Las autoridades en Bogotá descubrieron que el cantante de música popular Alan Ramírez había preparado una fiesta para su cumpleaños 26 y en la que nadie cumplió con los protocolos de bioseguridad para evitar el coronavirus .
El intérprete del famoso tema ‘Venga, que no es pa’ eso’ invitó a 400 personas a su celebración, pero, según un investigador de la Policía, “llegamos muy temprano porque habríamos podido encontrar más, tipo dos de la mañana”.
Cuando las autoridades arribaron al sitio, frente a la Clínica Corpas, en la localidad de Suba, eran las once de la noche y había alrededor de 250 invitados, entre ellos varios menores de edad.
“La gente está tomando esto por juego”, lamentó el uniformado, pues en el sitio nadie guardaba distanciamiento y la mayoría no usaba tapabocas.
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La fiesta, decían, iba a ser una de las mejores del año, porque hasta la torta la hicieron a gusto del artista, con forma de moto.
Después de la medianoche anunciaban la presentación de un famoso cantante, pero no se ha establecido quién era.
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De Alan Ramírez nadie dio razón y nunca apareció, por lo menos mientras la Policía estuvo en el sitio, casi hasta las tres de la mañana, imponiendo multas a 103 personas porque los demás asistentes lograron esconderse y eludir la ley. Quién sabe si consiguieron hacerle el quite al COVID-19.
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