Jorge Eliécer Vélez escondió las extremidades de la mujer de 70 años y mediante engaños consiguió que las guardaran en la nevera de una tienda en Barranquilla.
El resto del cuerpo de Aracelis Amador fue encontrado por vecinos envuelto en una alfombra en su apartamento.
Durante la audiencia, Vélez Amador mostró arrepentimiento frente al resto de su familia por el crimen de la prestamista, cometido el pasado viernes hacia la una de la tarde en el barrio Riomar.
“Pido perdón a mis primos, pido perdón a Dios, a mi familia, a la justicia, a todo el mundo... No sé qué me pasó, me dejé llevar por problemas económicos que tenía; estoy muy arrepentido y me allano a los cargos”, declaró el hombre.
Según las pruebas recogidas por la Fiscalía y Medicina Legal, el confeso homicida, de 49 años, habría propinado un solo golpe con un martillo a su víctima para luego proceder a descuartizarla con una segueta.
Videos de una cámara de seguridad en los que aparece Vélez Amador y la factura de la ferretería que confirma la compra de tres hojas de segueta, un martillo de caucho, una machetilla y un rollo de cinta negra, encontrados más tarde en la escena del crimen, lo vinculan con el homicidio.
La Fiscalía aseguró que el material probatorio es suficiente para dictar medida de aseguramiento mientras se adelanta el proceso judicial.
Asimismo, el ente acusador recolectó testimonios que relacionan a Jorge Eliécer Vélez Amador con el macabro plan para evitar el pago de la deuda que sostenía con su tía.
De acuerdo con los investigadores, Aracelis Amador ignoró los antecedentes penales de su sobrino, entre los que se encontraba una condena de nueve años por homicidio, y lo contrató para cobrar el dinero que ella prestaba al interés.
Jorge Vélez se quedó con parte de la plata que recogía entre los clientes de su tía -unos 200 millones de pesos de acuerdo a la Fiscalía- y se los gastaba en rumbas.
Al verse descubierto por Aracelis planeó a sangre fría el crimen.
Updated: junio 10, 2019 11:00 a. m.