El Programa de Formación de Tecnologías de la Información (TI) de Google ofrece 120 becas a jóvenes entre 18 y 29 años en el Valle de Aburrá, Urabá y Oriente cercano. Este beneficio se otorgará a través de Comfenalco Antioquia.Según, Catalina Ayala Villa, coordinadora del proyecto Google IYF de Comfenalco Antioquia, las becas aplican para los jóvenes de estratos 1, 2 y 3 que no se encuentren estudiando actualmente, que estén interesados en estudiar carreras de tecnología de la información y que necesiten empleo.Otro de los requisitos para los candidatos es que cuenten con un título de bachiller, técnico o tecnológico.Cabe destacar que esta convocatoria de Google y Comfenalco Antioquia estará abierta hasta el 16 de enero de 2022.Un empleo, el regalo de Navidad para miles de colombianosTodos los interesados que se postulen y pasen a la fase del proceso de selección recibirán un correo electrónico a más tardar el 21 de enero de 2022.Por otro lado, los jóvenes que salgan beneficiados serán capacitados mediante el Instituto Técnico de Comfenalco Antioquia y de la plataforma Coursera. Será 100% virtual.Comfenalco Antioquia agregó que todos los elegidos para estas becas recibirán acompañamiento para la búsqueda de empleo con perfiles de tecnologías de la información.Si se encuentra interesado en postularse, recuerde que puede ingresar a este formulario y allí encontrará todas las instrucciones.
Más de un millón de dólares de la multinacional habrían llegado a manos de las AUC a través de este contacto, según un documento que tiene la Fiscalía. La alianza criminal de esta empresa, según el ente investigador, se habría pactado con el exparamilitar Raúl Emilio Hasbún Mendoza, alias ‘Pedro bonito’, a quien le pagaban tres centavos de dólar por caja de banano exportada. El ente acusador tiene registros de más de cien pagos que se habrían hecho a través de Banadex, su filial en Colombia. En la investigación de la Fiscalía se estableció que los dineros, pactados en una reunión convocada por la casa Castaño, eran consignados directamente a las cuentas bancarias de las Convivir desde donde se transferían a las cuentas personales de Teresa Hasbún Mendoza, hermana de alias ‘Pedro bonito’, y de allí llegaban a las AUC o los Power Rangers, como se hacían llamar en ese entonces. Los testimonios de varias personas que prestaban servicios en las bananeras fueron claves. Pero también, el testimonio del exjefe paramilitar Fredy Rendón Herrera, alias ‘el Alemán’, quien señaló a ‘Pedro bonito’ como jefe del bloque bananero. "Tenían un acuerdo con las comercializadoras o empresas bananeras, que les pagaran algunos centavos de dólar por caja exportada para financiar esa autodefensa", dijo en su testimonio Rendón Herrera. La Fiscalía cree que con ese aporte financiero la poderosa multinacional contribuyó con la expansión de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá y, en consecuencia, con la perpetración de varios crímenes. Los registros dan cuenta del homicidio de 4.335 personas entre 1995 y 2004 en Apartadó, Turbo, Chigorodó y Carepa. Por estos aparentes pagos ilícitos, la Fiscalía llamó a juicio a 13 exdirectivos y compulsó copias para que se investigue a alcaldes, gobernadores directores de la superintendencia de vigilancia y seguridad. Entre los vinculados está el expresidente Uribe, quien para la época era gobernador de Antioquia. La decisión también ratifica que el caso es de lesa humanidad.
Dicen que los están matando por reclamar tierras despojadas. En total, 25 de ellos buscan reunirse con altos funcionarios para abordar la problemática. “Ya les mataron a varios familiares, aseguran que los pistoleros ahora van por ellos sin que el Estado mueva un ápice para protegerlos”, declaró el padre Alberto Franco, director de la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz. “Se están agotando las palabras, muchas veces he estado en los funerales de familiares de ellos y ellas y es muy doloroso que se vuelve algo repetitivo”, añadió el religioso. En total, 60 líderes están amenazados en el Bajo Atrato y el Urabá Antioqueño. “Nos han hecho amenazas directamente y que si estamos un día más en el territorio no responden por la vida de ninguno de nosotros”, declaró uno de los afectados. El último de los dirigentes asesinados, en el noroccidente del país, fue Hernán Darío Bedoya. Al reclamante de tierras le dispararon en 14 oportunidades el pasado 8 de diciembre. Asesinan a otro reclamante de tierras en Chocó | Noticias Caracol
La caída de ‘Culo de toro’ y cinco de sus guardaespaldas enardeció al segundo al mando de la banda. Así fue el operativo. En un improvisado cambuche, ubicado en zona rural de Unguía, Chocó, y custodiado por cinco de los mejores pistoleros del clan del Golfo, permanecía escondido Efrén Vargas Gutiérrez alias ‘Rafa o Culo de toro’. Una pareja de agentes encubiertos fue la encargada de llegar hasta la zona y entregar las coordenadas a los comandos especiales de la Policía y el Ejército para que entraran de sorpresa al escondite. Golpe al Clan del Golfo: abatieron al hermano de alias ‘Gavilán’ |... En el enfrentamiento murieron sus escoltas y alias ‘Rafa’. La furia de ‘Gavilán’ se puso al descubierto en la interceptación de una comunicación en la que ordena incrementar la persecución y muerte de militares y policías. Pese a la orden criminal, el director de la Sijín aseguró que los operativos contra el clan, a través de la segunda fase de Agamenón, se incrementarán, especialmente en el Urabá. Las autoridades se muestran preocupadas por la orden de alias ‘Gavilán’, por quien se ofrecen hasta cinco millones de dólares de recompensa.
Desde septiembre, 5 reclamantes de tierras han sido asesinados y 120 líderes sociales, desterrados. Estructuras políticas y Clan del Golfo, tras régimen del terror. ¡Ahora estoy en la inmunda! Son las palabras de un campesino desterrado de la vereda Guacamayas, corregimiento Macondo, municipio de Turbo, en Urabá. “Tenía mi ganadito, mi galponcito y ahora me tocó salir y estoy en la inmunda, nos dieron para salir del lugar unos días, ya se nos acabó la ganga”, dice acongojado Julio León Correa, líder de restitución de tierras. Había vuelto a su finca, donde vivió tranquilamente dos años, hasta que regresaron los violentos. “Se identificaron como Autodefensas Gaitanistas; se nos llevaron como 50 cabezas de ganado y luego ya tomaron presión contra nosotros y una persona muy confiable, muy amiga mía, me dijo: ‘si los declaran objetivo militar los van a asesinar’.”, relata. Permanece enjaulado en la que llama su cárcel de cemento en la ciudad. A sus 51 años este campesino recio llora su desdicha. “Tengo un hijo de 9 años y tengo que tenerlo en otro lugar…a donde estoy no lo puedo tener”, cuenta entre sollozos. Su rostro representa a las nuevas víctimas del despojo de Urabá que va en aumento desde que se firmaron los acuerdos de paz con las FARC en La Habana. En la región han asesinado desde septiembre a 5 reclamantes de tierra y 120 líderes sociales han sido obligados al destierro. “Urabá es un estado mafioso, en Urabá no hay una violencia grande pero nadie habla; todo el mundo dice que tiene miedo. ‘Otoniel’ dice que tiene siete alcaldes en el Urabá”, explica Áriel Ávila, experto en conflicto armado. Sobre el mapa, el analista describe cómo un territorio colombiano privilegiado por su belleza y su riqueza se convirtió por décadas en el botín que enamoró al clan narcoparamilitar más estructurado de país. Un botín de oro, rutas de droga, paso de ilegales y tierras. “El clan es una marioneta de estructuras políticas de esa región, hay personas que están en la legalidad que le pagan al Clan del Golfo para que asesine victimas que están reclamando las tierras que le despojaron, el Clan del Golfo es la parte criminal, la parte fea de una gran estructura”, indica Ávila. El poder del Clan del Golfo, conocidos como los Urabeños o los Úsuga, corresponde a una sola estructura delincuencial monolítica unida por cinco mandos. “Hay una cosa que llaman la ‘mesa directiva’ que son 51 mandos que están en todo el país y cada mando contiene una región, tiene autonomía para hacer sus negocios. Ellos contribuyen a una fuerza élite que llaman Autodefensas Gaitanistas de Colombia y, debajo, el lumpen criminal que es lo que ellos contratan. Así funcionan los Urabeños es una organización criminal que funciona bajo un escritorio de 51 personas”, añade el analista. Resguardando su identidad, un hombre, al que llamaremos el ‘informante de Urabá’ nos habla. Salió huyendo de la zona hace dos meses. “Ellos tienen vehículos de alta gama y motos sencillas. También tienen campaneros que utilizan como mototaxi pero que la gente también los conoce. Ellos cuando llega una persona nueva, una persona rara son automáticamente identificados y hasta desaparecidos”, explica el hombre. El informante habla de nuevas alianzas armadas. “Luego que se firmó la paz en La Habana esos grupos han cogido más fuerza, algunos guerrilleros que no desertaron pues ahora negociaron con esa Bacrim y están trabajando con ellos”. Agamenón, la operación de Policía más grande de la historia de Colombia cumplió dos años. Contaba con enormes recursos: un presupuesto diario de 150 millones de pesos, un equipo élite de 1.200 policías especializados, flotilla aérea, mostrar los Black Hawk y Bell, armamento, avanzados sistemas de telecomunicaciones e inteligencia; mostrar lo avanzados sistemas de comunicación con apoyo de la DEA y Europol. Su objetivo: detener a la cúpula de Los Urabeños a quienes llamaron Clan del Golfo y frenar de un tajo su expansión territorial en el país. Según Ariel Ávila, “Agamenón sirvió para que algunas personas dieran ruedas de prensa, para que capturaran algunos mandos medios para nada más. La verdad es que el Clan del Golfo sigue teniendo la misma estructura, el mismo control y la población sigue teniendo el mismo miedo”. Para la Fundación Paz y Reconciliación, el Clan del Golfo es una estructura criminal. “A ellos hay que ofrecerles una alternativa de salida de ese mundo criminal bajo la figura de sometimiento a la justicia pero negociaciones de paz no va a haber”, dice su director. Un panorama desolador que pareciera no tener una salida visible para devolverle al país una región altamente productiva, donde familias nativas como la de Julio puedan recuperar de una vez y por todas un lugar libre y en paz sobre la tierra.
En Urabá se come pan a secas debido a la extorsión a productores y comerciantes de bebidas. Venta de cerveza, gaseosa y hasta agua se ve afectada. La región está controlada por el hampa organizada que impone la ley del silencio.
Colombia declaró "delito de lesa humanidad" la financiación voluntaria de empresas bananeras a grupos paramilitares de extrema derecha, volviendo imprescriptibles estos crímenes, informó este jueves la Fiscalía. La decisión se tomó a partir de un caso de financiación de estas compañías al extinto Frente Arlex Hurtado del Bloque Bananero de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá, que operó hace dos décadas por 10 años en el noroeste del país, dijo en rueda de prensa Carlos Fidel Villamil, director de la fiscalía especializada de Justicia Transicional. El excomandante de dicho frente Raúl Emilio Hasbún Mendoza, alias Pedro Bonito o Pedro Ponte, hizo "señalamientos directos" y reveló "nombres de empresarios bananeros de la zona de Urabá que presuntamente financiaron el grupo paramilitar entre los años 1996 y 2004", agregó. Las declaraciones de Hasbún Mendoza se realizaron en versión libre, en el marco de la ley de Justicia y Paz, como se conoció al pacto realizado en 2006 por los paramilitares con el gobierno del expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), que les ofreció penas reducidas a cambio de desmovilizarse, confesar sus crímenes y reparar a las víctimas. Uno de los casos registrados por la fiscalía ocurrió en noviembre de 2001, cuando durante cuatro días en la terminal de carga del puerto de Urabá, propiedad de la comercializadora de frutas Banadex, antigua filial de la estadounidense Chiquita Brands, se descargaron y almacenaron 3.400 fusiles AK-47 y cuatro millones de cartuchos 7.65 de un barco de bandera panameña. "Con dichos recursos se compraron las armas que posteriormente fueron utilizadas para ejecutar toda suerte de delitos", indicó Villamil, quien aseguró que el apoyo también sirvió para combatir a guerrillas de izquierda que operaban en la zona. Además, afirmó, a través de los paramilitares las bananeras ejercieron un "control social ilícito, territorial y de recursos" con el que se cooptó al movimiento sindical y "prácticamente se eliminó el derecho a la protesta social en la zona bananera de Urabá". El fiscal explicó que a los responsables se les podrá imputar el delito de concierto para delinquir agravado como crimen de lesa humanidad. La estadounidense Chiquita Brands se declaró culpable en 2007 de haber financiado a las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), surgidas a mediados de 1990 para combatir a las guerrillas y desmovilizadas en 2006. Por esa razón, Chiquita fue sancionada con una multa de 25 millones de dólares tras aceptar que entregó, entre 1997 y 2004, un total de 1,7 millones de dólares a los paramilitares colombianos supuestamente con el objetivo de proteger la vida de sus trabajadores. Corte Suprema de Estados Unidos rechazó en abril de 2015 una demanda presentada por más de 4.000 familiares o víctimas directas de paramilitares que actuaron financiados por la compañía estadounidense en territorio colombiano.
Esta aventura gráfica cuenta la historia de Victoria, una niña que huyó desplazada por la violencia y 30 años después decidió regresar a su pueblo natal.
Con ametralladora de madera pequeño de aproximadamente 10 años era entrenado, según un investigador. Además, llevaban menores de edad para ser abusadas.
Cerca de ochocientos migrantes irregulares permanecen en una zona selvática de la frontera de Panamá con Colombia, informó el viernes el presidente panameño, Juan Carlos Varela, ante la ola de haitianos, africanos, asiáticos y cubanos que buscan llegar a Estados Unidos a través de este país."Tenemos casi 800 (migrantes) en estos momentos en Darién", una zona selvática fronteriza, dijo Varela a periodistas poco antes de partir hacia ese lugar.El gobernante calificó la situación como "otra crisis migratoria", aunque afirmó que "esto no es un problema de Panamá sino un problema mundial".El mandatario recordó que la frontera está cerrada, pero admitió que los migrantes han identificado diferentes rutas para entrar al país por la tupida selva de Darién.Se han desplegado en el área unas 400 unidades del Servicio Nacional de Fronteras, pero "hay que reconocer que la frontera con Colombia por la selva es muy amplia", indicó.Según han dicho autoridades de la región centroamericana, los migrantes corren el peligro de quedar a merced de los "coyotes" y narcotraficantes, además de exponerse a padecer enfermedades, hambre y sed.Varela explicó que a estos migrantes que logran cruzar la frontera de manera irregular se les da un "tratamiento humanitario", porque "yo no voy a permitir que mueran personas en la selva".En las últimas semanas, cientos de migrantes haitianos, congoleños, senegaleses y ghaneses han logrado pasar de Panamá a Costa Rica donde abarrotan los albergues, ya que Nicaragua no les permite el paso en su ruta hacia Estados Unidos.Según Varela, una gran parte de los inmigrantes son haitianos, que tras el devastador terremoto de 2010 migraron a Brasil, y ante la crisis económica y política que vive ese país sudamericano han decidido irse a Estados Unidos a través de Centroamérica.Varela confirmó, sin dar detalles, que ya habló sobre esta crisis con su par de Costa Rica, Luis Guillermo Solís.El jueves, el secretario de Gobierno de Turbo, en el noroeste de Colombia, manifestó a la AFP que el número de cubanos que están saliendo hacia el Darién "ha aumentado" en los últimos días tras difundirse el rumor de su posible deportación y el incremento de controles fronterizos en Centroamérica.Entre el 19 de mayo y la víspera, han salido por Turbo 7.903 migrantes irregulares y ha deportado a más de 5.800 en los últimos dos meses, según autoridades colombianas.Colombia anunció el martes un plan de choque en sus fronteras contra la migración irregular, precisamente por la llegada masiva de personas que usan al país como territorio de paso.