La pequeña T tiene 90 años y fue atacada por ratas mientras hibernaba.
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Jude Ryder, su dueña, la llevó hasta el veterinario quien le dijo que nada se podía hacer para salvar sus extremidades.
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Su hijo Dale, ingeniero mecánico, decidió entonces crear esta especie de silla de rueda con llantas de un avión miniatura, con los que T pudo volver a moverse.
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Los ataques de ratas a tortugas son más frecuentes de lo que se pudiera creer. En 2013, la tortuga más vieja de Gran Bretaña, Thomas de
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Esta luchadora logró salir adelante a pesar de haber quedado sin sus extremidades, gracias a unas ruedas que la ayudan a movilizarse.
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