Hace aproximadamente 13 millones de años, la región central de Colombia, donde hoy se encuentra el desierto de la Tatacoa, era un lugar muy distinto al que se conoce hoy. En lugar de la aridez actual, el paisaje de esa época se parecía más al Amazonas, caracterizado por ríos, mucha vegetación y animales depredadores gigantes.En este entorno prehistórico, existía una clara jerarquía. Mientras que el agua estaba dominada por el Purussaurus, un cocodrilo que podía medir más de diez metros, en la tierra el jefe era el temible ave del terror, un animal de tres metros de altura.Durante décadas, se tenía evidencia de su existencia solo en lugares como Argentina y Norteamérica. Por ello, encontrar pruebas en la Tatacoa cambió la concepción histórica sobre dónde se ubicó realmente este animal hace 13 millones de años.La pieza clave guardada en el desierto de la TatacoaLa confirmación de la presencia de un ave del terror de tres metros en Colombia no provino de una expedición académica, sino del trabajo de un habitante local.El responsable de este hallazgo paleontológico es César Perdomo, un campesino de 45 años oriundo de la Tatacoa, quien ha dedicado más de 40 años de su vida a coleccionar el patrimonio fósil de estas tierras. La intensidad de su pasión lo llevó a llamar a su centro de exhibición, un museo pequeño, La Tormenta. Perdomo explicó en Los Informantes que el nombre refleja las adversidades que ha enfrentado, afirmando que su vida "sigue siendo un tormento, me imagino hasta que me vaya a este mundo. Si duro 90 años más, 90 años me voy a atormentar buscando fósiles".Perdomo ha desarrollado un profundo vínculo con las más de 5.000 piezas que ha recolectado y que considera su "familia". "Uno lo quiere como cuando uno carga el hijo de uno pequeño y usted lo carga el alzado, así son fósil para uno, si toca arroparlo con la cobija, con la camisa, con el sombrero, con lo que sea", señaló sobre esta pasión.Su vocación comenzó desde niño. A la edad de cinco años, recogió su primer fósil, una vértebra de cocodrilo. Al ver cómo las expediciones extranjeras se llevaban las piezas de la zona, Perdomo comenzó a guardarlas, con la esperanza de que algún día los investigadores volvieran para compartir su conocimiento.El fósil que confirmaría la existencia del ave del terror de tres metros, un fragmento de la pierna, había permanecido más de 15 años en el museo de Perdomo, mezclado entre miles de piezas sin clasificar. Para encontrar y marcar los sitios de excavación en el desierto, Perdomo, sin usar GPS, utilizaba métodos empíricos como "puntos de piedras", recordó.La identificación de esta pieza crucial, que cambió la historia conocida de la Tatacoa, fue el resultado de la colaboración con el biólogo colombiano Andrés Link. Link, que regresó al país tras sus estudios doctorales, se asoció con Perdomo. El descubrimiento se formalizó cuando Link invitó al museo a Rodolfo Salas, un experto mundial en cocodrilos. Salas, al revisar la pieza, notó inmediatamente lo importante que era: "Esto no es un mamífero, esto tampoco es un reptil". Tras un análisis más profundo, propuso la hipótesis que cambiaría lo que se creía hasta el momento habitó el país: "esto va a ser un ave del terror". Este análisis confirmó que este depredador, que antes solo se había encontrado en Argentina y Norteamérica, también habitó la Tatacoa. Al entender la magnitud de su hallazgo, César Perdomo expresó con orgullo: "Aquí está mi fósil famoso para la humanidad".La violenta muerte del ave del terrorEl fragmento óseo no solo sirvió para identificar a la especie en Colombia y confirmar su impresionante tamaño. La pieza también reveló una historia violenta ocurrida hace casi 13 millones de años, con dos perforaciones que indican un ataque o un hecho de depredación.A pesar de ser el depredador terrestre más temido, el ave del terror pudo haber sido atacado por el Purussaurus, el cocodrilo gigante. El biólogo Andrés Link comentó que resulta muy interesante pensar que una "ave de esas también pudo haber sido ya sea depredada por un cocodrilo o que se hubiera muerto por algún motivo, pero que el cocodrilo hubiera podido acceder a ella". Las marcas observadas en el hueso confirmaron que el ave no se recuperó de las heridas. Los científicos concluyeron que este evento marcó "el último momento de ese ave del terror porque no se sanaron esas heridas".Este descubrimiento histórico consolidó una colaboración científica poco común entre el conocimiento de campo de Perdomo, quien no usa computador y trabaja de forma empírica, y la experiencia académica de Link. La alianza resultó tan efectiva que Perdomo fue reconocido formalmente: Link aseguró que su aporte fue "mejor dicho fue una participación científica como la de cualquier otro coautor".El campesino que soñó con que los científicos regresaran, hoy trabaja hombro con hombro con ellos. Esta dupla ya se encuentra preparando otra publicación científica.*Este texto fue realizado con colaboración de un asistente de IA y editado por un periodista que utilizó las fuentes idóneas y verificó en su totalidad los datos. Cuenta con información y reportería propia de Los Informantes.
El caso de Samuel, un bebé de 15 meses que murió ahogado por su madre en una playa de Santa Marta en abril de 2022, volvió a conocerse en detalle tras el nuevo testimonio de su padre, Edwin Guerrero. El hombre relató cómo fueron los últimos meses antes de la muerte del menor y los momentos en los que se enteró de lo que había ocurrido con su hijo.El hombre aseguró que la relación con Jenny comenzó de manera estable, pero con el tiempo la convivencia se vio afectada por discusiones y tensiones constantes. Según contó, la pareja vivió episodios de conflicto que terminaron deteriorando la comunicación entre ambos. Edwin explicó que, pese a los problemas, siempre trató de estar presente para el niño y mantener una relación cercana.Recientemente, dio a conocer nuevas declaraciones en el pódcast 'Más allá del silencio', donde recordó la última vez que vio a su hijo Samuel. Según contó, la madre comenzó a limitar el contacto entre ambos y a impedirle que lo visitara. También señaló que hubo denuncias por violencia intrafamiliar y medidas que finalmente le prohibieron ver a su hijo.Aseguró que Jenny le había rapado la cabeza al bebé, algo que él interpretó como una “señal que no tuve que haber omitido, porque Jenny mostró su primera alerta en que algo le pasaba a mi hijo cuando yo no accedía o no tenía un premio por no ser buen padre”.Asimismo, relató que, debido a las constantes discusiones y a las conductas problemáticas de la mujer, en una de las cuales le arrojó una arepa caliente al rostro, la convivencia se fue deteriorando y volviéndose insostenible.“Mi papá siempre me dijo que cuando en una relación había un irrespeto, así se en palabras o algo, ahí no había nada. Y en eso sí, yo soy muy directo en esas cosas”, dijoEdwin contó que, durante varios meses, intentó llegar a un acuerdo para poder ver a su hijo, pero esto no se logró. “Después de que yo le dije a Jenny que no más, que no quería nada más con ella, fue más difícil ver a mi hijo. Fue como un castigo. No volver con ella significó no ver más a mi hijo”, relató.Guerrero afirmó que intentó en varias ocasiones regular las visitas a través de la comisaría y del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), pero recibió respuestas lentas y procedimientos que, según él, no garantizaron el derecho del menor a mantener un vínculo con su padre.“El mayor miedo de padre es que su hijo lo olvide, que tú pases por el lado de tu hijo y que él no te reconozca. Yo tenía mucho miedo que eso pasara”, aseguró.“El tema económico no era lo que le importaba a ella. El tema más que todo fue que yo viera mi hijo. Yo digo que yo estaba castigado por no volver con ella”, agregó.Desaparición y hallazgo del bebé de 15 mesesTras más de cuatro meses sin poder ver a su bebé, Edwin aseguró que la madre del menor se lo había llevado a Santa Marta. “Llamé a mi abogada y ella me dijo: ‘Tienes que ir, Edwin. Ve con la policía y acércate’. Fui, pero la abuela de Jenny me dijo que mi hijo no estaba y que si algo le pasaba a mi hijo o a ella, todo iba a ser responsabilidad mía. Yo sí sabía que algo malo iba a pasar, pero no lo advirtieron”, reveló.Videos de cámaras de seguridad mostraron el momento en que Jenny Higuera llegó junto con su bebé a un establecimiento público en Santa Marta. Desde entonces, el papá del pequeño denunció la desaparición del niño.Al día siguiente, la Policía de Santa Marta se comunicó con él para ayudarlo a buscar a su hijo. Tras enviarle una fotografía, le dieron una noticia devastadora. “Habían encontrado un cuerpo de un niño de aproximadamente dos años en las playas de Buritaca. Me derrumbé totalmente. Yo lo único que dije fue: ‘Esa bruja lo mató’”, recordó.Al llegar a Medicina Legal le informaron que no podía ver al menor porque debían asegurarse de que él era el padre y, para ello, le solicitaron una prueba de ADN. “Me dijeron que tenía que esperar cuarenta y cinco días y que me volviera a Bogotá. Yo les dije: No me voy a ir. Yo me quedo aquí 45 días en esta ciudad que no conozco, pero aquí me voy a quedar. Todos los días me la pasaba en Medicina Legal”.Sobre los hechos, Edwin afirmó que su hijo fue encontrado por una persona que iba caminando por la playa. Aseguró que al bebé lo dejaron en la playa y no en el mar: “El mar no llega a botar los restos ahí. Ahí fue donde encontraron al niño, boca abajo. Lo que puedo deducir de lo que las autoridades dijeron es que Jenny pudo haber soltado al niño intencionalmente para que él se ahogara. O lo otro es que Jenny cogió al niño y lo mató en sus manos. Creo que es más fácil la segunda”.La madre del niño, Jenny Higuera, fue señalada en el proceso penal como la responsable del hecho. No obstante, la mujer se dio a la fuga. Durante ese tiempo, Edwin afirmó que “nunca volvió a saber de ella ni de su familia, a pesar de que sí sufrió amenazas por parte del padrastro de Jenny y del tío”.Condena por homicidio agravadoEdwin aseguró que a Jenny la internaron en una clínica psiquiátrica donde duró 20 días, luego de nuevo le puso una denuncia por violencia intrafamiliar. “Ella me dijo que había sido un accidente, que algo la había picado y que soltó al niño. Que cuando lo encontró fue demasiado tarde...Yo creo que Jenny hizo esto a mi hijo en un acto de venganza, de una forma egoísta”.Posteriormente, la mujer fue capturada el 6 de junio de 2022 por el delito de homicidio agravado, pero tiempo después quedó en libertad por vencimiento de términos, lo que permitió que volviera a ausentarse del proceso.“Es una mujer muy manipuladora y egoísta, todo lo que ella hizo fue para lastimarme con mi hijo. Solo me quedan las fotos de él, ella sabía que con lo que hizo me iba a destruir en vida”, dijo el padre en Séptimo Día.El 1 de diciembre de 2025, Jenny fue condenada a 36 años y 8 meses de prisión, pero actualmente se encuentra prófuga de la justicia. “Yo pienso que es una historia como de terror. Saber que Samuel no está y que este año tuviera que cumplir cinco años duele mucho, pero duele mucho más la forma en que él murió... Pienso que el egoísmo de Jenny fue muy duro”, dijo.El caso continúa generando impacto debido a las revelaciones hechas por el padre y, especialmente, porque aún se desconoce el paradero de la mujer señalada de haber ahogado a su hijo.
Las vacaciones, ese momento anhelado para conectar con la belleza de los paraísos naturales colombianos, se han convertido en tragedia para varias familias que denuncian graves fallas en los protocolos de emergencia y seguridad de las agencias de turismo. Uno de los casos que más expone esta dolorosa realidad es el de Judy Milena Agredo, una mujer de 43 años, cuya vida terminó abruptamente en las aguas de Santa Marta durante una práctica de buceo. Séptimo Día conoció nuevos detalles del caso.Su esposo, Alejandro Calambas, intendente de la policía de Popayán, asegura que su muerte se pudo haber evitado si la empresa que contrataron, Barracuda Dive Center, hubiera cumplido con los mínimos estándares de seguridad y atención. "Si hubieran tenido los elementos y la idoneidad para la atención en primeros auxilios yo creo que mi esposa la han podido salvar", afirma.Este desgarrador testimonio forma parte de una investigación de Séptimo Día que revela cómo la falta de regulación y la negligencia en el creciente boom del ecoturismo en Colombia están poniendo en riesgo la vida de los visitantes.Trágicas vacaciones en Santa MartaAlejandro y Judy Milena Agredo, licenciada en educación infantil y madre de una niña de 11 años, planearon sus vacaciones para mediados de 2025. El destino elegido fue el Parque Natural Tayrona, considerado por ellos como "lo más bonito y representativo que tiene Santa Marta". Buscaron en internet empresas que ofrecieran el servicio de buceo y encontraron Barracuda Dive Center, con sede en Taganga.La empresa les ofertó un minicurso de buceo por $330.000 por persona, prometiendo dos inmersiones y un instructor certificado por PADI, Asociación Profesional de Instructores de Buceo. Esto le dio confianza a Alejandro, y la familia decidió tomar el curso el 7 de octubre de 2025, el primer día de su estancia en Santa Marta.Llegaron a Taganga, donde fueron atendidos inicialmente por Santiago, el administrador, y luego por el instructor Fernando Waldron. Tras contestar que ninguno tenía complicaciones médicas, recibieron una charla o capacitación que, señala Alejandro, fue "muy mínima". Luego de recibir el equipo, se dirigieron a la embarcación.La primera inmersión, cerca al Parque Tayrona, se realizó en compañía de otros turistas e instructores, y aunque disfrutaron de la belleza del mundo marino, Alejandro notó una actitud inusual en su instructor. Relata que él "se preocupaba mucho por la señorita que estaba con nosotros, quería como impactarla y al momento de hacer eso nos dejaba a nosotros hacia un lado".Los minutos fatalesCerca de las 10 de la mañana llegó el momento de la segunda y última inmersión, que continuó con normalidad. Sin embargo, cuando llegó el momento de regresar a la superficie, el instructor dio las indicaciones de ascenso.Alejandro subió a la superficie con su hija a su lado, pero al mirar a su alrededor, se dio cuenta de la ausencia de Judy Milena. "Yo empecé a mirar a todo lado, entonces le hago (al instructor la seña) que faltaba una persona", cuenta.De inmediato, el pánico se apoderó de su hija, quien preguntó: "Papi, mi mamá no sale, qué le pasó a mi mamá". En ese instante, Alejandro le rogó al instructor Fernando que ingresara a buscar a su esposa, pero este se rehusó a hacerlo. "Él en todo momento me decía 'tranquilo que ya va a salir'", recuerda.Alejandro dice que tuvo que insistir en repetidas ocasiones “‘Fernando, por favor, ingrese’, se lo dije muchas veces".Según el testimonio, pasaron "casi 20 minutos" hasta que el instructor finalmente encontró a Judy y la subió a la superficie. Fue entonces cuando se evidenció la falta de preparación de la empresa: el proceso de reanimación no fue iniciado por el personal de la escuela de buceo, sino por "un extranjero".En medio del desespero por salvar a su esposa, Alejandro se percató de que la empresa Barracuda no contaba con ningún protocolo ni equipo básico para atender una emergencia médica."Ahí es donde yo me doy cuenta de que no tenían botiquín, no tenían máscara, solamente una manguera transparente donde se la introdujeron por un orificio de su nariz para darle oxígeno", denuncia Alejandro. Aunque Judy Milena "reaccionaba y le salía mucha agua", pero la falta de elementos para una atención adecuada era evidente, insistió su esposo.Alejandro sintió que lo habían dejado completamente solo frente a la crisis. Gritaba: "Por favor llamen para que esté una ambulancia pendiente". La embarcación poseía un radio, pero el instructor "nunca utilizó eso, no sé si no le servía".Al llegar a la playa de Taganga, la situación no mejoró, pues no había personal de la empresa para socorrerla. Alejandro tuvo que gritar pidiendo ayuda y fue auxiliado por un turista que lo llevó en su carro al puesto de salud. "Nos dejaron totalmente solos", asegura, añadiendo que "lo único que le importó al señor fue cobrarnos al principio nada más".Tras el esfuerzo, la médico de turno confirmó que Judy Milena Agredo, de 43 años, había llegado "sin signos vitales".Alejandro, bloqueado por el dolor, responsabiliza directamente a los prestadores del servicio por el fallecimiento de su esposa: "yo responsabilizo por la muerte de mi esposa directamente a la empresa Barracuda Deep Center por no tener los protocolos para salvaguardar la vida de una persona y directamente al instructor Fernando que omitió las voces de auxilio que yo le solicité en repetidas ocasiones".La voz de expertosExpertos en buceo consultados por el programa Séptimo Día confirmaron que la actuación de la empresa Barracuda Dive Center incumplió gravemente los protocolos internacionales. Catherine Marroquín, instructora con más de 10 años de experiencia, subraya que los botes de buceo a nivel mundial "tienen que tener unidad de oxígeno botiquín y radio". Además, el protocolo exige que, si una persona está inconsciente, se debe "llamar inmediatamente canal 16 guardacostas".La instructora calificó la demora de 15 a 20 minutos para la búsqueda y la falta de activación de emergencias como "casi que inaceptable".Cuando el equipo de Séptimo Día intentó obtener una declaración de Santiago Moden, el administrador de Barracuda Dive Center en Taganga, este se negó a conceder entrevistas. “Ya les he comunicado dos veces que no estamos concediendo entrevistas en este momento", afirmó. La empresa señaló que esperará a que las autoridades determinen la responsabilidad de la empresa y del instructor.Pese al dolor, Alejandro se compromete a mantener vivo el legado de Judy: "yo le prometo a mi esposa que voy a estar ahí incondicional con mi hija y luchando por el amor que nos tenemos como familia".El caso de Judy Milena Agredo no es aislado. La investigación del programa expone otros incidentes mortales que evidencian la informalidad y la falta de control en la prestación de servicios turísticos en Colombia.*Este texto fue realizado con colaboración de un asistente de IA y editado por un periodista que utilizó las fuentes idóneas y verificó en su totalidad los datos. Cuenta con información y reportería propia de Séptimo Día.
El coltán es mucho más que una simple roca: es la base de la nanotecnología moderna y el corazón invisible que energiza dispositivos de uso cotidiano. Este mineral es altamente codiciado en el mercado global debido a sus componentes clave: el niobio y el tantalio, metales con un punto de fusión excepcionalmente alto. El tántalo, por ejemplo, alcanza su fase líquida alrededor de los 3.000 grados Celsius, mientras que el niobio lo hace cerca de los 2.000 grados Celsius. Estas propiedades lo hacen crucial no solo para celulares, tabletas y carros eléctricos, sino también para la fabricación de armamento militar avanzado.Expertos señalan que el control sobre estos metales estratégicos puede determinar el desarrollo tecnológico de una nación. Esta importancia geopolítica ha convertido su extracción ilegal en Colombia en una "bomba de tiempo" que amenaza con destruir la tierra y agudizar el conflicto interno.Aunque la existencia de coltán en el ancestral escudo guayanés, que atraviesa parte de Colombia, Venezuela, Brasil y las Guayanas, se conoce desde 2009, en la Orinoquía no existe una sola mina legal operando a escala comercial. Este vacío estatal ha sido rápidamente ocupado por estructuras criminales, transformando el negocio en una fuente de ingresos difícil de rastrear, perfecto para financiar actividades ilícitas.En la Orinoquía, la minería ilegal de coltán y oro se ha convertido en el sustento económico del ELN y de estructuras disidentes como la Segunda Marquetalia. Estos grupos armados, según el brigadier general Rafael Olaya, comandante de la Fuerza Naval de la Orinoquía, "están ejerciendo esa actuación criminal sobre todo lo que sea economías ilícitas", señaló en Los Informantes.El modus operandi de la minería ilegalEl negocio del coltán no solo es violento, sino también altamente rentable, comparable con el narcotráfico. Los grupos armados controlan la explotación de los yacimientos, decidiendo quién puede o no extraer el mineral, las rutas de tráfico y la forma en que se mueve la mercancía. El general Olaya afirmó:"Yo creo que la analogía más práctica es con la que más duro hemos vivido durante tantos años de conflicto que es el narcotráfico, pero esa es la mejor analogía para poder hablar de la minería porque los grupos así no estén directamente involucrados con la explotación ilícita de esos yacimientos mineros sí son los que controlan esa explotación".La extracción se realiza de forma manual en los afluentes de los ríos. Los mineros, a menudo instrumentalizados, utilizan bateas para separar el material. Este trabajo es extenuante: de 20 kilogramos de material de río, apenas se obtienen unos 300 gramos de coltán.La desigualdad en la cadena de valor es abismal. Mientras que el minero recibe entre $26.000 y $50.000 pesos colombianos por kilogramo en el sitio de extracción, el acopiador que lo vende en el exterior puede obtener entre 400 y 600 dólares por kilo. Este margen hace que el coltán sea un activo más rentable que la misma coca.La sofisticada ingeniería del contrabandoUna vez extraído, el proceso de blanqueo del coltán es sofisticado y organizado. Para borrar su origen ilícito, las organizaciones criminales nombran el mineral de distintas formas: "arenas negras", "tierras raras" o "polimetales". El objetivo es mezclar el coltán extraído ilegalmente con títulos legales de minería de subsistencia.El mineral es acopiado en puntos calientes de la frontera, como Manabén, y luego emprende rutas fluviales y terrestres. Los cargamentos salen de Inírida y Guaviare, toman carreteras hacia Villavicencio y Bogotá, o son transportados en tractomulas hasta Puerto Gaitán y Puerto López.La carga final viaja a puertos de exportación como Cartagena o Buenaventura. Lo más alarmante es que, al llegar a su destino, la mercancía lleva toda la documentación legal y los papeles en regla. La Fuerza Naval, a pesar de las incautaciones millonarias, que han superado los 1.2 billones de pesos solo en Vichada, y alcanzaron un valor de 4.7 millones de dólares en un solo decomiso de 13.7 toneladas en Manabén en diciembre de 2024, se encuentra con severas limitaciones.El material pasa frente a las fuerzas armadas, que quedan "desarmados jurídicamente ante eso" debido al complejo marco legal y a la justificación de los envíos con documentación aparentemente legal. La única forma de verificar si un cargamento es coltán y determinar su procedencia exacta requiere espectrómetros y equipos de laboratorio especializados que solo existen lejos, en la Facultad de Geología de la Universidad Nacional, a casi 700 kilómetros de Inírida.Impacto invisible: la amenaza a la salud y el ecosistemaLa minería ilegal no solo desangra la economía y financia la guerra, sino que también amenaza la vida humana y el patrimonio natural del país.El coltán es un material peligroso para los mineros debido a que incorpora elementos químicos como el uranio y el torio, haciéndolo radiactivo. La exposición prolongada a esta radiactividad invisible conlleva un alto riesgo de contraer enfermedades graves, como el cáncer. Un exminero, que fue entrevistado sin revelar su identidad por motivos de seguridad, señaló el peligro:"El coltán sí es una piedra que da plata, pero es una piedra muy peligrosa por todos los sentidos tanto como para la gente del monte, como para la ley y para la salud también porque eso bota un químico que el único animal que se le acerca es el murciélago", dijo.A nivel ambiental, la minería ilegal deforesta, destruye y contamina los ríos con mercurio. Esta actividad está desangrando la Reserva Natural Puinawai, un territorio protegido de 1.9 millones de hectáreas en Guainía y Vichada, considerada la madre de la humanidad en lengua puinave, y hogar de docenas de comunidades indígenas y especies emblemáticas."Hay una ambigüedad porque identificamos la necesidad del coltán en la producción de tecnología y de muchos bienes que requiere la sociedad, eso es indudable, pero esa explotación ha conllevado siempre a través de violencias, guerras, sangre y deterioro social", señaló Carlos Martínez, secretario de Gobierno de Guainía.La falta de un ordenamiento minero claro permite que esta "nueva guerra tecnológica" continúe entregando la riqueza natural de la Orinoquía a grupos criminales, mientras el mundo enciende sus pantallas con este material.*Este texto fue realizado con colaboración de un asistente de IA y editado por un periodista que utilizó las fuentes idóneas y verificó en su totalidad los datos. Cuenta con información y reportería propia de Los Informantes.
La época de Navidad llega cargada de tradiciones y sabores que despiertan la nostalgia en los hogares colombianos. Entre ellos, uno de los más queridos es el buñuelo, ese manjar dorado que, aunque se consume durante todo el año, en diciembre adquiere un aroma y un encanto particular que remite de inmediato a las celebraciones de fin de año.(Síganos en Google Discover y conéctese con las noticias más importantes de Colombia y el mundo)El buñuelo colombiano, hecho a base de almidón de yuca y queso, destaca por su textura crujiente por fuera y esponjosa por dentro. Su presencia es infaltable en fechas como el Día de Velitas, las novenas de aguinaldos y las noches del 24 y 31 de diciembre, donde acompaña a familias y amigos alrededor de la mesa. Aunque se encuentra en panaderías, tiendas y puestos ambulantes, muchos prefieren prepararlo en casa para disfrutar del proceso y del sabor recién hecho.Sin embargo, lograr la consistencia perfecta no siempre es tan sencillo. Usuarios en redes sociales han compartido sus intentos fallidos, donde la mezcla termina convirtiéndose en un fluido no newtoniano: una sustancia cuya viscosidad cambia al aplicar fuerza, lo que provoca que la masa pase de líquida a más sólida dependiendo de la presión. Este fenómeno curioso ha generado humor en internet, pero también ha llevado a muchos principiantes a buscar recetas confiables para obtener un resultado ideal.Receta para obtener un buñuelo perfecto Una de las preparaciones más consultadas es la de Diana López, creadora del portal Sweet y Salado, cuya receta tiene calificación de 5/5 y se ha convertido en referencia para los principiantes. Esta versión promete buñuelos más crujientes, esponjosos y con mayor sabor a queso.Ingredientes:4 tazas (300 gr) de queso costeño2 tazas (300 gr) de fécula de maíz¼ de taza (30 gr) de almidón o harina de yuca¼ de taza (50 gr) azúcar1 huevo grande1 cucharada de mantequilla (opcional)1 cucharadita de bicarbonato de sodioSal al gusto1-1½ tazas (236-354 ml) leche para dar humedad esto depende de la humedad del quesoAceite vegetal para freír (que no se queme en altas temperaturas) Paso a paso para prepararlosPrecalentar el aceite entre 148 °C y 162 °C.Mezclar en un bowl grande el queso, la fécula, el almidón de yuca, el azúcar, el huevo, la mantequilla, el bicarbonato y la sal (tenga en cuenta que el queso costeño es salado).Agregar leche poco a poco hasta obtener una masa suave y homogénea, si nota que la masa está muy húmeda agregue fécula de maíz o almidón de yuca, si por el contrario está muy seca agregue un poco de leche.Formar bolitas del tamaño deseado.Freírlas durante 10 a 12 minutos hasta que estén doradas, es importante freirlos a temperatura media.Escurrirlas sobre papel absorbente y dejar reposar unos minutos.¿Por qué los buñuelos no le quedan perfectos?Explotan o se deforman: el aceite está demasiado caliente o la masa muy seca.Quedan grasosos: los introdujo cuando el aceite no alcanzó la temperatura adecuada.Aparecen manchas oscuras: son solo trocitos de queso que se doran al freírse.Pierden forma: la masa no tenía suficiente humedad.La clave para un buñuelo perfecto es mantener la temperatura correcta del aceite y una mezcla equilibrada. Con estas recomendaciones, incluso los principiantes pueden superar el temido “fluido no newtoniano” y disfrutar de un resultado dorado, crocante y lleno de sabor.HEIDY ALEJANDRA CARREÑO BELTRANNOTICIAS CARACOL
El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, se pronunció luego de que el grupo armado ilegal del Ejército de Liberación Nacional (ELN) anunciara que hará un "paro armado" por 72 horas, desde el 14 de diciembre a las 6 de la mañana hasta el 17 a la misma hora, supuestamente, en protesta de la "intervención en nuestro país" del gobierno de Estados Unidos, al mando de Donald Trump. "El cartel del narcotráfico y el terrorismo del Eln persiste en amenazar al pueblo colombiano, a nuestras comunidades, a nuestros niños, niñas, mujeres, campesinos... en algo que cínicamente llama como paro armado, que no es más que un constreñimiento criminal. Este grupo amenaza a Colombia, por ello hemos desplegado todas nuestras capacidades, y nuestros militares y policías están alerta para neutralizar esta amenaza", dijo en un video.Noticia en desarrollo...
En las redes sociales se ha viralizado un futbolista, con pasado en Atlético Nacional, que fue expuesto por una periodista peruana a través de pantallazos de una conversación entre los dos. Todo salió a la luz porque ella fue señalada por un portal de tener ese intercambio con el jugador. Se trata de Pablo Ceppelini, quien vistió la camiseta 'verdolaga' en 2019 y 2024. La periodista que se reporto con esta historia fue Nair Aliaga. "El mensaje que acabo de recibir hoy", se lee en la publicación de la comunicadora. En la imagen se ve lo que le escribió el uruguayo: "No sé quién te crees que sos para subir una conversación conmigo. No sabía que querías fama y hacerla a costas mía jajaja me da mucha risa. No te saques cartel de que te escribí. Que no me gustas para nada. Sos muy feita mi vida un beso. Y vos también me generas mucho rechazo. Qué asco".Al parecer el descontento del jugador fue porque Aliaga reveló el chat y la conversación que sostuvieron ambos hace unos meses. La periodista aclaró que lo hizo porque la habían señalado por tener un supuesto acercamiento con el futbolista y que esa era una forma de desmentir todo. "Me genera mucho asco, decepción y preocupación, porque muchos seguidores me están enviando el texto en el que no mencionan mi nombre, pero insinúan que soy yo, porque así son: viven del morbo. Voy a defenderme y subiré la única conversación que tuve con el futbolista al que hacen referencia. Porque, actualmente, no existe persona que me genere más desagrado que él. Así como hoy mienten, señalan y manchan mi dignidad, lo vienen haciendo con muchas colegas y nadie hace nada. Se ríen, lo comparten, todo sin una sola prueba. Gracias a Dios tengo esta conversación en la que no le doy pie para que siquiera pueda comunicarse conmigo por chat, pero no todas pueden defenderse de las acusaciones de este diario. Y es injusto, da lástima y es asqueroso", había señalado la comunicadora el pasado miércoles. En esas fotos se observa que Ceppelini inicia la conversación con un emoji y ella le pregunta el por qué de ese mensaje. El charrúa insiste en que solo quiere hablar y Aliaga le remarca que ya sabe como se dirige él hacia otras colegas y mujeres en redes sociales, y que no está interesada en tener contacto alguno.
El rey Carlos III de Inglaterra anunció este viernes que su tratamiento contra el cáncer avanza positivamente. El monarca sorprendió con un mensaje previo en sus redes sociales y luego su declaración pública completa transmitida en el programa nocturno 'Stand Up To Cancer' del Canal 4.La noticia positiva compartida por el rey de 77 años tiene que ver con que su tratamiento se reducirá en 2026.¿Qué dijo el rey Carlos III?"Hoy puedo compartir con ustedes la buena noticia de que, gracias a un diagnóstico temprano, una intervención eficaz y el cumplimiento de las indicaciones de los médicos, mi propio programa de tratamiento contra el cáncer puede reducirse en el nuevo año", dijo Carlos en un mensaje dentro de una campaña anual televisada destinada a recaudar fondos para la investigación del cáncer.Cabe recordar que el monarca de 77 años fue diagnosticado con cáncer en febrero de 2024 tras una operación, pero su naturaleza no fue comunicada públicamente. Pero tal y como detalló en su mensaje televisivo, gracias a que esta detección se dio a tiempo, el tratamiento ha avanzado de manera positiva."Sé por mi propia experiencia que un diagnóstico de cáncer puede resultar abrumador", afirmó sin compartir tampoco esta vez qué tipo de cáncer padece. "Este giro es a la vez una bendición personal y una muestra de los avances notables logrados en el tratamiento del cáncer en los últimos años", añadió el soberano.El rey Carlos III animó a los británicos a realizarse las pruebas de detección lo antes posible y expresó su preocupación tras conocer que "al menos nueve millones de personas en nuestro país no se realizan las pruebas de detección que se les ofrecen". El rey insistió en que "una detección salva vidas, así de simple".En su mensaje, el rey mencionó en dos ocasiones el cáncer de intestino, pero fuentes de la familia real señalaron que no debía interpretarse como ningún "vínculo personal" con su enfermedad.El soberano añadió que en Reino Unido se diagnostican más de 1.000 nuevos casos de cáncer cada día, unos 390.000 al año. "Pero, como alguien que también forma parte de esas estadísticas, puedo dar fe de que también puede ser una experiencia que pone en claro relieve lo mejor de la humanidad", afirmó.Lo que se sabe sobre el cáncer del rey Carlos IIITras anunciarse su cáncer en febrero de 2024, descubierto durante una operación de próstata, el rey interrumpió sus actividades públicas durante algunas semanas. Después, el monarca retomó sus obligaciones en abril del mismo año, cuando sus médicos se declararon "muy alentados por sus progresos", y desde entonces sigue un tratamiento.Además, el anuncio de la detección del cáncer de Carlos III puso fin a un tabú en la realeza británica, ya que históricamente los monarcas permanecían en silencio sobre su estado de salud.Desde hace aproximadamente un año, el monarca de 77 años ha intensificado sus actividades con varias visitas de Estado organizadas en Reino Unido y viajes a Canadá o al Vaticano. En marzo de 2025 fue hospitalizado brevemente tras experimentar "efectos secundarios" de su tratamiento contra el cáncer.El 14 de noviembre celebró su cumpleaños con un viaje a Gales y mostrando su determinación a asumir plenamente sus funciones a pesar de su cáncer. El monarca ha cumplido este año un número récord de compromisos desde su llegada al trono en septiembre de 2022, según el diario Daily Express.Reacciones al mensaje del rey Carlos IIIEl primer ministro británico, el laborista Keir Starmer, expresó su satisfacción en la red social X al conocer la buena noticia. "Un mensaje poderoso de su majestad el rey. Sé que hablo en nombre de todo el país cuando digo lo contento que estoy de que su tratamiento contra el cáncer se reduzca en el año nuevo. La detección temprana del cáncer salva vidas", afirmó.*Con información de AFPNOTICIAS CARACOL
Miguel Ángel Borja revolucionó el fútbol argentino con explosivas declaraciones con las que dio a entender que no tendría problema en defender la camiseta de Boca Juniors.El ‘Colibrí’, como es conocido en el sur del continente americano, jugó 4 temporadas en River Plate, entre 2022 y 2025, marcó 62 goles en 159 partidos y ganó 3 títulos locales.Sin embargo, en el último tiempo fue borrado por el entrenador Marcelo ‘Muñeco’ Gallardo, que lo relegó al banco de suplentes para solo darle algunos minutos al final de cada fecha.Por ello, sus números bajaron, entró en racha negativa de goles y perdió parte del respaldo de la afición, lo que derivó en su no renovación de contrato.En consecuencia, el atacante de 32 años de edad salió prácticamente por la puerta de atrás del conjunto ‘millonario’.Bajo ese contexto, fue entrevistado en ESPN, canal en el que preguntaron si aceptaría ir a Boca, ante lo cual no se negó, pues afirmó tener un hermano hincha de ese club y haber dejado las “puertas abiertas” en Argentina.Al respecto, el hermano en cuestión añadió en la misma entrevista que soñaba con ir a un “palco de la ‘Bombonera’”, estadio del conjunto ‘xeneize’, lo que desató una enorme polémica en ese país entre quienes quieren que el ‘cafetero’ cambie de orilla y quienes, no.Miguel Ángel Borja, seducido por leyenda de Boca JuniorsSe trata de Alberto ‘Beto’ Márcico, que tuvo palabras especiales para convencer al colombiano de ir al elenco ‘azul y oro’, pese a ser el máximo rival de River, cuyo escudo era besado constantemente por Borja después de cada gol.Márcico, que ganó un título local y 2 internacionales en los años 90 con la camiseta de Boca, se mostró emocionado con la posibilidad de que el ‘Colibrí’ vaya al club de sus afectos.“Vengo pidiendo a Borja hace 3 o 4 años y lo hablé con Riquelme [presidente de Boca]. Es el 9 que necesita Borja, juega siempre en el área. Boca necesita un goleador de ese nivel”, comentó en entrevista con la emisora FM Delta.Y le mandó un mensaje directo para convencerlo de dar el paso: “Borja se fue maltratado de River, donde no se sintió respaldado. Por eso yo lo iría a buscar y le diría que venga, que Boca le cambia la vida para bien”.Entre tanto, resta esperar cómo se resuelve el futuro del cordobés, que alcanzó a sonar para el Cruz Azul de México y que tendría diversas ofertas de Europa y América.