Asesinos y atracadores, esos son los perfiles delincuenciales de los casi 50 capturados que hacían parte de organizaciones criminales que tenían desesperados a los transeúntes y habitantes de 14 localidades de la capital.
Un grupo de esos bandidos se conocía como Los Magníficos. Ingresaban armados a los supermercados para desocupar las cajas registradoras y los bolsillos de las personas presentes.
Iban a la fija, apuntando a la cabeza de sus víctimas para no darles chance de dudar. Ante la angustiante escena, los asaltados terminaban cediendo. Los ladrones solo se iban hasta tener el último peso.
Otra captura fue la de Los Masivos, una organización que antes de la pandemia aprovechaba las grandes congestiones en Transmilenio para romper bolsos y robar. Además, recurrían al cosquilleo.
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Igualmente, el trabajo de la Sijín permitió desmantelar a Los Seguidores, cuyo objetivo eran los carros de alta gama. Estos sujetos llegaban a los parqueaderos cuando los propietarios estaban a bordo y, a punta de amenazas con pistola, los hacían descender. Eran cinco peligrosos delincuentes.
Fueron 43 delincuentes capturados que se organizaban en 10 bandas distintas. Todos fueron enviados a la cárcel.
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#Noticia ¡Capturamos! 43 personas que conformaban estructuras criminales, dedicadas a cometer hurtos en todas sus modalidades en Bogotá. pic.twitter.com/tWjJReBvJ8
— Policía Metropolitana de Bogotá (@PoliciaBogota) June 12, 2020