El mundo presenció cómo se dejó pasar otra oportunidad de ampliar los compromisos para frenar las emisiones de gases causantes del efecto invernadero.
Las negociaciones que debían terminar el pasado viernes se extendieron durante todo el fin de semana, convirtiendo el encuentro en el más largo de la historia.
El centro de discordia está en el artículo sexto del Acuerdo de París que busca la regulación de los mercados de carbono, es decir, un sistema de intercambio de emisiones entre países y empresas que producen en sus industrias este nocivo elemento.
El Gobierno brasileño, que niega la existencia del cambio climático, se pronunció sobre el polémico artículo:
"Desafortunadamente, a pesar de todos los esfuerzos de Brasil para ayudar a la ejecución del Acuerdo de París, no fue posible encontrar en cuanto a la reglamentación del artículo 6, un texto que fuera de común acuerdo", expuso el ministro de Ambiente de ese país, Ricardo Salles.
“Quiero saber: ¿Hubo una resolución para que Europa sea reforestada o sólo quieren molestar a Brasil? Es un juego comercial. No sé cómo las personas no entienden que es un juego comercial", sustentó el presidente Jair Bolsonaro.
El mandatario de Chile, Sebastián Piñera mostró su preocupación por la falta de acuerdos en la esperada reunión:
"Terminó la COP25 donde 195 países deben acordar por unanimidad pasos a seguir. Sin duda se lograron grandes avances. Pero no son suficientes frente al enorme riesgo y desafío que enfrentamos como humanidad por el cambio climático y el calentamiento global. Necesitamos más ambición".
El trabajo de mayor discusión queda para el próximo congreso, la COP26, que se celebrará en Glasgow en 2020. Durante el encuentro se buscará cerrar la brecha del Acuerdo de París y así evitar un aumento de temperatura de más de 1.5 grados centígrados a nivel mundial.
Updated: diciembre 16, 2019 04:10 p. m.