Autoridades en Bogotá trabajan en los retratos hablados de los cuatro delincuentes –tres hombres y una mujer- que asaltaron la joyería en el centro comercial Gran Estación usando armas con silenciador.
“Llegan dos personas, una parejita, se les hace el protocolo, se le toma la temperatura a la señora y, cuando se le va a tomar la temperatura al compañero de ella, llegan dos tipos más. Se reúnen los cuatro y sacan los revólveres, hacen acostar a los empleados. Se llevaron joyería y relojes, eso dura alrededor de 2 minutos”, cuenta Álvaro García, representante legal del establecimiento.
Según los primeros cálculos, se robaron entre 500 y 600 millones, representados en más de 100 relojes.
Los propietarios creen que el robo fue planeado, una hipótesis que también manejan las autoridades.
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“Es posible que los ladrones sí hayan estado haciendo inteligencia al local; cómo funcionamos, cómo estaba la seguridad del centro comercial, porque fue algo muy planeado. En dos minutos llegaron y sacaron lo que tenían que sacar y ya”, añade García.
Por último, el representante legal despejó cualquier sospecha sobre los trabajadores del lugar.
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“Mis empleados llevan conmigo bastante tiempo, llevan alrededor de tres años y hemos trabajado en diferentes joyerías; la confianza con ellos es total y sé que por ese lado no es”, señala.
Autoridades analizan las horas de grabación de las últimas semanas para dar con los responsables.
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