La razón por la que Donald Trump perdió a su más fiel escudera

En plena recta final de la carrera por la reelección, Donald Trump acaba de perder a una de sus principales escuderas: Kellyanne Conway, quien lo acompañó desde la primera campaña y fue fundamental para lograr la entonces improbable victoria.

La asesora presidencial tuvo que tomar una dura decisión: la política o su familia.

Kellyanne Conway creyó en Donald Trump presidente cuando ni el entorno cercano lo creía. Asumió la dirección de la campaña en la recta final de 2016 y logró llevarlo a la Casa Blanca.

En estos años en que muchos lo han abandonado, ella ha seguido siendo una de sus más acérrimas defensoras.

“El presidente ha hecho más en 47 meses que Joe Biden en 47 años", asegura, en el mismo tono combativo de su jefe. Pero la familia ya no aguanta cuatro años más, dijo Conway.

Muchos se preguntaban en Washington cómo lo lograban. George, su esposo, es un abogado conservador que se distanció de Trump y pasó a liderar el proyecto Lincoln, un grupo de republicanos que le hace férrea oposición.

Los hijos se cansaron del tira y afloje, en especial Claudia, de quince años, que empezó a aparecer en redes sociales para desahogarse y, más grave aún, para apoyar a los demócratas.

Esta semana dio un paso más y, como es menor de edad, anunció que pedirá la emancipación, una figura legal para librarse de la autoridad de sus padres.

Y acusó a su madre de arruinar su vida con su trabajo y la tildó de egoísta.

Entonces, vino la decisión. Tanto Kellyanne como su esposo decidieron renunciar a sus trabajos. En su carta de renuncia, ella escribió: “Por ahora, y para mis queridos hijos, habrá menos drama y más mamá”.