El Gobierno colombiano rechazó este martes las declaraciones del propietario de un reconocido restaurante, que sugirió que la minifalda que lucía una joven pudo incidir en el presunto abuso sexual que ella dijo haber sufrido en el establecimiento, ubicado en las afueras de Bogotá.
La denuncia de la joven derivó este martes en una declaración del dueño del restaurante Andrés Carne de Res (ubicado en el puesto 24 entre los 50 mejores de América Latina, según la premiación realizada en septiembre en Lima por la revista británica "Restaurant"), Andrés Jaramillo, de que el vestido de la chica, de 19 años, era inapropiado.
"Una niña que llega (al establecimiento) con un sobretodo y debajo una minifalda, ¿a qué está jugando?, y después para exculpar pecados diga que la violaron", comentó Jaramillo en diálogo con Blu Radio
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El caso de la presunta violación, que ha causado una polémica en Colombia, y las declaraciones de Jaramillo fueron rechazados por la Alta Consejera para la Equidad de la Mujer del Gobierno, Nigeria Rentería, quien señaló que tales agresiones no se debe justificar de ninguna manera.
"Dichas declaraciones conllevan un mensaje de justificación de la violencia sexual hacia la mujer, en el que responsabiliza a la joven de la posible agresión a causa de la ropa que vestía, responsabilidad que incluso extiende a la familia de la presunta víctima", señaló Rentería en un comunicado emitido por su oficina.
Agregó que la violencia contra las mujeres supone un delito en Colombia, que "vulnera sus derechos y nada la justifica".
"En este sentido, este tipo de declaraciones reproducen estereotipos de discriminación y violencia que requieren el rechazo tajante de toda la sociedad", enfatizó la Consejera del presidente colombiano, Juan Manuel Santos.
Rentería instó a las autoridades a que realicen las investigaciones para esclarecer el caso.
La Policía investiga la denuncia de los familiares de la joven que supuestamente fue violada en la madrugada del pasado domingo en Andrés Carne de Res, restaurante ubicado en la localidad de Chía, próxima a Bogotá.
Según las autoridades, "un grupo de jóvenes llegó a departir, se encontraron con otro grupo de muchachos y ya en horas de la madrugada, según lo que se ha podido establecer, una de la niñas fue llevada al estacionamiento y fue accedida sexualmente".
El dueño de Andrés Carne de Res relató, por su parte, a la emisora Blu Radio que la joven se sentó con un individuo de aproximadamente 45 años de nacionalidad española en la mesa y hubo "escenas exageradas de contacto de piel".
"Posteriormente fue presentada a otro hombre de 35 años con quien bailó en la pista de forma bastante lanzada y se dirigen a la parte posterior del establecimiento", agregó Jaramillo, quien sugirió que la relación pudo ser consentida.