Este hecho sin precedentes en la historia en unos de los municipios más azotados por la violencia en la guerra contras las FARC, es otro paso de paz.
Uno de los casos es la de la casa de César Tulio Moreno, habitante de Argelia que había sido secuestrado en dos oportunidades. Su vivienda sufrió graves daños por los cilindros bomba que lanzaba las FARC en sus tomas guerrilleras.
“Además de los daños morales, las viviendas y la situación que vivíamos día y noche con esa zozobra, de esperar a qué hora llegaban los cilindros, las ráfagas de fusil”, contó Moreno, habitante de Argelia.
Esos eran otros tiempos, habitantes del municipio aseguran que con la firma de la paz terminó también la zozobra para ellos.
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“Pues la esperanza es lo último que se pierde, siempre nosotros teníamos la ilusión de que algún día podríamos vivir en paz”, indicó Gregorio González, habitante de Argelia.
Este sábado 15 de julio, los ciudadanos madrugaron a retirar las trincheras de la estación de Policía que para ellos, era el último símbolo de la guerra que por años vivieron.
Con esto, habitantes y autoridades esperan que llegue inversión social a esta apartada región ya que tienen problemas en educación, salud y vías.
La siguiente meta para Argelia es erradicar progresivamente los cultivos ilícitos.
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