciaron su búsqueda. Condena del responsablePara ese momento, John Alexander se escondía en una zona rural de Corinto, Cauca, un área de difícil acceso por la presencia de grupos armados ilegales. Sin embargo, tras la interceptación de una llamada, el 15 de octubre de 2019 (cinco meses después del homicidio de Leidy) fue capturado y señalado como el responsable de este atroz crimen.En enero de 2020, aceptó la responsabilidad de los hechos y fue condenado a 35 años y 6 meses de prisión por el delito de feminicidio. “Espero que se arrepienta, le pida perdón a Dios y a sus hijos porque hizo un daño muy grande”, dijo una familiar de la víctima.
Lo que debía ser una jornada de aprendizaje y celebración un mes antes de su graduación terminó en una tragedia que marcó para siempre la vida de decenas de familias. El 5 de octubre de 2024, un grupo de estudiantes de la Corporación Educativa Nacional CEN, en Bogotá, realizó una salida pedagógica hacia la zona rural de Bojacá, en Cundinamarca. Lo que nadie imaginaba era que ese viaje terminaría en un accidente fatal que dejó cinco estudiantes muertos, 21 heridos y una serie de interrogantes sobre la responsabilidad institucional y la cobertura del seguro estudiantil. Séptimo Día investigó.María José Romero, María Alejandra Blanco, Isabel Natalia Franco y Paula Andrea Londoño compartían no solo una amistad muy cercana, sino también la pasión por su carrera de auxiliares de veterinaria. A solo un mes de graduarse, salieron de la sede de la Corporación CEN en Barrios Unidos, Bogotá, rumbo a Bojacá.A las 7:00 a.m. comenzó el recorrido. A las 8:50 a.m., en la vía entre La Mesa y Mosquera, los estudiantes notaron que algo no andaba bien. El bus iba a alta velocidad, y algunos alertaron al conductor. “Empezó a oler a quemado y ya fue cuando en la siguiente curva nos volcamos”, relató una de las sobrevivientes.El vehículo se volcó por el lado izquierdo, se arrastró diez metros y chocó con un muro de contención. El patrullero Brian Acosta, de la Policía de Tránsito y Transporte de Cundinamarca, fue el primero en llegar: “Había muchas personas con muchos traumatismos en diferentes partes del cuerpo y nos informaban que se encontraban otras sin vida”.Falla mecánica, hipótesis del siniestroSegún el coronel Jonathan Sandoval, jefe seccional de Tránsito y Transporte de Cundinamarca, la causa del siniestro fue una falla mecánica, “al parecer en los frenos”. La empresa de transporte Trans City Tour, responsable del bus, se abstuvo de dar declaraciones a Séptimo Día tras consultar por lo sucedido: “Nos abstenemos de emitir cualquier tipo de declaración reiterando que los hechos mencionados son objeto de investigación”.Mientras las ambulancias trasladaban a los heridos, la noticia del accidente se propagaba rápidamente en redes sociales y medios de comunicación nacionales. Algunos padres se enteraron por llamadas inesperadas. “A las 12 del día recibí una llamada que nunca uno quiere recibir”, contó una madre. Otro padre relató: “Llamé, para sorpresa mía me contestó un teniente de la Policía, me dijo ‘encontré el celular de ella en el piso, la buseta se accidentó’”.Ambos corrieron al Hospital de Mosquera con la esperanza de encontrar a sus hijas con vida. No fue así. Ellas estaban entre las víctimas fatales que dejó el siniestro.Dura realidad de los sobrevivientes del accidenteMaría José, de 23 años, sobrevivió, pero quedó cuadripléjica. Su vida cambió para siempre. Como ella, otros estudiantes enfrentan secuelas físicas y emocionales graves, pero el dolor no terminó con el accidente. Las familias denuncian que el seguro estudiantil no respondió como ellos esperaban.“Todavía hay muchos vacíos, no sé a quién le compete responder, desde que llegamos a Bogotá fue por la EPS, los gastos aparte siempre han sido de nuestro bolsillo, de la ayuda de la familia”, relató una madre de los sobrevivientes.La IPS CAFAM, donde fue atendida María José, confirmó que la atención fue asumida por la EPS, no por el seguro estudiantil.¿Qué pasó con el seguro estudiantil?Los padres esperaban que la póliza contratada por la Corporación CEN cubriera los gastos médicos y funerarios. Sin embargo, según sus denuncias, esto no fue así.Los padres de familia señalan errores por parte de la institución educativa.“Ha sido dificultoso porque se supone que mi póliza no tiene validez en ningún lado y no entiendo por qué”, dijo una estudiante.El abogado César Fuentes, representante de una de las víctimas, explicó: “No podían acceder a las coberturas de ese seguro porque no tenía vigencia para el hecho dañoso. La atención se realizó en principio a través de la póliza SOAT expedida por la aseguradora La Previsora, ellos fueron los que atendieron todo el tema de gastos y posteriormente, una vez se agota esa cobertura, se inicia la atención a través de la EPS”.El drama que viven familias de las víctimasUna de las familias afectadas relató que tuvo que hacer una colecta para cubrir los gastos funerarios. Un mes de la trágica partida de su hija recibieron por parte de Seguros de Vida del Estado el valor de la indemnización por su muerte, todos, según dicen, gracias a un trámite que ellos mismos gestionaron.Las familias coinciden en que no hubo claridad sobre la activación de la póliza. Al consultar en la página web de la aseguradora, descubrieron que los carnés del seguro aparecían como vigentes solo cuatro días después del accidente.La respuesta de la institución educativaDiana Puche, rectora de la Corporación Educativa Nacional CEN, reconoció ante Séptimo Día: “Ha sido un error, en el momento no podría llegar a establecer en esos momentos de quién puede llegar a ser el error”.Según documentos enviados por la rectora, la póliza sí estaba vigente y cubría para el momento del accidente a las víctimas y fue contratada con Seguros de Vida del Estado. Asegura que la institución gestionó su activación por diferentes canales. Sin embargo, las familias insisten en que nunca contaron con esa cobertura activa.“No sé qué pasó en relación a por qué en la base pública apareció una información diferente a la consignada, en estos momentos la verdad que me entero por ti, entonces la verdad no me he equivocado ni nosotros”, afirmó la rectora.Séptimo Día también consultó a Seguros de Vida del Estado. La compañía no accedió a una entrevista, pero respondió mediante un comunicado: “Por respeto a la confidencialidad de la información nos resulta improcedente pronunciarnos pública y específicamente sobre trámites individuales”.Finalmente, y a pesar de las denuncias, la corporación CEN insiste en que las denunciantes ya recibieron respuesta a la reclamación y que las personas que no han obtenido cobertura son por falta de los requisitos exigidos por la aseguradora, pero nunca por la no activación o ausencia de la póliza. Sin embargo, las familias siguen exigiendo respuestas claras para cada uno de sus casos.
El Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) dio a conocer que identificó la comercialización de un producto fraudulento que es vendido como un complemento alimenticio para niños y niñas en etapa de crecimiento. Sin embargo, el producto no cumple con ciertas características de reglamentación sanitaria colombiana.La entidad, a través de un comunicado, dijo que, identificó a través de denuncia y acciones de Inspección, Vigilancia y Control, la comercialización del producto “VITACEREBRINA KIDS”. El producto incluso cuenta con un registro sanitario del Invima que no existe, ni ha sido aprobado: RSAV 0043662016."Además, este producto se está promocionando como complemento alimenticio a base de vitaminas, nutrientes y minerales que actúan en el cerebro, en el mantenimiento de huesos fuertes y sanos y fortaleciendo el sistema inmunológico; incumpliendo con la normatividad sanitaria vigente para alimentos y bebidas", aseguró la entidad.El Invima citando lo establecido en los artículos 272 y 274 de la Ley 9 de 1979 por declarar propiedades en salud, preventivas, curativas y/o terapéuticas, dice que el producto promete algo que no puede cumplir. "(...) ARTICULO 272. En los rótulos o cualquier otro medio de publicidad, se prohíbe hacer alusión a propiedades medicinales, preventivas o curativas, nutritivas o especiales que puedan dar lugar a apreciaciones falsas sobre la verdadera naturaleza, origen, composición o calidad del alimento o de la bebida".Por su parte, en el artículo 274 se dice que los alimentos o bebidas en cuyo rótulo o propaganda se asignen propiedades medicinales, se considerarán como medicamentos. Por esta razón, "cumplirán, además, con los requisitos establecidos para tales productos en la presente Ley y sus reglamentaciones”, algo que el producto alertado tampoco cumple.Alertas del Invima de la marca VitacerebrinaEl Invima agregó que ha emitido en anteriores oportunidades alertas sanitarias asociadas a productos de la marca “VITACEREBRINA” que a la fecha se mantienen vigentes. La entidad compartió las demás alertas relacionadas a esos productos comercializados con el nombre de la misma marca, que datan desde 2016.Alerta sanitaria No. 22 Vitacerebrina Francesa de 15 de Septiembre de 2016.Alerta sanitaria “VITACEREBRINA”, “CUBEA-AYOA”, “SUPER RAIZAN”, “MEGA VITACEREBRINA FRANCESA” y “TOROVITAL” de 25 de Octubre de 2016.Alerta sanitaria N° 004 Vitacerebrina Francesa del 24 de febrero de 2017.Alerta sanitaria N° 047 Mega Vitacerebrina del 25 de agosto de 2017.Alerta sanitaria N° 058 Vitacerebrina Francesa del 28 de septiembre de 2017.Alerta sanitaria N° 0069 Mega Max Vitacerebrina Francesa del 30 de noviembre de 2017.Alerta sanitaria N° 002-2018 Vitacerebrina Francesa del 2 de enero de 2018.Alerta Invima No. 017-2018 "Vitacerebrina Francesa" del 8 de marzo de 2018.Alerta Invima No. 162-2019. Vitacerebrina Francesa de Laboratorios Alfa y Vitacerebrina Francesa de Laboratorios Naturales de Vida del 28 de noviembre de 2019.Alerta sanitaria N° 020-2021 Vitacerebrina Francesa lote VTMA513 del 9 de febrero de 2021.Alerta sanitaria No. 116-2021. Vitacerebrina francesa de Laboratorios Vin del 18 de mayo de 2021.Alerta sanitaria No. COAS 36-2022. MEGA VITACEREBRINA FRANCESA del 9 de diciembre de 2022.Alerta sanitaria N° 003-2023 Vitacerebrina & complejo B del 18 de enero del 2023.Alerta sanitaria N° 392-2023 MEGA MAX VITACEREBRINA del 27 de noviembre de 2023.Alerta sanitaria N° 166-2024. VITACEREBRINA FORTE del 10 de junio de 2024.Alerta sanitaria N° 066-2025 Vitacerebrina ginseng y ginko biloba + colágeno marino del 28 de febrero del 2025.El Invima solicita a la población abstenerse de adquirir el producto relacionado en esta alerta. Además, le pide a los consumidores que hayan adquirido este producto que suspenda su consumo. "El Invima recomienda consultar de manera permanente la aplicación web https://app.invima.gov.co/alertas/alertas-alimentos-bebidas y redes sociales oficiales @invimacolombia (X, Instagram, Facebook) para conocer información relacionada con alimentos y/o bebidas que puedan afectar la salud de los colombianos".MATEO MEDINA ESCOBARNOTICIAS CARACOL
A pesar de los esfuerzos de las autoridades para combatir el robo de carros en Bogotá, delincuentes continúan encontrando formas de evadir la seguridad y llevar a cabo sus actividades ilícitas. Un reciente análisis sobre el comportamiento delictivo asociado al hurto de vehículos en Colombia reveló que la mayor parte de los casos reportados no ocurre en la noche, como suele creerse. El análisis es basado en registros del primer semestre de 2025 y detalla los horarios, zonas del país y tipos de automotores más afectados por este delito.Existen patrones claros en cuanto a los días, horas y tipos de vehículos que son más propensos a ser robados en Colombia, dando lugar a la identificación de las 3 ciudades donde más robos hay: Bogotá, Antioquia y Valle del Cauca, de las regiones con más casos en lo que va de 2025. Los datos del informe fueron extraídos del Sistema de Recuperación de Vehículos (SVR), los cuales indican los horarios en los cuales los delincuentes estarían aprovechando hurtar.El horario en que más roban carros en ColombiaSegún el reciente informe de la empresa Ituran, la mayoría de robos de vehículos en Colombia ocurren a plena luz del día. Contrario a la creencia de que delincuentes aprovechan la oscuridad de la madrugada o de la noche para actuar, los datos más recientes apuntan a otro tipo de patrón: la mayoría de robos de carros se concentra entre las 12:00 del mediodía y las 6:00 de la tarde, horario en el cual los delincuentes pueden aprovechar las horas de mayor movimiento para actuar, sin levantar sospechas y para camuflarse entre el tráfico.La empresa especializada en la recuperación de vehículos hurtados identificó que el 43,3 % de los casos analizados entre abril y mayo de 2025 se registraron en esa franja horaria. Le sigue el periodo comprendido entre las 6:00 a.m. y las 12:00 del mediodía, con el 35,4%. El resto de las horas del día —incluyendo noche y madrugada— apenas representa poco más del 21 % de los reportes.Las ciudades de Colombia donde más roban carrosEl informe también expone un comportamiento repetido en cuanto a la distribución geográfica de los casos: las zonas con mayor densidad urbana y actividad comercial concentran el mayor número de hurtos. Bogotá y sus alrededores registraron el 32,2% de los casos, seguida por Antioquia con el 18,3 %, y Valle del Cauca con el 15 %. Atlántico aparece con el 10% del total nacional. "Factores como la alta densidad vehicular, la movilidad constante y la actividad comercial parecen influir en la recurrencia del delito en estos territorios", se lee en el reporte de la empresa. En otra muestra tomada entre abril y mayo, Bogotá concentró el 27,5 % de los casos, Antioquia el 18,1 %, Atlántico el 14,9 % y Valle el 11 %. Según los datos de Ituran, contar con sistemas de rastreo y monitoreo permite recuperar hasta el 96 % de los vehículos robados, con un tiempo promedio de localización de 31 minutos, por lo que la tecnología también puede ser clave para reducir el riesgo.¿Cuáles son los vehículos que más roban en Colombia?El análisis también reveló que los vehículos particulares —automóviles, camionetas y camperos— son los más propensos a ser robados. En el informe del primer trimestre, representaron el 61,7% de los casos; en otro segmento de datos más reciente, alcanzaron el 65,4 %. Los camiones figuran con una participación del 33%, mientras que las motocicletas representaron apenas entre el 1% y el 1,6% del total, según el periodo analizado.Esta preferencia por los vehículos de uso privado podría explicarse por su alta circulación diaria, pues, según la empresa, puede deberse a la falta de dispositivos avanzados de seguridad y porque son más fáciles de comercializar en el mercado ilegal. A diferencia de las flotas empresariales, que suelen tener sistemas de rastreo, los carros de uso particular suelen carecer de este tipo de protección tecnológica.Modalidades de hurto más reportadas en ColombiaUno de los hallazgos del informe tiene que ver con las formas en que se ejecutan los robos o se reportan: en primer lugar aparecen los llamados "reportes preventivos", es decir, casos en los que los propietarios creen haber sido víctimas de un hurto, pero en realidad se trata de olvidos de ubicación, grúas que remolcan el carro por una infracción o situaciones similares. Este tipo de reportes representaron el 63 % de los casos en el último análisis.En segundo lugar está el abuso de confianza, con el 23,7 % de los reportes. Se trata de situaciones en las que el delincuente tiene algún vínculo cercano con la víctima o aprovecha su acceso al vehículo para llevárselo sin violencia. La modalidad de atraco o "halado" ocupa el tercer lugar con el 13,3 %, casos en los cuales sí hay una acción directa, como el uso de la fuerza, amenazas o el forzamiento de las cerraduras para apoderarse del carro. En porcentajes menores se identificaron casos que involucraron el uso de escopolamina o extorsión directa al conductor. Para reducir el riesgo de robo de vehículos, es importante que los propietarios tomen medidas preventivas. Algunas estrategias recomendadas incluyen:Utilizar estacionamientos vigilados y evitar dejar el vehículo en la calle durante la noche o la tarde.Instalar cámaras de seguridad en el lugar de estacionamiento, si es posible.Instalar alarmas y sistemas de rastreo GPS en el vehículo.Utilizar bloqueadores de volante y pedales para dificultar el robo.No dejar objetos de valor a la vista dentro del vehículo.Ser consciente de los alrededores al estacionar y al regresar al vehículo, especialmente durante las horas de mayor riesgo.VALENTINA GÓMEZ GÓMEZNOTICIAS CARACOLvgomezgo@caracoltv.com.co
Se conoció la identidad de los cuatro miembros de una familia en el municipio de Aguazul, Casanare, que fueron hallado sin vida al interior de una vivienda en zona rural de esta zona del país el pasado 27 de julio de 2025. Uno de los propietarios de la finca se comunicó con las autoridades y dijo que encontró a su mayordomo, la esposa y los dos hijos de la pareja sin vida.Cuando las autoridades llegaron hasta el lugar se encontraron con los cuerpos sin vida en una de las habitaciones del lugar. Las víctimas tenían 2 años, 8 años, 24 años y 46 años.¿Quiénes eran los miembros de la familia hallada muerta?Los cuatro fallecidos fueron identificados como Andrea Alejandra Samacá Rodríguez, de 24 años; su pareja Rafael Estrada Granados, de 46; y sus dos hijos, Evelyn Dayana Estrada Samacá, de 5 años, y Damián Alejandro Estrada Samacá, de 2 años y 8 meses. Ninguna de las cuatro víctimas mortales presentaba heridas ni signos de violencia. La habitación en donde fueron encontrados estaba ordenada y no había rastro de algún tipo de pelea o alteración al orden dentro del sitio.Hasta el momento, una de las hipótesis del crimen es que la pareja, luego de una discusión, consumió una sustancia tóxica y también se la suministraron a los menores de edad. Las autoridades confirmaron que dentro del lugar se encontraron rastros de dicha sustancia. Una fuente le dijo al diario El Tiempo que dentro de la habitación "había un olor a insecticida o algo parecido y uno de los cadáveres presentaba una espuma cerca de la boca".Sin embargo, esta hipótesis continúa siendo investigada por las autoridades. Hasta ahora, no hay evidencias sobre una tercera persona que haya cometido el crimen.¿Cómo denunciar violencia intrafamiliar?En Colombia, denunciar la violencia intrafamiliar es un paso fundamental para proteger a las víctimas y activar rutas de atención integral. Este tipo de violencia incluye maltrato físico, psicológico, verbal, económico o social dentro del núcleo familiar, y puede ser denunciado por la víctima, un testigo o cualquier persona que tenga conocimiento del hecho. Las denuncias pueden presentarse en las Comisarías de Familia, que son el primer punto de contacto para emitir medidas de protección y brindar orientación jurídica. También se puede acudir a la Fiscalía General de la Nación, a través de las Unidades de Reacción Inmediata (URI), o a los Centros de Atención a Víctimas de Violencia Intrafamiliar (CAVIF). En casos urgentes, se puede llamar a la Línea 123, o a líneas especializadas como la 141 del ICBF, la 1455 para orientación jurídica, o la Línea Calma (01 8000 423 614), dirigida a hombres que buscan evitar ejercer violencia.Además de la denuncia, es crucial buscar apoyo psicológico. Las víctimas pueden acceder a atención gratuita a través de las Comisarías de Familia, el ICBF, hospitales públicos y organizaciones no gubernamentales. Estos servicios ofrecen acompañamiento emocional, terapia individual o familiar, y orientación para la reconstrucción del proyecto de vida.Buscar ayuda no solo protege a la víctima, sino que también contribuye a romper el ciclo de violencia. Hablar, denunciar y recibir apoyo son actos de valentía que pueden salvar vidas.(Lea también: Las dos hipótesis sobre crimen de comerciante asesinado en un local de Piedecuesta, Santander)CAMILO ROJAS, PERIODISTA NOTICIAS CARACOLX: RojasCamoCorreo: wcrojasb@caracoltv.com.coInstagram: Milografias
La Fiscalía General de la Nación confirmó que este martes se encontró una fosa común en zona rural de Calamar, en Guaviare, con los cuerpos de ocho líderes sociales y religiosos. El hallazgo se originó luego de una denuncia que mencionaba que las personas encontradas muertas habían sido citadas por parte del frente primero ‘Armando Ríos’ de las disidencias de las Farc, que delinquen en esa región, por lo que se decidió activar mecanismos de búsqueda urgente el pasado mes de abril. De acuerdo con el reconocimiento preliminar de los familiares, se trata de Jesús Valero, Carlos Valero, Marivel Silva, Isaid Gómez, Maryuri Hérnandez, Óscar Hernández, James Caicedo y Nixon Peñaloza Chacón. La indagación de la Fiscalía permitió establecer que el 4 abril de 2025, dos de las víctimas fueron citadas por integrantes del mencionado grupo armado y, tres días después, también fueron llamadas las seis personas restantes, con el fin de ser “interrogadas” sobre la posible presencia o creación de otro grupo delincuencial.Días después, las ocho personas habrían sido trasladadas a un predio abandonado. Según la investigación, los victimarios, al parecer, recibieron la orden desde el círculo de confianza de alias Iván Mordisco para evitar la posible conformación de una célula del Eln en la región.Guaviare tuvo paro armado por parte de disidencias de las FarcEl Bloque Amazonas, una disidencia de las Farc al mando de Néstor Gregorio Vera Fernández, alias Iván Mordisco, llevó a cabo un "paro armado" de cinco días en el departamento del Guaviare, “desde el día 16 de junio a las 00:00 horas hasta el día 21 de junio a las 00:00 horas". Durante estos días, había restricción de movilidad entre las 6:00 p.m. y las 6:00 a.m., así como estaba prohibido el uso de cascos, vehículos sin placas o con vidrios polarizados y navegación por los ríos sin autorización.Willy Rodríguez, alcalde de San José de Guaviare, manifestó en Noticias Caracol que “la restricción se da en zonas rurales de los municipios del departamento”, recalcando que hay “afectación en salud, transporte y educativa”. En la zona del Guaviare, además, se han reportado casos de reclutamiento forzado, amenazas y desplazamientos. El mandatario agregó que en la región “tener disidencias de las disidencias es un histórico, no habíamos llegado a esa situación, a generar un confinamiento, una restricción y una violación a los derechos humanos. Y también histórico en la afectación natural del río Guaviare. Amanecimos con 10 metros más sobre el nivel y ha afectado familias, veredas, localidades y barrios periféricos de la capital”.La disidencia de alias Iván Mordisco en los últimos días ha tenido enfrentamientos armados con las estructuras de Alexander Díaz Mendoza, alias Calarcá, que hace parte del Estado Mayor de Bloques (EMB), otra disidencia con la que el Gobierno tiene negociaciones de paz. Precisamente, la Defensoría había pedido días antes protección para la comunidad, señalando que la situación era especialmente grave en los caseríos de Charras Boquerón, perteneciente a San José del Guaviare, capital departamental y La Paz, que hace parte del municipio de El Retorno. En La Paz, la población civil "ha iniciado un desplazamiento sin garantías mínimas de seguridad ni atención humanitaria", según indicó la institución. "El día 8 de junio se restringió el ingreso a la vereda La Paz y aledañas, impidiendo el acceso de docentes y forzando la evacuación improvisada de estudiantes, personal de cocina y profesoras en condiciones de altísimo riesgo", añadió. La Defensoría, además, lamentó que no se adoptaran las acciones de prevención necesarias y señaló que "se están materializando graves vulneraciones a los derechos humanos" en estas comunidades.LAURA VALENTINA MERCADONOTICIAS CARACOL DIGITALlmercado@caracoltv.com.co
Un vuelo de la empresa Japan Airlines tuvo una emergencia mientras cubría la ruta Shanghái, China, con destino a Tokio, capital de Japón. Los miembros de la tripulación hicieron descender las máscaras de oxígeno al precipitarse por los aires cayendo casi 26.000 pies.El hecho ocurrió el lunes 30 de junio en un avión que opera bajo un acuerdo de código compartido entre Japan Airlines y su filial de bajo costo, Spring Japan. Había 191 pasajeros y tripulantes a bordo del avión cuando este sufrió un problema mecánico. La aeronave descendió rápidamente desde aproximadamente 36.000 pies a poco menos de 10.500 pies en 10 minutos.El vuelo, identificado como el JL8696/IJ004, salió del Aeropuerto de Shanghai Pudong en China con destino al Aeropuerto de Tokio Narita en Japón. Los pasajeros temían que el avión se estrellara cuando se liberaron las máscaras de oxígeno.Debido al rápido descenso de la aeronave el cambio de presión podía provocar que las personas a bordo perdieran el conocimiento, por esta razón descendieron las máscaras de oxígeno."Escuché un estruendo sordo y la máscara de oxígeno se cayó en cuestión de segundos. La azafata lloró y gritó que me pusiera la máscara de oxígeno, diciendo que el avión tenía una avería", declaró un pasajero a la agencia de noticias AP. “De repente, todas las máscaras de oxígeno se abrieron mientras dormía”, dijo otro.La carta de despedida ante el terrorOtro pasajero dijo estar a punto de llorar mientras escribía su testamento y anotaba los detalles de su seguro. Además de los números PIN de su tarjeta bancaria. Durante el descenso se activó una alerta que indicaba una anomalía en el sistema de presurización de la aeronave, según informó AP, citando al Ministerio de Tierras, Infraestructura, Transporte y Turismo de Japón y a otras autoridades.Por la emergencia no se reportaron personas heridas. El avión fue desviado al Aeropuerto Internacional de Kansai en Osaka, Japón. A los pasajeros se les ofreció una compensación de transporte de 15.000 yenes (93 dólares) y se les proporcionó una noche de alojamiento.Spring Japan publicó un aviso en su sitio web oficial, anunciando la cancelación de varios vuelos debido a ajustes en la capacidad operativa. Los vuelos cancelados incluyen vuelos de ida y vuelta entre Tokio y Shanghái programados para el martes y el miércoles. La misma ruta que cubría el avión de la emergencia.La aerolínea indicó que los pasajeros afectados por las cancelaciones podían optar por una nueva reserva gratuita a cualquier vuelo disponible dentro de la misma ruta operada por la aerolínea dentro de los 30 días posteriores a la fecha original del vuelo, o solicitar un reembolso completo dentro del mismo período de 30 días.Accidente de Air IndiaEl pasado 12 de junio se conoció del mortal accidente aéreo ocurrido en la ciudad de Ahmedabad, en India. El accidente dejó cientos de fallecidos y varios heridos. Entre las víctimas estuvieron todos los tripulantes de la aeronave con excepción de un tripulante que milagrosamente se salvó.Varias personas en tierra fallecieron debido al impacto del avión, que llevaba alrededor de cinco minutos en el aire antes de impactar contra el suelo. El Boeing 787-8 Dreamliner estalló en una bola de fuego cuando se estrelló momentos después del despegue, y los testigos informaron haber visto cuerpos gravemente quemados y restos dispersos.Tras el accidente aéreo, las autoridades indias pidieron a Air India revisar su flota Dreamliner, compuesta por 33 aeronaves. La Autoridad de Aviación Civil de la India (DGCA) informó que los primeros 24 aviones pesquisados no presentaban problemas técnicos. Agregó que Air India canceló en los últimos seis días, desde el momento del accidente, al menos 66 vuelos de Boeing 787.MATEO MEDINA ESCOBARNOTICIAS CARACOL