Se llama Sawyer y, según el dueño del café en Japón donde funciona, realiza el trabajo de cinco personas sin afectar el sabor de la bebida. Temen despidos.
Dos hombres fueron arrestados por la muerte de Yoshiyuki Koguchi, quien llegó al hospital con un fuerte dolor de estómago luego de que lo lanzaran al suelo y le pusieran un compresor de aire por entre los pantalones.