El checo Josef Šálek abandonó su vida de excesos y alcohol, cambiándolas por prácticas saludables para su cuerpo. En medio de un festival, fue declarado como el hombre con el récord Guinness por mantenerse casi 10 horas en posición de plancha abdominal.
Para muchas de las personas que practican deporte, la plancha abdominal es uno de los ejercicios más retadores, ya que la naturaleza de la misma hace que se trabajen músculos abdominales, lumbares y glúteos.
El terapeuta, conferencista y entrenador, quien es conocido como Joska, superó a Daniel Scali, anterior ganador del récord Guinness, en el festival Avatar en el Park Hotel en Pilsen, República Checa, el 20 de mayo de 2023. Aunque solo venció a Scali por 8 minutos y 46 segundos, el checo aguantó 9 horas, 38 minutos y 47 segundos en tabla abdominal.
Estuvo rodeado por personas que con tambores y palabras de aliento lo animaban para superar la meta. Así mismo, a su lado se mantuvo David Maršálek, quien durante un año preparó físicamente a Josef para que afrontara el desafío sin lastimarse, especialmente porque posee problemas en su espalda.
A pesar de que se mantuvo tranquilo, aceptó que entre la séptima y la octava hora su cuerpo comenzó a mostrar altos signos de fatiga, pero aseguró que el éxito de todo el proceso fue el aprender a dominar su propia mente.
“Mi técnica mental favorita, que estaba usando durante la plancha más larga, era la aceptación. Cuando aceptas la dificultad del ejercicio junto con el hecho de que la vida no se trata solo de las cosas agradables y fáciles, sino también de los elementos desagradables”, comentó Joska.
Más que un desafío físico, el reto de superación que tuvo que afrontar para llegar a ese punto de disciplina lo cambió como persona.
“Hace cinco años, tenía 15 kilos (33 lb) de sobrepeso, solía ser aficionado al alcohol y los cigarrillos. Cierto momento que me cambió la vida me llevó a esta transformación, así que lo que quiero darle al mundo es que, sin importar tu edad, puedes hacer cambios para sentirte más feliz, más vital y más saludable”, confesó el hoy ganador del récord Guinness.
El golpe que le brindó la vida para generar ese cambio en sí mismo se dio a que hace cuatro años, cuando mientras emprendía un viaje a Sri Lanka, fue detenido en el control de pasaportes de los Emiratos Árabes Unidos debido a un caso de identidad equivocada, lo cual lo llevó a estar en prisión durante meses.
Mientras estaba privado de la libertad, intentó mantener su actitud positiva mediante el deporte, adoptando una estricta rutina de ejercicios y hábitos de escritura.
Dice que su objetivo con romper el récord Guinness era precisamente difundir el mensaje de que no hay barreras para hacer cambios positivos en uno mismo.
“Hoy soy una persona feliz. Estoy agradecido por lo que viví y logré, porque hoy puede inspirar a muchos al hecho de que es posible superar cualquier circunstancia desagradable y empujar los límites físicos y mentales más allá de los horizontes de nuestra imaginación”, concluyó.
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