Un juez de Mitú, capital del departamento de Vaupés, dictó una orden de captura contra un sujeto que es señalado de abusar de su hija, una menor de 13 años. Según la Fiscalía, producto de las violaciones, la joven quedó embarazada y dio a luz.Conforme a información revelada por el ente investigador, esta situación se dio a conocer gracias a una denuncia anónima en la que se detalló que los abusos sexuales iniciaron en el año 2015.Además, se indicó que en 2016 la menor quedó embarazada producto de las violaciones y posteriormente dio a luz.La investigación también puso en evidencia que la víctima manifestó que no quería vivir más con su progenitor, pues este la violentaba de manera sexual, no la dejaba salir de la casa y tampoco le permitía ir a estudiar.Con conocimiento pleno de la situación, las autoridades emitieron una orden de captura contra el sujeto, que es señalado de cometer el delito de acceso carnal abusivo con menor de catorce años en circunstancias de agravación.
Un juez de Mitú dictó medida de aseguramiento contra una mujer que se robó un bebé de apenas 12 días de nacido. Según información oficial, la hoy detenida aseguró a sus allegados que acababa de dar a luz.Conforme a lo reseñado por la Fiscalía General de la Nación, el hecho ocurrió el pasado 16 de agosto al interior de un resguardo indígena. Allí, la detenida “con engaños le arrebató el niño a su madre” y posteriormente huyó.No obstante, solo un día después, efectivos de la Policía Nacional la detuvieron. Los uniformados la encontraron en una vivienda en la que se escondía.Se conoció que la mujer intentó engañar a su compañero sentimental y le quería hacer creer que “había dado a luz a un hijo suyo”.Durante las audiencias, a la mujer se le imputó el delito de secuestro simple. Pese a que no aceptó los cargos, el juez del caso la envió a prisión.
Se conoció información de la operación militar en la que fue abatido alias ‘Jhonier’, cabecilla de las disidencias de las FARC, con 25 años de prontuario criminal y señalado de múltiples actos violentos en el suroccidente del país.La neutralización de este cabecilla en el suroccidente del país se dio el lunes 24 de enero alrededor de las 3:00 p.m. en medio de un operativo, donde un tirador de alta precisión del comando especial del Ejército Nacional dio de baja a alias ‘Jhonier’ en Tacueyó, Cauca.Puede leer: Mataron a Albeiro Camayo, excoordinador regional de la guardia indígena en CaucaSe le atribuyen actos terroristas como el carro bomba que explotó en marzo del año pasado en Corinto, Cauca. Además, también participó el 1 de noviembre de 1998 en la toma de Mitú, donde 41 personas terminaron muertas, entre policías, militares y civiles.Alias ‘Jhonier’ estaba afectando a las regiones del suroccidente colombiano, es decir, los departamentos de Valle del Cauca, Cauca y Nariño. Esto debido a que era el encargado de todas las rentas del narcotráfico.Vea también: Ataque al periodismo en Arauca: director de emisora comunitaria en Saravena fue amenazadoEste cabecilla daba instrucciones a las diferentes columnas de las disidencias de las FARC, como la ‘Adán Izquierdo’ para que afectara a campesinos, productores y agricultores de esta región del país.
Un bebé de 22 meses de nacido que fue herido con un proyectil de bala en el municipio de Mitú fue trasladado por una aeronave de la Fuerza Aérea Colombiana, FAC, para recibir atención médica especializada.El niño, perteneciente a la comunidad indígena acayaca, tuvo un traslado aeromédico hasta el Comando Aéreo de Transporte Militar, CATAM, para ser hospitalizado en Bogotá.Durante el vuelo, el equipo médico que tripuló la aeronave King 350 se encargó de mantenerlo estable.Según un comunicado de la FAC, la herida de este bebé se produjo de manera accidental.
Un helicóptero militar desapareció del radar cuando adelantaba una operación entre San José del Guaviare y Mitú.No arribó a ninguna de las pistas autorizadas para su aterrizaje.Otras aeronaves, que sobrevolaban con el Black Hawk en el operativo, adelantan su búsqueda.
“Por favor, por favor, les estamos rogando que pongan su mirada y su corazón en estos pueblos”, dice el padre Andrés Eduardo Muñoz, párroco de Carurú, Vaupés.Y es que esta vez su verdugo silencioso no es una fiera en la espesa selva o un caimán hambriento en el río Vaupés… su enemigo es el coronavirus.Una de las razones de este urgente llamado es que viven en límites con Brasil, país que ocupa actualmente el segundo lugar a nivel mundial en contagiados.Además, los carurenses advierten que, desde San José del Guaviare, a través del río Vaupés, llegan decenas de lancheros que traen remesas y al mismo tiempo personas que recogen en el camino. Muchos que huyen del virus, según cuentan.También se refieren a una migración desde Mitú.“En estos momentos tenemos noticias que se nos viene la gente que está en la ciudad de Mitú, desesperada buscando refugio en este municipio, ya que esta zona está limpia”, dice Ismael Rodríguez, habitante de Carurú.Temen contagiarse del COVID-19, más aún porque afirman que no tienen elementos de bioseguridad ni atención adecuada si alguien enferma.“Nos están llevando a un verdadero etnocidio, donde los mestizos, los negros y los afros estamos siendo olvidados de manera cruel”, sostiene el padre Andrés Eduardo Muñoz.Ellos no quieren que su historia tenga un epílogo como el de La Vorágine, la inmortal novela de José Eustasio Rivera: “Ni rastros de ellos... ¡los devoró la selva!”.
Junto a la fundación Vuelos de Alegría, el cantante vallenato llegó hasta el Vaupés para regalarle a los pequeños un día cargado de música, abrazos y fotos.
La aeronave, en la que no viajaban otros pasajeros, quedó incrustada en medio de los árboles. “Lo halé y lo halé hasta que lo logré sacar”, relató José Sabana, el indígena que rescató al hombre que conducía la avioneta que cubría la ruta Puerto Ñi – Mitú. El hombre fue trasladado al hospital de Mitú y su diagnóstico es estable. Las autoridades por ahora no se han pronunciado sobre el accidente. Una comisión permanece en el lugar para identificar las causas del accidente.
Algunos dicen haber perdonado a las FARC, pero piden verdad y reparación. Sienten tristeza, pero también orgullo por haber defendido con el alma la población. Uno a uno fueron descendiendo del avión los hombres que volvían dos décadas después a Mitú, la población que defendieron con todas sus fuerzas del cruel ataque del frente oriental de las FARC. Algunos de ellos aseguran que ya perdonaron a quienes asesinaron a sus compañeros y a quienes durante años los tuvieron secuestrados. "Sí, sí los perdoné; no hay rencores ni nada, no soy nadie para juzgarlos, es mi Dios quien toma la decisión con cada uno de ellos", señaló John Fredy García, policía que vivió el cruento ataque. Los uniformados que sobrevivieron al ataque de más de mil guerrilleros recorrieron las calles en donde se atrincheraron para defender a la población. Vea más: A 20 años de la sangrienta toma de Mitú, sobrevivientes siguen esperando la verdad Saludaron y abrazaron a los habitantes de Mitú y a pesar de la tristeza por lo que aquí perdieron se sienten orgullosos de haber defendido con hidalguía a los civiles. "Era una crónica de una muerte anunciada, sabíamos que iba ocurrir, no teníamos más que hacer, tratar de defendernos, defender nuestras vidas y la población", recuerda José Valencia. Pero además quieren que se sepa toda la verdad y se repare a las víctimas. "Queremos que así como estos guerrilleros tuvieron unos privilegios, esos privilegios sean retribuidos hacia las víctimas. No solo nosotros, también estamos hablando de los civiles de aquí de Mitú", señala Nelson Baquero. A Mitú también viajó la familia de Raúl Hernán Osorio Ochoa, desaparecido tras la toma. Su mamá le dejó flores en el monumento en memoria de quienes se sacrificaron en la defensa de esta población. "La Fiscalía nos dijo cuando fuimos allá que él estaba quemado y de todo pero igualmente no se ha resuelto nada, yo necesito aunque sea un huesito para enterrarlo, para saber que enterré un hijo", dice Lucrecia Ochoa, mamá del policía desaparecido. "Lo más importante es la verdad, que estas personas que han sido desaparecidas, 117 policías de las que aún no conocemos su destino, sus familias, finalmente puedan dormir tranquilas", expresó por su parte el ministro de Defensa, Guillermo Botero. En Mitú, el primero de noviembre, murieron 16 policías y 61 fueron secuestrados durante años. Las FARC ejecutaron a 11 civiles y durante la retoma de la población fallecieron 24 militares.
El primero de noviembre de 1998, las FARC se tomaron la población: 40 uniformados murieron y otros 60 fueron secuestrados. Tras las huellas del horror. Hace dos décadas, esa guerrilla tenía incendiado el país, el Estado colombiano estaba arrinconado tras los golpes de Las Delicias, Patascoy, El Billar y Miraflores. Sin embargo, faltaba el golpe más fuerte: las FARC arrasaron con una capital de un departamento, el primero de noviembre de 1998 se tomaron la población de Mitú, una incursión que todavía sigue en la impunidad. El general (r) Luis Mendieta Ovalle, quien para entonces era el comandante de la Policía en Vaupés, dice que en esa época la Policía había sido abandonada por el Estado. Incluso sostiene que desde septiembre del mismo año había advertido a sus superiores que la guerrilla se quería meter al pueblo. "No hubo una decisión presidencial en su momento para que los comandos de las diferentes fuerzas hicieran una gran operación en Mitú. No sé cuál sería el compromiso del presidente Pastrana con el secretariado de las FARC cuando hizo el acuerdo y la reunión antes de su elección y bajó la guardia pensaría yo", afirma el general Mendieta. Él estaba al mando de 76 policías cuando a las 4:30 a.m. el frente oriental inició la sangrienta toma de Mitú. El general Mendieta recuerda que los guerrilleros utilizaron "armamento pesado, bazucas de morteros, armas no convencionales como cilindros bomba cargados de explosivos plásticos y productos incendiarios". Entonces, ordenó a sus hombres tomar posiciones: con fusiles, pistolas y granadas se defendieron de la sevicia de más de mil guerrilleros de las FARC. "Pusieron el pecho, dieron todo de sí para defender sobre todo la institucionalidad y la democracia, por eso allí murieron en las trincheras, en los diferentes puntos, allí entregaron su vida”, cuenta. El entonces jefe de operaciones de la FAC, general (r) Édgar Alfonso Lesmes, recibía la información; rememora que la Policía estaba desesperada. En Mitú los aviones militares no podían aterrizar, habían destruido la pista, por eso la fórmula para respaldar a los policías era buscar una base en Brasil cercana a la capital del Vaupés. Mientras las Fuerzas Militares buscaban cómo llegar, el mayor Mendieta seguía defendiéndose, pero las FARC ganaban posiciones. A las 9:30 a.m. la estación de Policía estaba destruida, al igual que la casa cural, la Fiscalía, la zona comercial, el colegio y el Banco Agrario. Él y sus hombres fueron rodeados. "El teniente Rodríguez, en su momento tenía el radio, se comunicó con el avión fantasma y, al ver que las FARC estaban incursionando en la parte central y que prácticamente ahí nos iban a fusilar, él insiste al avión fantasma para que ametralle y bombardeé. Infortunadamente, el avión solo ametralló, pero no bombardeó, hubiesen muerto muchos hombres de las FARC", narra el general Mendieta. Allí, los subversivos lo encañonaron y lo obligaron a sacar a sus hombres de las posiciones de la arrasada estación de Policía. "Habían dejado la guerra de guerrillas que era dar el golpe y huir. Ya se estaban quedando en las poblaciones, entonces dijimos eso no puede ser así, no podíamos permitir que se fueran a quedar en Mitú", explica el general Lesmes, excomandante de la FAC. Al final de la tarde, los pocos recursos que tenía la Fuerza Aérea de Colombia para la época fueron enviados con tropa a la base de Kerarí, en Brasil. En la mañana del 2 de noviembre, las tropas desembarcaron en Mitú, pero ya las FARC habían asesinado a 16 policías y secuestrado a 61 más, entre ellos el general Mendieta. También ejecutaron a once civiles. En la retoma y contraofensiva también murieron 24 soldados. Las victimas de Mitú, entre las que están cinco familias de policías de los que hoy no hay rastro, creen que, después de 20 años de impunidad, llegó la hora para que haya verdad, justicia y reparación en uno de los episodios más tristes y dolorosos en la historia reciente de Colombia. Vea, además: El general Mendieta recordó el día en que las FARC se tomaron Mitú
Este viernes, 26 de julio de 2024, la operación de Transmilenio por la calle 26 en Bogotá estuvo paralizada durante varias horas por cuenta de un bloqueo que manifestantes realizaron en las afueras de la Universidad Nacional y que obligó a miles de personas a caminar hacia sus destinos. Además, aparecieron encapuchados que se enfrentaron a la fuerza pública.>>> También puede leer: ¿Policías atacados cerca de la Universidad Nacional actuaron de manera desmedida?Según Transmilenio, más de 76.000 personas se vieron afectadas por la suspensión de 15 rutas que cubren especialmente la troncal de la calle 26, porque un grupo de aproximadamente 50 personas salió de la Universidad Nacional y bloqueó la vía en ambos sentidos.Luego, varios encapuchados del campus también se involucraron para atacar a uniformados de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (UNDMO) que hacían presencia en la zona.Estas personas salieron del campus e iniciaron los ataques con papas bombas que iban lanzando hacia los uniformados.La protesta de este viernes había sido anunciada a través de redes sociales tras los enfrentamientos del pasado jueves entre encapuchados y policías que terminaron disparándole a los atacantes.Ciudadanos afectados por protestas en inmediaciones de la Universidad NacionalLos ciudadanos manifestaron su rechazo por la protesta, pues muchos tienen dificultades para desplazarse por la capital sin el servicio de transporte público.Así lo manifestó Eduardo Vega, un afectado por las manifestaciones: “Mal hecho, estoy cojo, jodido y voy con mis hijos”.“Venimos caminando desde Quinta Paredes. Jodido porque uno sale de trabajar pensando que va a llegar a descansar a la casa y le toca caminar", dijo Juan Tello, otro ciudadano que debió caminar ante el bloqueo.>>> También puede leer: Empleado de Transmilenio atacado por encapuchados ve a policías como “ángeles guardianes”
La exalcaldesa de Bogotá Claudia López fue deportada de Venezuela este viernes, 26 de julio de 2024, cuando ya se encontraba en la ciudad de Caracas para las elecciones presidenciales del próximo domingo.>>> Vea más: Marta Lucía Ramírez fue bajada de un vuelo hacia Venezuela: "Retuvieron tres aviones"A través de sus redes sociales, la exmandataria de la capital de Colombia aseguró que fue deportada de manera arbitraria y bajo amenazas.“Hoy me deportaron arbitrariamente y bajo amenazas, pero la campaña libertaria de Venezuela no la pueden deportar. ¡Adelante! A María Corina Machado, Edmundo González y a todos los venezolanos mi cariño, apoyo y solidaridad siempre”, dijo en su cuenta de X.Claudia López manifestó que “Venezuela está a pocas horas de lograr su libertad y derrotar el régimen dictatorial de Maduro" y envió un mensaje a los ciudadanos de ese país."No se rindan, hermanos venezolanos. Estamos con ustedes, sus familias, sus hijos”, indicó la exalcaldesa de Bogotá.El mensaje lo acompañó con un video en el que ella aparece a bordo de un avión junto con otros pasajeros y dice lo siguiente: "Esta país va a volver a ser libre, no se preocupen. Así estarán de aculillados que nos sacan deportados. Este régimen se va a acabar el domingo".Cuando Claudia López dijo que Venezuela volverá a ser libre, los demás pasajeros respondieron "amén" y aplaudieron las palabras de la exmandataria de Bogotá.Angélica Lozano también fue deportada como Claudia LópezHoras antes de la deportación de Claudia López, su esposa, Angélica Lozano, también fue expulsada del país vecino.La senadora Lozano había sido invitada a Venezuela por María Corina Machado para observar las elecciones presidenciales del domingo 28 de julio.Por medio de una grabación desde sus redes sociales, Angélica Lozano denunció que les "quitaron los pasaportes durante hora y media"."No nos dieron información y nos amenazaron porque no nos dejaron coger el teléfono. Yo tenía el número del embajador y no me permitieron llamarlo", señaló.La senadora aseguró, además, que no les brindaron información y que los sacaron: "No compramos este pasaje. Si eso les hacen a personas que vienen por el fin de semana, lo que este pueblo ha padecido no tiene nombre. El domingo va a salir este régimen de miseria".¿A Marta Lucía Ramírez no la dejaron entrar a Venezuela?Angélica Lozano y Claudia López se suman a los personajes de la política colombiana que a las que les impidieron la entrada a Venezuela, pues la exvicepresidenta Marta Lucía Ramírez denunció desde sus redes sociales que la hicieron salir de un vuelo que desde Panamá partía hacia Caracas.“Retuvieron arbitrariamente tres aviones con 450 pasajeros para impedir nuestro viaje, evidenciando, una vez más, la naturaleza de su régimen”, dijo.Y añadió: “A pesar de la tristeza de no poder cumplir con nuestro propósito de llegar hoy a Caracas, decidimos bajarnos de manera responsable para no afectar a la tripulación de tres vuelos, ni a la empresa aérea”.Finalmente, Marta Lucía Ramírez sostuvo que “esto muestra claramente que la dictadura solo quiere rodearse de sus amigotes para el 28 de julio"."Mientras que a nosotros, que somos amigos de la democracia que representa María Corina Machado y Edmundo González, no tenemos autorización para aterrizar en Caracas”, sentenció.>>> Le puede interesar: Angélica Lozano denuncia que fue deportada de Venezuela: "Nos quitaron el pasaporte"
La patrulla antinarcóticos de la Policía Nacional atacada en inmediaciones de la Universidad Nacional el pasado 25 de julio fue detenida por un funcionario de Transmilenio porque, según él, varios encapuchados lo iban a lastimar durante una manifestación que se adelantaba en esa zona de Bogotá.>>> Más sobre el caso: Empleado de Transmilenio atacado por encapuchados ve a policías como “ángeles guardianes”Aseguran que, cuando los uniformados de la Policía intentaron ayudar al funcionario, fueron atacados con explosivos por los encapuchados.En su reacción, uno de los policías disparó su arma de fuego, dejando a una persona herida, según la vicerrectora de la Universidad Nacional en Bogotá, Carolina Jiménez. “Rechazamos todas las expresiones de violencia y, en ese orden, están los dos escenarios. Lo que pasa es que aquí hay una situación muy clara y es que es una fuerza institucional del Estado que se debe regir por unos protocolos y que con su acción puso en riesgo a todos los integrantes de la comunidad”, indicó la vicerrectora.Algunos representantes estudiantiles coinciden con la afirmación de Carolina Jiménez.¿Qué dicen los estudiantes de la Universidad Nacional tras ataques a policías?Felipe Campos, representante estudiantil de la Universidad Nacional, sostuvo que “esas personas que van en la patrulla no son personas indicadas y entrenadas para reaccionar ante estos acontecimientos. Para eso estaba aquí a unas cuadras las Unidades de Reacción Inmediata”.Por su parte, el representante estudiantil David Sánchez dijo que “la Policía actuó de manera desmedida, se saltó todos los protocolos de atención a los manifestantes que la Alcaldía, como a nivel nacional, se tienen reglamentados ante distintas resoluciones”.Sin embargo, algunos expertos opinan lo contrario ante el ataque con explosivos contra la patrulla de Policía en inmediaciones de la Universidad Nacional.Andrés Nieto, director del observatorio de la Universidad Central, indicó que “el protocolo es para la protesta pacífica, no para el ataque a la fuerza pública y mucho menos de un ataque donde hay elementos explosivos. No podemos seguir diciendo que todo es protesta social. Hay que definir qué es protesta social, que es diferente a acto de vandalismo”.Por su parte, David Saavedra, concejal de Bogotá, declaró que “la manifestación pública debe ser abordada con un protocolo de seguridad por parte de las entidades del Distrito. Eso no es una manifestación, eso fue un atentado a la ciudadanía con explosivos”.Las autoridades serán quienes determinen qué ocurrió en este lugar y si los uniformados de la Policía Nacional actuaron o no de manera correcta.>>> Le puede interesar: Alcalde Galán dice que policías que dispararon a encapuchados actuaron en legítima defensa
La Plataforma Unitaria Democrática (PUD), la mayor coalición opositora de Venezuela, registró este viernes, 26 de julio de 2024, menos del 1% de incidencias en la instalación de las mesas de votación para los comicios presidenciales del próximo domingo, por lo que pidió a los ciudadanos no alarmarse porque -dijo- la voluntad del pueblo se podrá expresar en las elecciones.>>> También puede leer: Régimen de Venezuela cerró los pasos fronterizos: este es el panorama en Cúcuta"Hubo menos del 1% de incidencias en estas mesas. ¿Esto qué implica? Reitero, que no ocurrió nada más porque nuestros testigos estaban ahí y porque saben defender sus derechos, que son los derechos políticos de todos los venezolanos y es lo mismo que van a hacer el domingo", dijo la opositora Delsa Solórzano en una rueda de prensa.Ante este registro, la exdiputada pidió a la población no alarmarse y "votar masivamente" el domingo, porque la "voluntad del pueblo" será expresada en las urnas.Solórzano dijo que, si bien no justifican estos eventos, insistió en que el porcentaje es "bastante bajo", gracias a la labor de los testigos de votación acreditados."El tipo de incidencia fue el mismo, pero para que podamos hablar de patrón tiene que haber un porcentaje muy elevado de incidencias para poder decir que fue un patrón que afectó de manera importante el número de mesas instaladas", sostuvo.Instalación de mesas de votación en VenezuelaEste viernes, el Consejo Nacional Electoral (CNE) ha instalado las mesas de votación que serán usadas en los comicios presidenciales, mientras circularon en las redes sociales denuncias de testigos y operadores acreditados que -aseguraron- fueron impedidos de participar en el acto de configuración de las máquinas.La presidenta de la Comisión de Participación Política y Financiamiento del CNE, Aime Nogal, indicó en X que cerca de las 12:00 hora local se había registrado la instalación del 90,25% de las 30.026 mesas electorales de todo el país.La rectora no hizo comentarios sobre las denuncias que circularon en redes sociales, algunas con videos y fotografías, que muestran centros de votación custodiados por militares -como corresponde según la ley-, que no permitieron el ingreso de testigos, una red de voluntarios acreditados ante el CNE y que representan a los partidos políticos en el proceso.Según se puede ver en los videos, estos vetos son contra personas que aseguran ser representantes de la PUD, que antes ya había denunciado "trabas" del CNE para acreditar a sus testigos, algo que fue subsanado luego.>>> También puede leer: Angélica Lozano denuncia que fue deportada de Venezuela: "Nos quitaron el pasaporte"
Un recorrido llevado a cabo por la Personería de Cali evidenció que se estarían haciendo sacrificios de caballos en el río Cauca. Se hallaron restos entre las comunas 6 y 7, cerca del barrio Petecuy, nororiente de la capital del Valle del Cauca.>>> Vea más: Caballo murió mientras era utilizado como transporte, en Caquetá: doloroso video"En medio de la contaminación del río, encontramos dos sitios con osamenta equina. De mi parte, como personero de Cali, me generó escozor al ver el sacrificio de tanto animal", aseguró Gerardo Mendoza Castrillón, personero de Cali.El sacrificio de caballos "es inaceptable"Añadió que esta situación "es inaceptable desde cualquier punto de vista, porque atenta contra la salubridad pública y exige inmediata intervención por parte de las autoridades judiciales, policivas y ambientales”.“Es importante que las autoridades realicen una inspección a estos lugares para verificar este hecho a fin de encontrar los autores que hay detrás del repudiable acto que compromete la vida y la integridad física de los animales”, subrayó.Otra denuncia de la Personería de CaliPor otra parte, la Personería de Cali denunció el incremento de escombreras sobre la franja protectora del río Cauca y descargas de aguas residuales industriales que afectaron las condiciones fisicoquímicas del hilo hídrico.Esta situación hace que se tiña el cauce a la altura de la planta de tratamiento de aguas residuales Cañaveralejo y que se presente espuma en inmediaciones a la estación de bombeo Paso del Comercio.>>> Le puede interesar: La conmovedora reacción de un caballo maltratado al llegar a un refugio