
La historia de Manolo Cruz y su obra 'La ciénaga, entre el mar y la tierra', es una historia que parece de cine y que, en efecto, lo es. Es una mezcla entre la sensibilidad de un relato social y la crudeza del arte independiente; un testimonio de resistencia dentro y fuera de la pantalla. Manolo Cruz, a través de su película, tocó el corazón de los festivales de cine más importantes del mundo, luego de ganar una batalla legal por su propia identidad autoral de la misma.
¿Cómo nació la historia de 'La ciénaga'?
Esta historia comenzó en un viaje de Manolo, entre Santa Marta y Barranquilla, cuando contempló la división natural y brutal entre dos cuerpos de agua: la ciénaga grande, "quieta, moribunda y verdosa"; y al otro lado, a solo 200 metros, el mar, vibrante, azul profundo, violento. En ese punto de contraste nació una idea. ¿Qué tal si un hombre en condición de discapacidad, confinado a su cama y a un respirador, viviera allí? Tan cerca del mar como para oírlo, pero tan lejos como para no conocerlo jamás.
Ese hombre se llamaría Alberto Navarro y viviría en la Ciénaga Grande de Santa Marta. Tenía una enfermedad degenerativa que lo mantenía inmóvil, pero soñaba con ver el mar. Manolo Cruz decidió encarnar ese sueño en la gran pantalla, y así comenzó a escribir un corto que pronto se transformó en largometraje. Pero el sueño de una película independiente no llega sin sacrificio.
En 2014, cuando Manolo estaba guardando recursos para financiar el proyecto, sufrió un robo y perdió todo. Fue entonces cuando decidió lanzarse sin red de seguridad: "No tengo nada que perder", pensó. Comenzó a recolectar fondos con rifas, favores, aportes de amigos, colegas y otros soñadores como él. Con la ayuda de la gran actriz Vicky Hernández, quien no solo actuó como la madre de Alberto Navarro, sino que también se convirtió en mentora, 'La ciénaga, entre el mar y la tierra' tomó forma.

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"Esto se hizo a punta de amor, no con las uñas, sino con las yemas de los dedos", recuerda Manolo. El presupuesto era casi inexistente, el equipo reducido al mínimo y las funciones técnicas distribuidas por urgencia. Semanas antes del rodaje, el director de fotografía y la co-directora abandonaron el proyecto. Manolo ofreció entonces el cargo de co-director a Carlos Castillo, quien había invertido 35 millones de pesos, y designó a Roberpierre Rodríguez para la dirección de fotografía.
El rodaje duró 26 días. Manolo actuaba en cada escena, sin mover el cuerpo, sólo con la expresión facial. Luego, se encerró durante casi un año a editar las 25 horas de material. Hizo el montaje, la corrección de color, la música. Cuando finalmente tuvo un corte terminado, convocó al equipo para ver la película. Fue entonces cuando escuchó la frase que marcaría el comienzo del conflicto: "Es la peor película que he visto en mi vida", dijo Carlos Castillo. Manolo agradeció los comentarios, pero anunció que esa sería la versión que mostraría al mundo. Tres semanas después, 'La ciénaga' ganaba tres premios en Ventana Sur, el mercado cinematográfico más importante de América Latina. Luego llegaría la selección oficial en Sundance, y con ella, la controversia.
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La lucha por el reconocimiento
Ante el éxito de la película en festivales de cine, Carlos Castillo comenzó a exigir el crédito exclusivo como director. Alegó que estuvo presente durante el rodaje, mientras Manolo actuaba. Pero todo el proceso de preproducción, diseño artístico, desarrollo de personajes y posproducción había estado en manos de Manolo. Sin embargo, el conflicto escaló. Un día, Manolo recibió una llamada: "Hay una persona que está amenazando con demandar a Sundance Film Festival si no aparece como único director".
Descubrió entonces que alguien había enviado una versión de la película con los créditos alterados: su nombre había sido eliminado como director. "Lloré dos días seguidos", confesó. Pero sabía que si no autorizaba esa versión, 'La ciénaga' no podría circular por el mundo. Tuvo que tomar una decisión desgarradora: autorizó a que su película viajara sin su nombre, con tal de que se viera. Recordó la historia del sabio rey Salomón, que propuso partir un niño a la mitad para frenar la pelea de dos mujeres que aseguraban ser sus madres, solo una pidió que no le hiciera daño al niño.

Fue una decisión dolorosa, pero valió la pena. 'La ciénaga, entre el mar y la tierra' ganó el Premio del Público a Mejor Película Dramática Internacional en Sundance y el Premio Especial del Jurado en Actuación. Fue seleccionada para 34 festivales internacionales. Pero aún así, el conflicto legal seguía vivo.
'La ciénaga' ya tiene su nombre
Durante nueve años, Manolo tuvo que defender su obra en los tribunales. El caso llegó hasta la Corte Suprema de Justicia, que finalmente falló a su favor señalando que tanto Manolo Cruz como Carlos Castillo deben aparecer como co-directores de la película. La Corte reconoció el trabajo integral de Manolo en el desarrollo y finalización de la obra. "Es como si tuvieras un hijo que intentaron abusar muchas veces, pero vuelves y lo limpias, lo lavas e intentas borrar esos recuerdos para que siga viviendo y vea la luz", dijo.
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Hoy, 'La ciénaga, entre el mar y la tierra' está finalmente en las salas de cine colombianas. Se estrenó el pasado 29 de mayo de 2025. Es una película que invita a mirar el país con otros ojos. Que interpela la sensibilidad, el abandono, la belleza rota de nuestra costa Caribe. Pero que detrás de la pantalla también es un testimonio de lucha autoral, de dignidad creativa y de amor por el cine.