Un fuerte accidente de tránsito sufrió Pastor Alape, uno de los comandantes de la extinta guerrilla de las FARC, en carreteras de Antioquia. El carro en el que se movilizaba hacia Medellín se volcó y los dos escoltas del exsubversivo resultaron heridos. El hecho se registró en la vereda Montañitas de Barbosa, en la vía que comunica al municipio de Puerto Berrío con Medellín, precisó la emisora Blu Radio. Agregó que el automotor blindado asignado a Pastor Alape se llevó la cerca de una vivienda y por poco impacta el inmueble.Información preliminar indica que el integrante del Partido Comunes y excandidato a la Alcaldía de Puerto Berrio salió ileso del accidente de tránsito, pero sus dos escoltas, asignados por la Unidad Nacional de Protección, quedaron heridos y tuvieron que ser llevados a hospitales. Quien reviste mayor gravedad sería el conductor del carro, pues al parecer sufrió fractura de cráneo y amputación de la oreja derecha. En cuanto al segundo guardaespaldas, presentó dolor en el pecho y es observado por los médicos. De acuerdo con la información recopilada por Blu Radio, el primer reporte de la Policía Nacional apunta al exceso de velocidad como posible causa del accidente de tránsito del carro de Pastor Alape.¿Quién es Pastor Alape?Pastor Lisandro Alape Lascarro fue miembro del secretariado de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y jefe del bloque Magdalena Medio de la entonces guerrilla. Participó activamente en los diálogos de paz entre el grupo ilegal y el gobierno del presidente Juan Manuel Santos, en La Habana (Cuba). Desde su desmovilización, se ha desempeñado como líder político e integrante del partido Comunes.
Marc Gonsalves, uno de los tres contratistas estadounidenses que estuvo secuestrado cinco años por las extintas FARC, cuestionó duramente la petición del gobierno de Gustavo Petro de pedir la libertad de Simón Trinidad.El liberado en la Operación Jaque manifestó en diálogo con Noticias Caracol en vivo que no cree que la liberación del jefe guerrillero, quien paga una pena de 60 años de cárcel en Estados Unidos, precisamente, por ese secuestro, contribuya a la paz.Pocos días después de su liberación, en medio de la Operación Jaque, esta era la percepción de uno de los tres contratistas estadounidenses secuestrados por las FARC en 2003: “Las FARC no son revolucionarios, son terroristas, con T mayúscula”, mencionó Marc Gonsalves, el 7 de julio de 2008.Esta percepción de Gonsalves a la fecha no ha cambiado e insiste en ella al saber que el Gobierno colombiano solicitó el indulto de uno de los responsables de su secuestro.“La libertad de Simón Trinidad va a tener un impacto en la seguridad de la región, pero por lo negativo. ¿Qué puede hacer él por la paz? No puede hacer nada, este no es el negocio de él, el negocio de él es el terrorismo, negociar y extorsionar familias y, si no pagan, meten al secuestrado en un hueco y lo matan”, acotó Gonsalves.Para el estadounidense, es imposible creer en el supuesto compromiso de verdad y reparación de Trinidad con las víctimas.“Yo no veo que las FARC quieran hacer reparaciones a las víctimas porque han tenido bastante tiempo, tienen bastante plata para hacer eso y no lo han hecho. Entonces yo no creo que sea parte de las prioridades para ellos; ellos tienen otras prioridades”, manifestó el contratista, víctima del extinto grupo al margen de la ley."FARC presionan al presidente": Gonsalves sobre caso de Simón TrinidadPara Gonsalves, existen lo que él define como presiones de las FARC al gobierno colombiano.Así lo afirmó: “Seguramente las FARC están presionando al presidente de Colombia para hacer esto, seguramente, y de pronto el presidente quiere eso; de pronto el presidente quiere otro jefe de las FARC en libertad. Vuelvo a mis pensamientos: Simón Trinidad también fue uno de los jefes que estaba manejando las finanzas de las FARC y pienso que es posible que él tenga acceso a fondos que ellos quieren conseguir. ¿Quién más sabe? Solo ellos saben”.A pesar de firmar el acuerdo de paz, Gonsalves asegura que no perdona a los jefes de las FARC por su secuestro de más de cinco años.“Hay otros como Martin Sombra, como alias Gafas, como los jefes de ellos que yo no voy a perdonar”, dijo.Simón Trinidad está pagando una condena de 60 años de cárcel por el secuestro de los tres contratistas estadounidenses que fueron liberados durante la Operación Jaque, luego de completar más de cinco años en cautiverio.
El expresidente Iván Duque reaccionó este lunes a las afirmaciones que hizo el también exmandatario Juan Manuel Santos sobre el papel de su gobierno (2014-2018) tras la firma de los acuerdos de paz con la extinta guerrilla de las Farc hace ocho años.Las afirmaciones de Santos se dieron a conocer este domingo en una entrevista que le concedió a Juan Roberto Vargas, director de Noticias Caracol, en la cual habló, entre otros temas sobre la situación actual de los acuerdos de paz que su Gobierno firmó con las Farc en 2016, y que le merecieron el reconocimiento mundial con el Nobel de la Paz.Lea también: De “falsa” califica Emilio Archila afirmación de Santos sobre papel de Duque en acuerdos de paz "El acuerdo sigue siendo el acuerdo más completo, más ambicioso que se ha negociado hasta ahora. Mantiene un inmenso prestigio internacional. La primera fase del acuerdo de paz, porque los acuerdos después se dividen en dos: hacer la paz y después construirla, que es mucho más difícil. Lo hicimos en tiempo récord, se cumplió todo lo que llaman el DDR: el desarme, la desmovilización y la reintegración. Eso se cumplió muy bien y ahí comienza la implementación, y ahí es donde hemos fallado", expresó el expresidente Santos.(Lea también: Radiografía de los retos y avances del acuerdo de paz firmado hace 8 años con las extintas FARC).Para el exmandatario, "infortunadamente tuvimos cuatro años de un Gobierno que hizo muy poco por la implementación: el Gobierno Duque, que estaba inclusive en contra del acuerdo de paz y eso fue parte de su bandera política".Santos también habló sobre el papel del actual Gobierno, el de Gustavo Petro: "Dos años del presidente Petro, que infortunadamente tampoco ha avanzado mucho, no por falta de voluntad política, sino por física incapacidad, falta de organización del Gobierno, de gerencia del Gobierno. Entonces, llevamos seis años en donde la implementación ha avanzado muy poco".La respuesta de DuqueSin mencionar directamente a Santos, el expresidente Iván Duque reaccionó este lunes a la entrevista en cuestión, y particularmente a las afirmaciones que se hicieron en esta sobre su Gobierno."Los que pactaron con las Farc meter a Uribe a la cárcel, parar la aspersión aérea contra el narcotráfico, la impunidad por crímenes de lesa humanidad, curules sin cumplir penas y dejaron el país sumido en mermelada para gobernar, medios de comunicación fidelizados con pauta estatal y tapando sus vínculos con grandes entramados corporativos internacionales, quieren posar de pacifistas, experimentados y grandes gestores para ocultar su influencia y protagonismo en el desastre actual del país cuando son evidentes sus cuotas gubernamentales", escribió en su cuenta de X (antes Twitter).Más tarde, también desde su cuenta de X, comentó la entrevista que le concedió a Noticias Caracol Emilio Archila, consejero para la estabilización y encargada de implementar el acuerdo de paz en su Gobierno. El expresidente afirmó que, en esa entrevista, emitida este lunes en la mañana, Archila "desvirtúa las falacias de tantos oportunistas que se sienten la personificación de la paz, pero son los promotores de la impunidad que es la madre de nuevas violencias".Cabe mencionar que, en dicha entrevista, Archila calificó de “absolutamente falso” las afirmaciones de Santos. “Para tener una idea de qué tan comprometidos estábamos, nosotros no nos demoramos dos años en hacer un plan. A los dos meses y medio de haberse posesionado Iván Duque expedimos la política de implementación, a los dos meses habíamos pedido que las Naciones Unidas estuvieran con nosotros los meses que fueran necesarios”, sostuvo el exfuncionario del gobierno de Duque.
Emilio Archila, consejero para la estabilización y encargada de implementar el acuerdo de paz en el Gobierno de Iván Duque, respondió a las críticas que el expresidente Juan Manuel Santos hizo al mandatario del Centro Democrático (2018-2022). Lo calificó de “absolutamente falso, totalmente falsa esa afirmación”.(Lea también: "Llevamos seis años donde la implementación de la paz ha avanzado muy poco": Juan Manuel Santos)“Para tener una idea de qué tan comprometidos estábamos, nosotros no nos demoramos dos años en hacer un plan. A los dos meses y medio de haberse posesionado Iván Duque expedimos la política de implementación, a los dos meses habíamos pedido que las Naciones Unidas estuvieran con nosotros los meses que fueran necesarios”, sostuvo el exfuncionario del gobierno que antecedió al de Gustavo Petro.Según él, “hoy hace tres años, cuando se estaba celebrando la firma de los acuerdos, no era un tema coloquial, estaba en Colombia el secretario general de la ONU y estaba felicitando al Gobierno colombiano por ser un ejemplo de implementación en el mundo”.Para implementación de los PDET “no había un peso”Archila aseguró que durante el gobierno de Duque “había que formular unos planes de desarrollo con enfoque territorial, los PDET. Nosotros recibimos dos durante nuestro tiempo. En el primer año y medio formulamos los otros 14, dejamos listos los planes”.Sin embargo, acotó, “para la implementación de esos planes, que es la gran transformación que necesita el país para colmar de Estado a esas regiones, no había ni un peso, cero plata. A nosotros no nos dejaron plata. Durante ese periodo de cuatro años conseguimos 16 billones de pesos, es más o menos lo que cuesta la primera línea del metro de Bogotá y lo dejamos ejecutando. Entregamos para esas regiones más de una obra por día”.Y criticó a la administración de Gustavo Petro, porque “lo que se necesitaba era que al otro día de que se posicionara el siguiente gobierno, si había cosas por mejorar, las mejorara, pero que se continuara, no que se tomaran dos años de estar pensando qué hacer”.Qué responde a las críticas al Gobierno Duque por objetar la ley estatutaria de la JEP“La JEP, la Justicia Especial para la Paz, constitucionalmente no necesitaba la ley marco para empezar a operar porque así estaba previsto en la Constitución. Donde se demoró dos años fue en el Congreso mientras la discutían, donde se demoró un año fue después en la Corte Constitucional cuando la estaban analizando. Entre los artículos que la Corte Constitucional tumbó y los que condicionó eran más de 20 artículos. El presidente Duque les presentó objeciones a seis artículos. Lo que dijo es no son convenientes y no son constitucionales, se los devolvió al Congreso. El Congreso no estuvo de acuerdo, nos los trajo. En la objeción nos habíamos demorado una semana y en un día, después de que el Congreso lo dijo, lo aprobamos. Yo personalmente me encargué de las relaciones con la JEP durante ese tiempo, hubo cero interferencias. Ni una sola carta, ni un solo momento en el cual no los apoyáramos en su labor”, explicó Archila al respecto.Aseveró que “aún durante el tiempo en que vino la pandemia, en que todas las agencias públicas tuvieron reducción de su presupuesto, de las pocas entidades a las que nunca les redujimos el presupuesto fue a la Justicia Especial para para la Paz. Le extendimos el mandato a la Comisión de la Verdad para que pudiera rendir los informes que estaban previstos y siempre trabajamos con la unidad de búsqueda para los desaparecidos. Así que ahí nuevamente hay un discurso político que realmente no corresponde con la forma como como actuamos”.(Lea también: Radiografía de los retos y avances del acuerdo de paz firmado hace 8 años con las extintas FARC)Dice Timochenko que, paradójicamente, a ellos les fue mejor con el Gobierno Duque. ¿Qué opina?“Seguramente así es. Cuando llegamos al Gobierno, legalmente estaba previsto que todo el apoyo para los excombatientes iba a terminarse. No iba a haber más apoyo. Incluimos algo que solamente se ha hecho una vez en la historia de los procesos de paz, y es que dijimos que vamos a acompañar el proceso de reincorporación por todo el tiempo que sea necesario hasta que se logre efectivamente la reincorporación. Diseñamos una hoja de ruta con ocho garantías. Ahí están los temas de vivienda, de salud, de empleabilidad. La vivienda no estaba prevista en los acuerdos, la incluyó el presidente Duque, y empezamos a trabajar en apoyar a los combatientes en cada uno de esos frentes de una manera planeada. Aparte de eso, les garantizamos la continuidad de los antiguos espacios territoriales”, dijo el exfuncionario al respecto.(Lea también: Rodrigo Londoño sobre acuerdo de paz con FARC: "Colombianos no lo valoramos, como el mundo lo hace")Si no existiera el acuerdo de paz, ¿Colombia estaría mejor o peor?Para Archila, “los acuerdos de paz son una gigantesca oportunidad por una razón: estaba previsto que se implementara continuamente durante 20 años. Las transformaciones que necesita el país requieren de trabajar continuamente durante 20 años. En política pública hay una cosa muy triste y es que cuatro, y cuatro, y cuatro y cuatro años no son 16, son cuatro veces cuatro, y quiere decir cuatro fracasos si no se hace de una manera continua. Hay que pararle bolas a la Corte Constitucional y hay que oír cuando la corte, en términos jurídicos, dijo hay que construir sobre lo construido. No podemos darnos el lujo de perder esa oportunidad. Lo estamos haciendo hace 200 años y en periodos de cuatro años no ha funcionado”.¿Qué ha dicho Duque sobre pronunciamiento de Santos?Sin mencionar nombres, el expresidente publicó este lnes un mensaje en sus redes sociales en el que manifestó: “Los que pactaron con las FARC meter a Uribe a la cárcel, parar la aspersión aérea contra el narcotráfico, la impunidad por crímenes de lesa humanidad, curules sin cumplir penas y dejaron el país sumido en mermelada para gobernar, medios de comunicación fidelizados con pauta estatal y tapando sus vínculos con grandes entramados corporativos internacionales, quieren posar de pacifistas, experimentados y grandes gestores para ocultar su influencia y protagonismo en el desastre actual del país cuando son evidentes sus cuotas gubernamentales”.
Este 24 de noviembre se conmemoran 8 años de la firma del acuerdo de paz entre el Estado colombiano y la exguerrilla de las FARC. Un pacto que, aunque ha tenido avances, también tiene grandes retos en materia de implementación.(Lea también: “Hemos perdido control del territorio en muchos municipios”: Juan Manuel Santos habla en Noticias Caracol)El desarme de 13.000 hombres y mujeres generó esperanza en los territorios más afectados por la violencia. Sin embargo, hoy el panorama es agridulce. Así lo dijo a Noticias Caracol en vivo Rodrigo Londoño, presidente del Partido Comunes y exlíder de las extintas FARC: “Ha avanzado, no como quisiéramos, no como supondríamos que a ocho años de la firma debería estar ya esa reincorporación nuestra”.Los retos desde la firma del acuerdo de pazLa destinación y ejecución de los recursos para la paz es uno de los puntos más cuestionados. Raúl Delgado, director de la Agencia de Renovación del Territorio, manifestó que, “sin duda, los recursos son insuficientes, y por eso el gran reto para mí será fortalecer las fuentes de financiación del programa PDET”.Por otro lado, desde 2017 se han ejecutado 88,5 billones de pesos, lo que representa el 45% de lo proyectado para 15 años. Carlos Hernán Rodríguez, contralor general de la República, reveló que “desde 2018 hasta el primer semestre de 2024, se han detectado 511 hallazgos, de los cuales 102 tienen incidencia fiscal por 141 mil millones de pesos”.El deterioro de la seguridad es otro de los puntos más preocupantes tras la firma del acuerdo de paz: 1.691 líderes sociales y 435 firmantes de paz han sido asesinados; además, se han registrado 64 masacres con 222 muertos.(Lea también: Remando por la Paz: el sueño de los excombatientes de las FARC que naufraga en el Caquetá)Aunque la tasa de homicidios a nivel nacional es de 14 por cada 100 mil habitantes, en los municipios catalogados como programas de desarrollo con enfoque territorial, PDET, llega a 22,7.Carlos Ruíz Massieu, jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, dice que “el tema de seguridad siempre ha sido el de mayor preocupación, precisamente porque hay que proteger la vida, la integridad física de los firmantes, de sus familias y de las comunidades”.Pese a esto, el Gobierno y los organismos internacionales resaltan que el 86% de los firmantes sigue acogido al proceso y el 90,5% de ellos tiene proyectos productivos.¿Por qué han crecido las disidencias de las FARC tras firma del acuerdo?“La mayoría de quienes integran hoy las disidencias, y las disidencias de las disidencias, y esos grupos criminales que están dedicados solo al narcotráfico y a la minería ilegal, es nuevo reclutamiento en los territorios”, sostuvo Juan Fernando Cristo, ministro del Interior.Camilo González Posso, coordinador negociaciones de paz con disidencias, aseguró que “el acuerdo de paz ha servido y hoy tenemos una situación de muchísima menor violencia, pero, por supuesto, con violencias regionalizadas”.Tareas pendientes del acuerdo de pazUno de los seis puntos del acuerdo de 310 de páginas es la solución al problema de las drogas ilícitas. Sin embargo, las hectáreas de coca, en 2023, crecieron un 10%, y la producción de cocaína un 53%. Por otro lado, el rezago en la compra y formalización de tierras es claro: el país está lejos de alcanzar la meta de tener 3 millones de hectáreas en el fondo de tierras para entregar a víctimas y firmantes.Según Juan Felipe Harman, director Agencia Nacional de Tierras, “de cada 10 predios que ofertamos para firmantes, prácticamente son rechazados seis, en gran medida por la estigmatización que tiene esa población”.También está pendiente la reparación a las víctimas del conflicto armado. A la fecha, solo el 17,3% de ellas ha recibido indemnización y, a este ritmo, advierte la Fundación Ideas para la Paz, el Estado colombiano tardaría más de 50 años en cumplirlas.(Lea también: Víctimas de conflicto critican ante ONU implementación de acuerdo de paz por el Gobierno)"El 50% de los acuerdos de paz fracasan en los primeros 5 años, pero no es nuestro caso": SantosEl expresidente y Nobel de Paz, Juan Manuel Santos, publicó un video en redes sociales por los 8 años de la firma del acuerdo de paz."El 50% de los acuerdos de paz fracasan en los primeros cinco años, pero ese no es nuestro caso. El acuerdo está vigente gracias al compromiso de víctimas; firmantes de paz; líderes sociales; Fuerzas Militares y de Policía; Estado, empresarios, sociedad civil y por supuesto, y muy importante, la comunidad internacional", afirmó.Aseguró que el pacto firmado el 24 de noviembre de 2016 en el Teatro Colón de Bogotá con Rodrigo Londoño fue "para el país, no para las FARC". "Era un acuerdo ambicioso que no solo buscaba el fin del conflicto largo y atroz, sino la transformación de las condiciones que para muchos lo originaron, como la enorme desigualdad en el campo (...) las limitaciones a la participación democrática o el problema de los cultivos de uso ilícito", añadió.Y lanzó críticas por el poco avance del acuerdo de paz: "En los últimos seis años, la implementación se ha visto entorpecida. En los primeros cuatro por falta de voluntad política y en los últimos dos por la falta de capacidad para articular las entidades del Estado y encaminarlas a cumplir el objetivo de manera integral como estaba pensado".Además, lamentó que "las condiciones de seguridad se han empeorado drásticamente con el recrudecimiento de la violencia y la proliferación de disidencias (de las FARC) y grupos armados", a los que les hizo "un llamado enérgico a respetar la vida y los derechos humanos de las comunidades y entender de una vez por todas que están asfixiando al pueblo colombiano al que dicen defender"."Es hora de que demuestren su voluntad de paz, si es que la tienen, con hechos reales", señaló Santos.
Juan Manuel Santos, expresidente de Colombia y ganador del nobel con el que la extinta guerrilla de las FARC firmó los acuerdos de paz hace 8 años, habló con Juan Roberto Vargas, director de Noticias Caracol, sobre la situación actual de Colombia y de Latinoamérica.Esta es la entrevista completa con el Nobel de Paz:¿Qué opina de las actitudes del presidente Gustavo Petro?Espero que nuestras instituciones sean lo suficientemente fuertes para no permitir que ese tipo de ataques vayan a afectar la institucionalidad del país. Sí hace daño porque si se taladra y se taladra, algo queda de esa insistencia. Por ejemplo, lo de la Registraduría me parece muy traído de los cabellos. Afortunadamente, todos los exprocuradores salieron a decir que eso no tiene ningún sentido.Las elecciones en Colombia fueron siempre respetadas, aquí nadie está diciendo que hubo fraudes, esa legitimidad es parte de los activos de la democracia. El presidente ganó, fue elegido alcalde. A menos que esté queriendo controlar el poder electoral para alguna marrulla, pero afortunadamente las instituciones son fuertes para no permitirlo.Las autocracias tienen unas recetas preestablecidas: llegan al poder usando la vía democrática, pero comienzan a socavar las instituciones, a debilitar el poder judicial, a debilitar el poder legislativo, a debilitar la prensa, a apropiarse del sistema electoral y entonces así se quedan. No estoy acusando al presidente Petro, pero algunas de las actitudes pueden interpretarse en esa dirección. Repito, no va a poder, si esa es su intención, no va a poder.¿Álvaro Uribe o Gustavo Petro?En mi caso, ninguno de los dos porque se fueron a los extremos, se radicalizaron, y hace poco salió un artículo en El País de España, los trinos que se cruzan con odio personal, con unos ataques personales, ¿y eso qué hace? Ellos tienen muchos seguidores. Eso fomenta el odio en la gente, fomenta la polarización, le da leña al fuego de la polarización, y la polarización lo que hace es volver las democracias inoperantes. Entonces yo añoraría que dejaran de pelear en esa forma y se sentaran a tener acuerdos básicos.Son muy parecidos: los dos necesitan enemigos para mantenerse políticamente vivos. Entonces, si no los tienen, se los inventan. Pero ambos son peleadores, a ambos les gusta pelear; entonces, se sienten más cómodos peleando el uno contra el otro que sentándose a hacer acuerdos. Yo sé que hacer acuerdos muchas veces es difícil, pero es lo que las democracias necesitan.(Lea también: Uribe arremete contra el presidente Petro: "Es propio de las dictaduras")Si un titular dijera ‘El expresidente Juan Manuel Santos dice que Uribe y Petro son los grandes responsables de la polarización que vive Colombia’, ¿es acertado?Que la están alimentando, sí.En países como Argentina, El Salvador, están ganando los famosos outsiders. ¿Se puede imponer eso en la campaña que viene?Estamos sufriendo el efecto de gobernantes que no aprendieron a gobernar, que llegaron a aprender a gobernar. El propio (Iván) Duque no tenía mayor experiencia y mire lo que le entregó a Petro. Y esta izquierda realmente está aprendiendo a gobernar y ha cometido muchísimos errores. Yo espero que en las próximas elecciones la experiencia de quien llegue a gobernar sea un factor que influya mucho en quién va a votar por él.Algunos de los que están rondando como precandidatos me recuerdan a Goyeneche. Muchas veces uno en la política tiene que ir en contra de la corriente, tomar decisiones impopulares. Lo que no puede uno hacer es unirse al coro destructivo, y eso es lo que infortunadamente, con las redes sociales pasa. Entonces, entre más grita uno, más insulta, más aplausos tiene. Hay que resistirse a eso, ir en contra de eso, muchas veces es difícil, pero a la larga es lo que sale adelante y lo que conviene.A mí me dijeron no se meta en el proceso de paz, le va a costar su capital político. Me costó el capital político y me tocó nadar contra la corriente, pero perseverando y teniendo un norte fijo y un norte claro, así es que debe hacerse la política, liderazgo ético y de largo plazo, eso es lo que le falta a Colombia y al mundo, pensar en el largo plazo. Y en este momento en que estamos viviendo esos problemas, seguir tomando decisiones en función de las próximas elecciones nos va a llevar a todos, a Colombia y al mundo, al caos.¿Cuáles van a ser los problemas más delicados con los que va a quedar Colombia cuando termine el Gobierno de Petro?Seguridad, porque infortunadamente no vemos cómo eso se está mejorando. Me preocupa muchísimo el tema de la salud. Ya estamos viendo que mucha gente está diciendo ‘no me dan los medicamentos, no me atienden’, y si eso se vuelve una bola de nieve, pues aquí va a haber un descontento enorme. Y la parte económica, no podemos seguir financiando programas sociales sin tener fuentes de financiación y sin tener algo que es muy importante, no importa si uno es de derecha o de izquierda, que es responsabilidad fiscal.¿Qué implica la reforma al Sistema General de Participación?La idea de volver al espíritu de la Constitución del 91 para descentralizar más el país es una buena idea, pero algunas ideas mal ejecutadas pueden ser muy costosas, y no nos digamos mentiras, si no hacen primero la ley que va a determinar cuáles responsabilidades asumen las regiones con esa plata que les va a llegar y cuáles responsabilidades deja de tener el gobierno central, si eso lo dejan para después, tenga la seguridad por razones políticas, de que eso va a ser un desastre, y eso va a ser una bomba nuclear para nuestra estabilidad fiscal, porque cuando aprueben las reformas a las transferencias, el aumento, sujeto a una reforma de las competencias, cuando se discute la reforma de las competencias comienzan las regiones, los alcaldes, los gobernadores, que tienen una gran influencia en el Parlamento a decir ‘no me ponga eso’, pero ya está la reforma. Entonces la ley que salga de ahí va a ser muy endeble y el desequilibrio fiscal que eso genera es fatal para el país.(Lea también: Expertos advierten sobre consecuencias de aprobar el proyecto de reforma a las transferencias)¿En Colombia hay petrosantismo?Eso es como cuando me dicen que yo era de las FARC, que yo era el comandante Santiago. Yo no apoyé a Petro, no voté por él. Lo que le he dicho a Petro es que por favor implemente el proceso de paz, que en eso va a tener todo mi apoyo, y hasta ahí. Pero eso del petrosantismo es porque tal vez hay exministros míos que están trabajando con él.Juan Fernando Cristo está haciendo una buena labor porque está tratando de volver a resucitar la implementación del proceso de paz y ha venido avanzando, y ojalá avance como tiene que avanzar y ojalá tenga el respaldo de los demás ministros y del presidente. Pero él no es cuota mía. Nunca mencioné a Cristo ni el presidente me mencionó. Yo fui a decirle (a Petro) ‘ojo con Venezuela’.¿Dónde deja el resto de mi gobierno? Germán Vargas no es precisamente petrista, el general Naranjo, Mauricio Cárdenas, exministro de Hacienda; María Ángela Holguín. La mayoría de los ministros están, o en la oposición o de presidentes de los gremios. Que algunos estén con Petro es porque tienen capacidades y Petro los reclutó, pero ninguno de ellos es cuota mía. Yo no soy petrista, no seré petrista, apoyaré al presidente, cualquiera que sea, en las cosas buenas y criticaré las cosas malas. Y así lo dije desde el principio.¿Qué luces hay y qué sombras hay ocho años después de la firma del acuerdo de paz?El acuerdo sigue siendo el acuerdo más completo, más ambicioso que se ha negociado hasta ahora. Mantiene un inmenso prestigio internacional. La primera fase del acuerdo de paz, porque los acuerdos después se dividen en dos: hacer la paz y después construirla, que es mucho más difícil. Lo hicimos en tiempo récord, se cumplió todo lo que llaman el DDR: el desarme, la desmovilización y la reintegración. Eso se cumplió muy bien y ahí comienza la implementación, y ahí es donde hemos fallado, porque infortunadamente tuvimos cuatro años de un Gobierno que hizo muy poco por la implementación: el Gobierno Duque, que estaba inclusive en contra del acuerdo de paz y eso fue parte de su bandera política; y dos años del presidente Petro, que infortunadamente tampoco ha avanzado mucho, no por falta de voluntad política, sino por física incapacidad, falta de organización del Gobierno, de gerencia del Gobierno. Entonces, llevamos seis años en donde la implementación ha avanzado muy poco.Rodrigo Londoño ha dicho les terminó yendo mejor en el Gobierno Duque que en lo que lleva Petro.Yo espero que ahora, con lo que se ha anunciado en estas últimas semanas, con la llegada del ministro Cristo, que llegó a poner cierto orden, visibilizó otra vez la implementación del proceso y está haciendo un inmenso esfuerzo para implementarlo, si recibe el apoyo y es capaz de articular el resto del Gobierno, ojalá se pueda avanzar de aquí a que termine el Gobierno en la implementación, porque es que la implementación lo que hace es beneficiar a Colombia entera. Ahí están los problemas que Colombia tiene hoy en día. Por ejemplo, el problema de seguridad en esas regiones; el tema de las tierras, ahí se ha avanzado muy poco.Ocho años después, ¿la JEP ha cumplido su cometido?La JEP ha trabajado muchísimo, pero sí se ha demorado demasiado en producir las sanciones, que es lo que todo el mundo está pidiendo. Y yo espero que más temprano que tarde comience a aplicar las sanciones, que es parte fundamental de la justicia. Ahí creo que se ha demorado. Yo les he pedido muy respetuosamente que no sean maximalistas, como le dije en su momento a los de la Comisión de la Verdad. Que no busquen la verdad absoluta de lo que pasó en 50 años de guerra porque eso es imposible. En estos acuerdos lo que hay que buscar es suficiente verdad o suficiente justicia. Mucha gente va a quedar descontenta, pero siendo maximalistas de pronto nos quedamos sin el pan y sin el queso. Muchas de las víctimas con las que yo hablaba permanentemente me decían ‘yo no quiero que me den plata. ¿Cuánto vale mi papá? ¿Cuánto vale mi hijo o mi hija? Yo quiero es que me digan la verdad, por qué lo hicieron, que reconozcan. Para eso es la justicia transicional.¿Algún día se podrá cerrar la herida en Colombia?Yo creo que sí. Toda herida puede cerrarse si hay ánimo de reconciliación.¿Le ve pies y cabeza a la paz total que está promoviendo el Gobierno de Petro?No hubo planeación, se echaron al agua sin saber nadar. Entonces, por ejemplo, ese señor Danilo Rueda, primer comisionado, no tuvo ningún problema en permitirles a las disidencias de las FARC que se llamaran Estado Mayor de las FARC y darles ese reconocimiento. Y mire cómo han crecido esos miembros de las disidencias. Y además, por ejemplo, en el caso nuestro nosotros no aceptamos cese al fuego. Dijimos ‘habrá cese al fuego cuando tengamos acuerdos y nada está acordado hasta que todo esté acordado’, y eso funcionó. Ahora lo que han hecho es cese al fuego sin negociarlo, inclusive de cómo se va a verificar, y eso ha sido aprovechado por estos grupos para incrementar su control territorial porque lo que están buscando es control del territorio para tener sus negocios que son mafias.¿El orden público está desbordado, expresidente Juan Manuel Santos?Está en serios problemas porque hemos perdido el control del territorio en muchos municipios, las Naciones Unidas hizo un informe hace unas semanas y dijo que hay más de 400 municipios donde el control del territorio lo está perdiendo el Estado.¿Cómo ve a las FF. MM. frente a la paz total?Uno tiene que tener una política de seguridad, que es lo que también ha faltado. Una política integral de seguridad, no una cosa aquí y otra allá, es una política de seguridad que les dé a las Fuerzas Armadas una guía, una visión. Ellos tienen que saber qué tienen que hacer y para dónde tienen que ir. Hoy están bastante confundidos porque les dicen que hay cese al fuego, pero entonces los otros vienen y les hacen un ataque. Hay una gran confusión.Juan Manuel Santos fue nombrado presidente de los Elders, ¿qué son?Somos un grupo pequeño, doce, que creó Nelson Mandela en 2007, y lo creó con unas personalidades que representaban el mundo entero, con experiencia para trabajar por la paz, para trabajar por un planeta sostenible, por la defensa de los derechos humanos.Nosotros hemos identificado cuatro riesgos existenciales para el mundo: el primero es el cambio climático, el segundo es la posibilidad de una guerra nuclear, el tercero son las pandemias, porque se viene otra pandemia, y el cuarto riesgo existencial lo hemos identificado como la inteligencia artificial. Estamos trabajando sobre esos cuatro riesgos para mitigarlos.El riesgo nuclear se ha incrementado geométricamente. Lo que estamos viendo es que inclusive Rusia ya amenazó con usar sus armas nucleares. Pero no solamente eso, sino que el arsenal se ha venido incrementando y sobre todo, la tecnología para lanzar las bombas nucleares se ha incrementado también en forma impresionante. Entonces, el riesgo de un incidente nuclear se ha aumentado.(Lea también: Esto es lo que se sabe del nuevo misil hipersónico ruso)¿Y lo que está pasando en Medio Oriente?Esta acusación de la Corte Penal Internacional contra (Benjamin) Netanyahu, yo espero, tal vez pensando con el deseo, que eso acelere un cese al fuego y que se puedan sentar a negociar.¿Qué frente abre la llegada de Donald Trump con este escenario que Juan Manuel Santos describe?Para nadie es un secreto que Trump no cree en el cambio climático, se retiró del Convenio de París y dice que se va a volver a retirar, ojalá no lo haga. En materia de pandemias nombró a un ministro antivacunas. En materia de guerra nuclear no sé si tenga la visión, por ejemplo, que tuvo el presidente (John F.) Kennedy de coger el teléfono y hablar con (Vladimir) Putin y hablar con el premier chino y decir ‘sentémonos a negociar un nuevo acuerdo para reducir el riesgo nuclear’. Ese es el tipo de liderazgo que el mundo necesita ver, un liderazgo audaz que piense en el largo plazo.¿Cómo ve Juan Manuel Santos a América Latina?Mal, infortunadamente. Yo, en mi vida, nunca había visto a América Latina tan desintegrada. Usted ve a Ecuador que no se habla con México, Argentina no se habla con Brasil, Colombia no se habla con Perú. Entonces estamos muy desintegrados, en un momento donde si estuviéramos unidos tendríamos una capacidad de influir en el mundo como nunca la hemos tenido por lo que está sucediendo; por ejemplo, en materia de cambio climático, biodiversidad y en energías alternativas, América Latina tiene un inmenso potencial. Tenemos los minerales necesarios para la transición energética, pero si no nos unimos para hablar como una región en una sola voz, no vamos a ninguna parte.¿Qué viene para Venezuela, con un régimen que dice ‘a mí no me importa nada’?Venezuela se está volviendo como Nicaragua. Ahí lo único que veo yo en este momento es que internamente comience a agrietarse el apoyo que tiene (Nicolás) Maduro. Yo no veo infortunadamente, ninguna posibilidad de negociar con él. Él no ha abierto la puerta, todo lo contrario, cualquier negociación la rechaza; entonces, o hay una fractura interna o vamos infortunadamente a tener a Venezuela como a Nicaragua durante un poco tiempo.¿Para Juan Manuel Santos ha sido clara la posición del Gobierno Petro frente a Venezuela?No. Ha sido timorata. Yo se lo dije a Petro, esa negociación que se está queriendo hacer, si se prolonga, se vuelve complicidad con el régimen venezolano, y eso es lo que ha sucedido. Entonces, yo espero que el Gobierno Petro no vaya a reconocer a Maduro cuando Maduro se posesione.El mismo Petro ha dicho que exige para el reconocimiento que se presenten las actas. Las actas no se van a presentar. Entonces, ¿qué va a hacer? Espero que no reconozca a Maduro.
Rodrigo Londoño, conocido como Timochenko en las épocas de la guerra, habló con María Alejandra Villamizar, analista política de Noticias Caracol, sobre los ocho años del acuerdo de paz entre la otrora guerrilla de las FARC y el gobierno del entonces presidente Juan Manuel Santos. "Hace ocho años firmamos este acuerdo, un acuerdo no para nosotros, no en función de favorecernos, como tendenciosamente algunas voces lo han querido dar a entender de que está en función de favorecernos a nosotros, de privilegiarnos, de buscar impunidad. No, este es, en buena medida, un proyecto de país y, por tal, es el país que lo debe asumir hoy. En estos años está el acuerdo más vivo, incluso mucho más vivo que en otros aniversarios", recalcó Londoño, ahora presidente del Partido Comunes.(Lea también: víctimas del conflicto estudiaron medicina en Cuba y volvieron a Colombia)Según el excomandante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el actual Gobierno levantó la bandera de la paz y marcó el "propósito de la implementación a rajatabla, dijo el presidente Petro, de este acuerdo". Eso, en palabras de Timochenko, "ha permitido entenderlo más en su poder transformador y muchos sectores de la sociedad colombiana, lo hemos venido viendo y sintiendo, también están entendiendo el poder transformador de este acuerdo y por lo cual se está trabajando en función de su implementación en su letra y en su espíritu, que es muy importante".En cuanto a la reincorporación de excombatientes y su vinculación a la sociedad, Rodrigo Londoño subrayó en Noticias Caracol en vivo que se ha avanzado, "no como quisiéramos, no como supondría uno que a ocho años de la firma debería estar ya, no digo al 100%, pero sí es un porcentaje mucho mayor a lo que está ahora. Pero está avanzando y se han tomado decisiones en estos últimos días muy importantes, como la prolongación en el tiempo del plan marco de implementación, algo que a nosotros nos llena de satisfacción y nos permite decir que comenzamos a ver una lucecita al final del túnel".¿Cómo califica el papel del Gobierno Petro en la implementación del acuerdo con las FARC?Ha habido críticas, en todo caso, a la administración Petro por la implementación de lo pactado con las FARC. ¿Por qué? Ante esta pregunta de María Alejandra Villamizar, Timochenko respondió: "El presidente recibió la implementación muy mal. Recuerden que tuvimos un gobierno (Duque) que tenía como bandera hacer trizas los acuerdo de paz. No ha sido fácil incluso para el mismo presidente, digo yo, comprender y entender el poder transformador de este acuerdo en su letra y en su espíritu, pero creo que la dinámica, las mismas críticas que hemos hecho, públicas algunas, la gran mayoría las hemos hecho de manera reservada y los escenarios que corresponde y lo seguiremos haciendo, cada que lo veamos, porque por una crítica no se destruye un proyecto político y menos un proyecto como este de construir paz en Colombia a partir de la reconciliación de los colombianos". Agregó Rodrigo Londoño que en el Partido Comunes y entre los desmovilizados recibieron con satisfacción el nombramiento de Juan Fernando Cristo como ministro del Interior. Recalcó respecto al jefe de Estado que "sabemos vemos que tiene muchas dificultades, lo entendemos, lo comprendemos, pero se van haciendo los ajustes en el camino. Hay gente que a veces se atraviesa de manera no tendenciosa, o por agendas personales, pero creo que esa la conversación y que comience a funcionar la institucionalidad del acuerdo, que ha sido uno de los temas más difíciles". Insistió quien firmó la paz con Juan Manuel Santos en que las 310 páginas del acuerdo "hacen parte de la Constitución del país y son un instrumento muy importante para el presidente y para los demás funcionarios a la hora de ir a implementar lo que allí está planteado. Eso está comenzando a coger forma". Rodrigo Londoño cuestiona demoras de la JEPMaría Alejandra Villamizar le recordó a Rodrigo Londoño que la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) ha imputado a FARC por dos delitos muy graves, el reclutamiento de menores de edad y la violencia sexual, y que eso generó algunos reparos. Al respecto, el exguerrillero acotó: "No hemos sido sancionados. Es la gran frustración nuestra y la gran frustración del país y la frustración del mundo. En el caso 01, del secuestro, ya estuvimos en la audiencia pública, que fue una audiencia de cara a la sociedad colombiana, y esta es la hora que todavía no aparecen las sanciones. Todavía hay magistrados que siguiendo investigando algo que ya reconocimos. Si ya reconocimos algo, ¿por qué se va a seguir investigando? Sobre ese tema del reclutamiento, cuánto hace que estuvimos en audiencia con los magistrados haciendo el reconocimiento de que fue un hecho que sí, que no debió haber pasado. Por eso estamos diciendo: hombre, ya es hora de que aparezcan las sanciones".Finalmente, Rodrigo Londoño defendió el proceso de La Habana y lo firmado en el Teatro Colón de Bogotá, un pacto que permitió poner fin a casi 60 años de una confrontación armada que tiñó de muerte y luto a Colombia. "Yo acabo de hacer una gira por Europa en función de hablar del acuerdo y aquí los colombianos no valoramos como, valga la redundancia, valoran en el mundo este acuerdo... cómo preguntan, las inquietudes que genera, en un momento en que el mundo se está sumiendo en la guerra, en el conflicto, la barbarie de Gaza, lo de Ucrania y todos los demás conatos de conflictos. Y se está viendo y lo dicen personalidades muy importantes del mundo, este acuerdo es una lucecita que nos da al mundo la posibilidad de buscar caminos para resolver los conflictos a partir del diálogo y de la conversación".(Lea también: excombatientes de las FARC se preparan para competencia de rafting en Chile)
La Sala de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) anunció la imputación en contra del antiguo secretariado de las FARC por crímenes atroces relacionados con el reclutamiento forzado y violencia sexual contra menores de edad. Según las investigaciones, entre 1996 y 2006, un total de 18.677 niños y niñas fueron reclutados, una dolorosa realidad en la historia del conflicto armado en Colombia."Mi infancia fue un tormento"Recientemente, Los Informantes conoció el desgarrador testimonio de 'Clara', una joven que fue reclutada a los cinco años y que sufrió múltiples abusos, incluyendo violaciones y abortos forzados, reflejando el horror vivido por miles de menores en el país.“Mi infancia fue para mí un tormento, porque tenía cinco años cuando fui reclutada por parte de la guerrilla. Yo estaba jugando con unos compañeritos afuera de la casa... me taparon la boca, me pusieron algo en la cabeza y me llevaron”, recordó la joven sobre cómo fue raptada de su hogar.>>> La pesadilla de una joven reclutada cuando tenía solo 5 años: "Mi infancia fue un tormento"Pese a su corta edad, señaló que fue entrenada y aprendió a usar todo tipo de armas. “Cuando nos hacen ese reclutamiento nos entrenan, nos enseñan cuáles son los fusiles, los revólveres, las armas, nos enseñan todo”. No aprender o incumplir con las reglas impuestas podía significar crueles ‘castigos’ para los menores reclutados, según su testimonio. “Hacen como si fuera el Desafío, hacen ciertas cosas y nosotros tenemos que pasar por ciertas cosas y el que no llega tiene un castigo, el castigo es golpe, arrastración y las mujeres violación”, afirmó.El sufrimiento que vivía día a día la llevó a tomar la decisión de huir para salir de ese “tormento”. “Me hice amiga de una niña, y al ver cómo le dispararon y se la llevaron, dije ‘no, yo me tengo que escapar de aquí’. Duré un año allá, a los 6 años y medio me escapé”.>>> Duro testimonio de un matrimonio a los 14 años: “Sufrimiento, llanto y soledad”Huida y reencuentro con el horrorDurante un enfrentamiento se logró escapar y llegó hasta la casa de sus padres. La familia decidió mudarse a Venezuela, pero cuando las cosas se pusieron difícil en el país vecino regresaron.‘Clara’ pensó que el reclutamiento ya era un tema del pasado, pero al volver al país volvió a ser víctima de este flagelo."En mi pueblo me reclutaron otra vez, a los 9 años y medio, las Autodefensas Gaitanistas. Me cogieron yendo para el colegio, me agarraron por la espalda, me dormí y cuando desperté estaba en Caquetá”, señaló.>>> El ‘milagro de Armero’: la historia no contada de la bebé que nació en el lodoProducto de los abusos, quedó embarazada. “Me lo tuvieron que sacar a golpes, porque ninguna mujer puede tener hijos (allá)”, recordó con notable dolor por lo sucedido.Por no cumplir una tarea, ‘Clara’ fue violada. Ella tuvo dos abortos a golpes. Estuvo dos años en las autodefensas, salió de allí a los 11 años.A los 14 años tuvo un hijo con su novio, pero asegura que él nunca respondió económicamente por el bebé. Más adelante fue víctima de violación por parte de tres hombres y quedó embarazada. Relata que la Unidad de Víctimas la ayudaron con el aborto.>>> Error en entrega de restos del Palacio de Justicia: mujer lloró a asesinos de su esposo por décadasEsperanza de JusticiaHoy, con 20 años, sigue esperando justicia en su caso. Su testimonio es la triste realidad de cientos de niños en Colombia.Según la Defensoría del Pueblo, en el primer semestre de 2024 al menos 159 niños no durmieron en sus casas y mañana no irán al colegio, sino que cargarán un arma.Reviva la historia de Los Informantes aquí:
En la mañana de este 13 de noviembre, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) imputó como máximos responsables por el reclutamiento y utilización de niños y niñas para la guerra a seis exintegrantes del antiguo secretariado de las FARC .>>> Le recomendamos leer: Clara Rojas y los recuerdos del infame secuestro: “Estuvimos un mes sin comer ni hablar"El alto tribunal indicó que se imputó por este crimen a: Rodrigo Londoño Echeverry, Jaime Alberto Parra Rodríguez, Milton de Jesús Toncel Redondo, Pablo Catatumbo Torres, Pastor Lisandro Alape y Julián Gallo Cubillo.De igual modo, la jurisdicción les atribuyó haber cometido crímenes de guerra contra los menores de edad “en el contexto de la vida intrafilas, incluidos malos tratos, tortura, homicidio y violencias sexuales, reproductivas y por prejuicio”.La JEP entregó una escalofriante cifra, pues “entre 1971 y 2016, las extintas FARC-EP reclutaron a 18.677 niños y niñas. Estos hechos ocurrieron con mayor frecuencia entre 1996 y 2016, marco en el cual la sala concentró su investigación”.¿Qué determinó la JEP sobre este caso?La Jurisdicción Especial para la Paz explicó que la Sala de Reconocimiento “determinó que cada uno de estos comparecientes, con sus acciones y omisiones durante su vida activa en la guerrilla, son responsables de cinco patrones macrocriminales determinados”.Se refiere a:Reclutamiento y utilización de niños y niñas, incluidas personas menores de 15 años: con este patrón se llama a reconocer la responsabilidad a los seis comparecientes como “coautores mediatos por el crimen de guerra de reclutar o alistar niños y niñas o utilizarlos para participar activamente en las hostilidades”.Malos tratos, torturas y homicidios en contra de niños y niñas reclutados en el marco de su vida intrafilas: la sala llama a reconocer la responsabilidad “a los comparecientes como coautores mediatos de los crímenes de guerra de tratos crueles, tortura, condenas dictadas y ejecuciones sin previo juicio ante un tribunal regularmente constituido, con todas las garantías indispensables”.Violencias reproductivas que afectaron a niñas reclutadas: este aborda los ultrajes contra la dignidad personal y homicidio.Violencias sexuales en contra de niños y niñas reclutadas: la JEP “la sala llama a reconocer responsabilidad a los comparecientes como autores por mando (por omisión) y no por autoría material directa, por los crímenes de guerra de tortura, violación, esclavitud sexual y el crimen de cualquier otra forma de violencia sexual que constituya también una violación grave del artículo 3 común a los cuatro Convenios de Ginebra”.Violencias basadas en el prejuicio en contra de niños y niñas reclutadas con orientación sexual o identidad o expresión de género diversas: se pide reconocer la responsabilidad por los “crímenes de guerra de tortura, de violación, de esclavitud sexual y el crimen de guerra de cualquier otra forma de violencia sexual que constituya también una violación grave del artículo 3 común a los cuatro Convenios de Ginebra”.El magistrado Alejandro Ramelli Arteaga, presidente de la JEP, subrayó que “este fallo riguroso fue construido a lo largo de seis años y fue respetuoso siempre de la dignidad y la intimidad de las víctimas". Además, la magistrada Lily Andrea Rueda Guzmán, comentó que en este caso participan 9.854 víctimas, entre ellas, 8.903 pertenecen a cinco pueblos indígenas afectados y otras 951 hacen parte de víctimas individuales, en donde se incluyen a sobrevivientes directos y familias que continúan en la búsqueda de menores reclutados que fueron desaparecidos.>>> Lea, además: El magistrado Alejandro Ramelli es el nuevo presidente de la JEP: ¿cuál es su trayectoria?
Regresó al país el primer grupo de graduados de Medicina en Cuba, que estudiaron con becas otorgadas en el marco del proceso de paz con las FARC. Los nuevos profesionales llegarán a regiones apartadas para cuidar la salud de sus compatriotas.>>> También puede leer: Presidente Petro recibe medalla de la paz por parte de universidad de MéxicoLuego de siete años lejos de Colombia, un grupo de colombianos que decidieron apostarle a la paz regresaron, pero ya no son víctimas de la guerra; ahora son médicos graduados en Cuba, a donde viajaron en septiembre de 2018 en busca de un mismo sueño. Randy Santamaría hace parte de los becados.¿Se imaginó en algún momento estudiar medicina?"Antes de las becas no, pues siempre se había soñado el hecho de poder ser médico; era algo que estaba dentro de uno. Llegar de pronto de niño con algún tipo de enfermedad, ver a esa persona con una bata blanca, y se veían como héroes. Poder ejercer nuestra labor como médicos y llevarle salud a todas las comunidades nos sentimos en total garantía de las funciones para poder ejercer esto muy bien preparados", dijo Santamaría.Viajaron a la isla para aprender a salvar vidas, pero también para sanar sus propias heridas. Ahora regresan con nuevas ilusiones en el corazón y están listos para apostarle a la salud de sus compatriotas.De acuerdo con Adela Pérez, coordinadora de becas, "de este primer grupo de médicos graduados, todos escogieron municipios de los más apartados del país. Hay algunos que se van para el Guaviare, otros que se van para La Guajira y todos vienen con la motivación de servirle a sus comunidades".Para 68 de ellos, empieza un nuevo comienzo. Así lo ratifica Santamaría: "Realmente es un llamado no solo a los actores del conflicto, no solo a quienes tienen los fusiles en la mano, sino a todo el pueblo colombiano. Podemos crearnos unas nuevas condiciones, un futuro diferente"."Mi comunidad es San Alberto, César. Una comunidad que ha sido víctima del conflicto armado, y pues genial que pueda hacer mi año rural, mi trabajo social, ahí en mi comunidad para poder impactar a esos lugares a donde no llegan los médicos", acotó Viviana Giraldo, médica graduada de la Escuela de Medicina de Cuba.El gobierno de Cuba habilitó 1.000 becas para excombatientes, víctimas del conflicto y gestores de organizaciones campesinas, y desde 2017 han viajado 774 colombianos seleccionados para este programa.>>> También puede leer: Nobel de Economía sobre presidente Petro: “Es como cualquier otro político colombiano”