"Las cuestiones de orden interno en Cuba no son negociables, como no son negociables para ningún otro país”, dijo la directora para América del Norte de la Cancillería de la isla, Josefina Vidal, en una entrevista con la televisión estatal.
“Nunca se pondrán sobre la mesa en este proceso de negociación cuestiones de carácter interno o cuestiones dirigidas a promover cambios en nuestro ordenamiento interno", agregó.
Vidal, que lidera el equipo de los negociadores cubanos en el diálogo con Estados Unidos para la normalización de relaciones, añadió que "fuera de eso, todo lo demás, todo lo que no atente contra la soberanía de un estado, puede formar parte de un proceso de negociación".
Cuba, según dijo, enfoca la nueva e "interesante" etapa iniciada con Estados Unidos desde "la mejor disposición" y con "espíritu constructivo", aunque consciente de los "retos", "dificultades" y "diferencias" que separan a ambos países.
"Estamos siendo bastante realistas en nuestro enfoque (...) para tratar de avanzar lo más posible en la solución de los problemas y al mismo tiempo tratar de aprovechar de la mejor manera posible las oportunidades que se nos puedan presentar", aseveró la diplomática cubana.
Preguntada si es optimista o pesimista sobre este proceso, Josefina Vidal se declaró "en el punto medio".
"No puedo decir que soy optimista total porque hay cosas que se salen de mi control, no todo lo puede controlar la parte cubana. Son dos países y del lado de Estados Unidos hay un Gobierno, un Congreso, una sociedad, un contexto político. Pero tampoco puedo decir que soy pesimista, de lo contrario no habríamos llegado al punto en el que nos encontramos", manifestó.
Sobre las nuevas medidas de Washington para levantar parcialmente las sanciones a la isla, Vidal cree que van en la dirección correcta pero son reducidas si se tiene en cuenta que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, tiene posibilidades ejecutivas "ilimitadas" para vaciar el contenido fundamental del "bloqueo", aunque es el Congreso quien finalmente tiene la potestad para "sepultar" el embargo.
También indicó que Cuba seguirá reclamando ante la Asamblea de Naciones Unidas el fin del bloqueo mientras se mantenga.
En relación a las expectativas que ha generado en la isla el deshielo con Estados Unidos, Vidal advirtió que se trata de un proceso donde "no todo va a tener solución en el corto plazo" y recordó que la primera fase es la normalización de relaciones diplomáticas, que es lo que se está negociando en este momento.
Dentro de esa fase se refirió a la demanda de Estados Unidos de eliminar las restricciones que impiden libertad de movimiento a sus diplomáticos en la isla y recordó que también los funcionarios cubanos que están en Washington tienen esas limitaciones.
Vidal dijo que Cuba está dispuesta a discutir sobre esa libertad de movimiento pero indicó que los diplomáticos estadounidenses deben cambiar de actitud en cuanto al apoyo y financiación a "elementos dentro de nuestro país que actúan contra los intereses del estado, el gobierno y el pueblo cubano", en referencia a la disidencia interna.
Recordó que la Convención de Viena establece claramente que los diplomáticos han de respetar las leyes del "estado receptor" y defendió la conducta "impecable" en ese sentido de los diplomáticos cubanos que trabajan en la Sección de Intereses de Cuba en Washington.
Tras el restablecimiento de vínculos diplomáticos con Estados Unidos vendría, explicó Vidal, el proceso "más prolongado" hacia la "normalización" bilateral.
Updated: febrero 03, 2015 10:03 a. m.