El papá de Phoenix llegó al hospital con una sorpresa para su hija de dos años, que estaba a punto de recibir quimioterapia. Un momento de amor para compartir.
Brad Thompson supo que este día sería especial. Se vistió con su mejor traje y empacó con esmero el vestido amarillo de princesa que le regalaría a su adorable Phoenix.
La niña se encontraba en la habitación del hospital cuando una enfermera entró y le dio el traje de princesa que, según dijo, le había dado un voluntario. Una mentira piadosa para un bien mayor.
Todo hacía parte de un plan ingeniado por Brad para alegrarle la vida a su hija y celebrar su valentía.
“Hoy fue el último día de quimio de Phee en su primera ronda y papá vino de visita. Poco sabíamos que tenía algunas sorpresas para nosotros. Es decir, sinceramente, no creo haber podido elegir un hombre mejor para mis hijos. A los dos años de edad, esto es duro para ella, su familia y las personas que la aman”, escribió en Facebook Christina Thompson, madre de Phoenix.
Y es que Christina fue la encargada de grabar este momento inolvidable: el padre de la niña apareció como todo un príncipe azul, abrazó a su hija ya vestida con el traje amarillo y ambos comenzaron a bailar My Little Girl (Mi pequeña niña).
Phoenix fue diagnosticada con leucemia mieloide aguda el pasado 2 de agosto y casi de inmediato tuvo que someterse a un tratamiento agresivo en un centro médico de Atlanta, Estados Unidos.
“¿Mencioné que ella realmente ama a su papá?”, concluyó Christina al compartir el video cargado de una gran dosis de emoción.