Además de su invaluable labor como bomberas, estudian, trabajan y algunas son madres y esposas. Conózcalas.
Las mujeres que integran el Cuerpo de Bomberos de Cali eligieron vivir el riesgo, la adrenalina y las altas temperaturas, pues apagar incendios es una de sus fortalezas. Luz Adriana Velásquez es una de ellas y lleva 19 años como bombera forestal en la capital del Valle del Cauca.
“Conté con el apoyo de mis padres, mi esposo, toda mi familia me apoyó”, afirma la valiente socorrista.
Luz Adriana sostiene que el entrenamiento en el Cuerpo de Bomberos de Cali es parejo y no hay diferencia entre hombre o mujer. Por lo tanto, en casa no se sabe la hora de su llegada y, aun así, sumado al riesgo al que a diario se enfrenta, el mayor de sus cuatro hijos quiere seguir sus pasos.
“Con el paso del tiempo uno va creciendo y va entendiendo por qué ella ejerce esa labor y el compromiso. Mi voluntad ahora es entrar a la convocatoria para ser bombero”, asegura Adrián David Espinosa.
Keidy Jharledy Yepes Escué tiene 21 años, lleva dos en el Cuerpo de Bomberos de la capital del Valle del Cauca y es la cara de las nuevas generaciones.
“Me han tocado ya varios incendios muy grandes que han afectado bastante a Cali. Estuve en el de Cristo Rey que consumió 150 hectáreas y en el de la Castilla donde fueron como 160”, señala la bombera.
Al apreciar de lejos los incendios no se alcanza a dimensionar lo que estas valientes mujeres viven frente a las llamas. Un infierno sin agua ni alimento.
“Estar ahí en medio de la candela, del incendio, y usted saber que tiene que sacar fuerzas de donde no las tiene eso es bastante fuerte”, afirma Keidy.
Juan Gabriel Serna Méndez, uno de los compañeros de estas bomberas, reconoce y destaca la importante labor que, con pasión y entrega, ellas realizan todos los días.
“Siempre son como nuestras niñas. Es muy bueno saber que tenemos apoyo de las mujeres, porque ellas son berracas y trabajan parejo con los demás”, dice el bombero.
En los bomberos de Cali también hay dos mujeres maquinistas, mueven con destreza vehículos de aproximadamente cinco toneladas. Su experticia es fundamental cuando atienden el llamado de una emergencia.
“Se trata de llevar de manera confortable, rápida y muy segura a mis compañeros a las emergencias”, señala Mery Hanneth Rodríguez, maquinista del organismo de socorro.
Con valentía estas mujeres, 63 en total, y los demás bomberos de la capital del Valle del Cauca atendieron el año anterior 11.911 emergencias, de las cuales 595 fueron incendios forestales.
Updated: febrero 25, 2019 09:24 a. m.