Ángel Beltrán Castro es uno de los colombianos que vive en Wuhan, ciudad china que fue cuna del COVID-19. En entrevista con Noticias Caracol, él contó cómo llegaron a tener la situación prácticamente superada.
“El día a día es en estos momentos normal. Desde el año pasado ha estado aislado y controlado todo lo que es relacionado con el virus. Hay muchos sistemas de código QR de salud que manejan el movimiento de personal, cuando se entra a un supermercado, a un centro comercial. Cuando llevamos a mi hijo a la escuela normalmente le toman la temperatura, le hacen una desinfección en los zapatos, todo es organizado”, dice.
¿Cuáles son las medidas que tienen ahora?
“En estos momentos, en Wuhan no hay restricciones, todo está abierto, todo se está moviendo, hay subsidios, apoyos financieros. El gobierno está presionando para que se mueva la economía. Wuhan es esa luz que le está demostrando al resto del mundo que se pueden cumplir las normas. El año pasado lo cumplieron por tres meses. Si se le dice a la gente 'siéntese en la casa', se sienta en la casa y se mantiene organizada. Sabe lo que tiene que hacer”, responde.
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Y agrega: “Aquí todo el mundo anda con máscara quirúrgica, que es una cosa que el gobierno refuerza con mensajes de texto a través de los operadores telefónicos”.
Finalmente, recalca que la vacunación por ahora no se ha implementado por que la ciudad está normal.
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“Todo el mundo mantiene su distancia, la verdad es saber mantener las normas de organización y protección. Se confía en el Estado”, puntualiza.
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