El presidente ucraniano, Petró Poroshenko, aseguró este miércoles que el establecimiento de la paz en el este de Ucrania es ahora mismo "el objetivo número uno" y subrayó que no permitirá que algunos políticos de su país "jueguen a la guerra" cuando "el pueblo quiere la paz".
"El pueblo de Ucrania está totalmente a favor (de la paz), pero algunos politicastros quieren jugar a la guerra. Pero quiero decir que no lo permitiré. Debemos luchar juntos por la paz", dijo el presidente ucraniano, citado por su gabinete de prensa, después de que su administración anunciara un acuerdo para un alto el fuego.
Poroshenko depositó sus esperanzas en que el "proceso de paz arranque por fin en próximo viernes en Minsk", en las consultas del Grupo de Contacto para Ucrania, y confirmó que esta mañana trató con su colega ruso, Vladímir Putin, "de qué manera se puede poner fin a los terribles acontecimientos" en el este de Ucrania.
"No se puede negar que la gente debe dejar de morir", subrayó el presidente ucraniano, quien también apuntó que deben cesar las continuas violaciones de los acuerdos, los fusilamientos de los prisioneros y de la población civil y la destrucción de los centros educativos y otras infraestructuras.
En un tono mucho menos conciliador, el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, calificó el plan de paz para Ucrania presentado hoy por el presidente ruso como un "intento de embaucar a la comunidad internacional" para evitar las nuevas sanciones de Occidente contra Moscú.
"Ese plan es un intento de embaucar a la comunidad internacional en vísperas de la cumbre de la OTAN y un intento de evitar las inevitables decisiones de la Unión Europea sobre una nueva ola de sanciones contra Rusia", dijo Yatseniuk, citado por la oficina de prensa del Gobierno.
El jefe del Ejecutivo ucraniano aseguró que "todos los acuerdos anteriores con Rusia -alcanzados en Ginebra, Normandía, Berlín o Minsk- fueron ignorados o sencillamente violados por el régimen ruso", al que Kiev acusa de apoyar con tropas y armamento a los separatistas prorrusos del este.
Para Yatseniuk, el mejor plan de paz para el este de Ucrania debería contener un sólo punto: la retirada de las tropas rusas y de las milicias separatistas de las dos regiones rebeldes, Donetsk y Lugansk.
El plan de Putin insta a los dos bandos a poner fin a cualquier acción ofensiva en el territorio de las regiones de Donetsk y Lugansk y señala que las tropas ucranianas deben retirarse de las inmediaciones de todos las ciudades a una distancia que impida su cañoneo con artillería.
Contempla también el control internacional del alto el fuego, el intercambio de retenidos y prisioneros mediante la fórmula de "todos por todos", la apertura de corredores para los refugiados y la ayuda humanitaria, la prohibición de bombardeos aéreos y el envío de especialistas para la reparación de las infraestructuras.
El presidente ruso anunció su plan, elaborado según él durante su vuelo a la capital de Mongolia, en vísperas de que la Unión Europea apruebe una nueva ronda de sanciones contra Rusia por su creciente intervención en la crisis de Ucrania.
También Ucrania atraviesa momentos delicados en su operación militar contra los separatistas debido a la exitosa contraofensiva de las milicias, que en poco más de una semana han recuperado decenas de localidades controladas por las fuerzas de Kiev y han abierto un tercer frente en el sur de la región de Donetsk.
Updated: diciembre 26, 2014 09:11 p. m.