Secuestro en Bogotá salpica al sobrino del comandante del Ejército, general Nicacio Martínez

Revista Semana denuncia que la víctima fue movilizada en un carro asignado al director de los Gaulas Militares, el teniente coronel César Augusto Martínez.
Un nuevo escándalo sacude a las Fuerzas Militares tras la publicación que reveló detalles del secuestro ocurrido el pasado 20 de julio en Bogotá.
El sujeto, que estaba esposado y con una manta camuflada, fue rescatado el 25 de julio en un operativo de la Policía. En el lugar se encontraron prendas del Gaula Militar.
De acuerdo con Semana, a la víctima la abordaron presuntos miembros del Gaula Militar, que le habrían presentado una aparente orden de captura y se lo llevaron en un carro.
Al día siguiente, la mamá del joven recibió una llamada, supuestamente de las Autodefensas, en la que le exigían el pago de $800 millones por su liberación; por lo que decidió dar aviso a las autoridades.
Y entonces comenzaron a darse resultados en la investigación.
"Por medio de las cámaras de seguridad identificaron el vehículo en el que secuestraron al joven. Se trataba del carro asignado al director de los Gaulas Militares, el teniente coronel César Augusto Martínez, sobrino del comandante del Ejército Nicacio Martínez", dice la revista Semana.

Pero ahí no termina todo: este artículo también señala, con documentación adjunta, que el Gaula Militar de Cundinamarca, al mando del coronel Yeison Calvo Gómez, estaría inflando resultados mediante el registro de delitos.
"Un hombre y una mujer fueron detenidos en el aeropuerto El Dorado de Bogotá cuando intentaban abordar un vuelo con destino a Madrid. Llevaban consigo una consola de          videojuegos dentro de la que las autoridades encontraron 16 kilos de cocaína. Al día siguiente, la Fiscalía los imputó por el delito de tráfico, fabricación y porte de estupefacientes. No obstante, en el reporte operativo del Gaula apareció, además, el delito de concierto para delinquir con fines extorsivos. ¿Cómo graduaron de extorsionistas a dos mulas capturadas en flagrancia?", cuestiona la revista.
Además, advierte que algunos oficiales estarían siendo presionados para firmar comisiones ficticias con el objetivo de inflar los gastos operacionales
Ante estas denuncias, Noticias Caracol ha buscado respuesta de las Fuerzas Militares, pero ninguno se ha pronunciado al respecto.
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