El procurador general de la Nación, Alejandro Ordóñez, emitió el siguiente comunicado, a propósito del anuncio del presidente Juan Manuel Santos de suspender durante un mes los bombardeos contra los campamentos de las FARC:
"1. El anuncio se traducirá en la parálisis de la fuerza pública en contra de las FARC, mientras ese grupo continúa afectando con diversos delitos a la población civil.
La orden de no seguir bombardeando campamentos ilegales de las FARC es realmente un cese bilateral disfrazado y un golpe más a la moral de las Fuerzas Militares de Colombia.
2. Las FARC persisten en su política de extorsión, intimidación, terror y de delito contra la población civil. En eso no hay ninguna reducción de las acciones del grupo, tal como lo han expresado ante la Procuraduría General de la Nación numerosos alcaldes, personeros y oficiales de las Fuerzas Militares y de la Policía Nacional. La orden que amarra a la fuerza pública en contra de esa guerrilla desprotege peligrosamente a los ciudadanos.
3. Es evidente que el Gobierno ya decidió aceptar la imposición de las FARC de un cese bilateral antes de la firma del Acuerdo de Terminación del Conflicto, aún con la posibilidad de que este no se llegue a firmar.
Se debe aclarar si en la práctica esa decisión implica la suspensión inmediata de toda operación ofensiva de superficie contra las FARC.
No se entiende que el Presidente excuse en su declaración los posibles “enfrentamientos” que se puedan dar como consecuencia del “control militar del área” que corresponde hacer a la Fuerza Pública, cuando se supone que se ordena es suspender únicamente los bombardeos y no todas las operaciones ofensivas. El Presidente debe ser claro y preciso.
4. El Presidente debe señalar cómo hará su gobierno para evitar que la suspensión de los bombardeos contras las FARC termine por beneficiar al ELN y a las Bacrim. En ciertas zonas del territorio nacional tales grupos actúan coordinadamente y en algunos casos desarrollan actividades criminales concretas de forma conjunta.
Cuando las FARC se muevan con miembros del ELN, ¿éstos últimos tendrán blindaje ante los bombardeos y se beneficiarán con la orden dada por el Presidente?
Cuando lo hagan junto a las Bacrim, ¿tampoco éstas podrán ser atacadas?
O, ¿en esos casos las Fuerza Pública podrá bombardearlos o atacarlos, según corresponda?
5. Estamos ante un cese al fuego bilateral disfrazado. La Fuerza Pública tiene una obligación constitucional que ni siquiera por orden del Presidente de la República se puede omitir, pero, además, porque las FARC siguen delinquiendo y generando víctimas. No se puede paralizar a las Fuerzas Militares y de Policía Nacional en contra de ese grupo cuando continúan sus actividades criminales".
NO ES UN CESE BILATERAL: DE LA CALLE
El proceso de paz del Gobierno y las FARC avanza hacia la terminación del conflicto armado, manifestó este miércoles el jefe negociador oficial, Humberto de la Calle, quien dijo estar más optimista con los diálogos que se celebran en La Habana.
"Estamos caminando de manera correcta hacia la consecución del fin del conflicto", señaló en una rueda de prensa en Bogotá en la que explicó los alcances de la decisión anunciada el martes por el presidente Juan Manuel Santos de suspender por un mes los bombardeos a campamentos de las FARC.
De la Calle matizó que "sería una irresponsabilidad decir que hemos llegado a un punto de no retorno" en los diálogos iniciados en Cuba en enero de 2012, pero subrayó: "siempre tuve una posición moderada de optimismo y esa dosis moderada es mayor".
El funcionario precisó que esos 30 días son "un periodo de prueba adecuado" para poder hacer una evaluación del impacto de la medida en la generación de confianza entre las partes y de esta forma seguir avanzando en la reducción de la intensidad del conflicto armado, que debe conducir al final del proceso a un cese el fuego bilateral e indefinido.
"Creemos que en el próximo ciclo (de diálogos en Cuba) vamos a impulsar otros gestos de desescalamiento", agregó en la rueda de prensa celebrada en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo.
Explicó de la Calle que esos posibles nuevos gestos para bajar la intensidad de la guerra pueden ser "por la vía de acuerdo" como se hizo el pasado sábado, cuando las partes anunciaron que comenzarán a trabajar en la retirada de las minas antipersona sembradas en el territorio nacional, o por medio de "decisiones unilaterales", como la suspensión temporal de los bombardeos.
Entre las decisiones unilaterales de las FARC en esta dirección está, además de su cese el fuego unilateral e indefinido, el anuncio de que dejarán de reclutar menores de 17 años, recordó.
De la Calle reiteró que la suspensión de bombardeos "es una medida de construcción de confianza en términos de un propósito final que es la terminación del conflicto armado", que no afecta la seguridad ni las operaciones militares de control territorial o contra otros grupos al margen de la ley como el Ejército de Liberación Nacional (ELN) o las bandas criminales.
De igual forma fue enfático al señalar que la medida tomada por Santos no es un cese bilateral del fuego "disfrazado" como han señalado los críticos de los diálogos de paz, pues subrayó que "aquí no hay acantonamiento, no hay repliegue de fuerzas".
"Todas esas decisiones han sido coordinadas y tomadas con las Fuerzas Militares y de Policía, no es una decisión de espaldas a ellos. No hay parálisis de la Fuerza Pública, tampoco es un cese bilateral disfrazado", enfatizó.
De la Calle rechazó además que el Gobierno esté haciendo "concesiones" a las FARC a cambio de poco o nada y dijo que el Estado continúa actuando contra esa guerrilla en todo el territorio nacional.
Updated: marzo 11, 2015 09:12 a. m.