Elecciones regionales en Colombia: panorama de la violencia en el país de cara a los comicios

Tras el acuerdo de paz con las FARC, el mayor desafío para el Estado constituyó consolidar el control territorial en todo el país. En ese contexto, las pasadas elecciones regionales en Colombia, en 2019, fueron tranquilas. Sin embargo, el panorama de violencia hoy es muy distinto por acciones y amenazas del ELN, disidencias de las FARC, Clan del Golfo, entre otros grupos armados.

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En San Andrés, en el departamento del Amazonas, el centro del país, Cundinamarca y Boyacá, y algo de Caldas y Quindío se reporta incidencia baja o nula de los grupos armados. Pero en departamentos como Arauca, Norte de Santander, Guaviare, Cauca y Caquetá se concentra más la presencia de actores armados.

El ELN, el Clan del Golfo, las disidencias de las FARC o estado mayor central, la Nueva Marquetalia y las franquicias de otros grupos, han copado algunos territorios, como en el sur del país, en donde ponen las reglas de convivencia y ya han amenazado candidatos que se lanzaron o se van a lanzar en las próximas elecciones.

Esa presencia de los grupos ha derivado en más las acciones violentas. Es la seguridad para los candidatos y para los electores el gran reto de las elecciones regionales de octubre, que serán las primeros que enfrente el gobierno de Gustavo Petro.

Situación en Cauca

El departamento del Cauca sigue ocupando los primeros lugares en donde se registra mayor número de homicidios. Según la Fiscalía, en lo corrido de este año 2023 se han presentado más de 329 asesinatos.

Otro de los temas que preocupa en esta región es el reclutamiento de menores de edad por parte de los grupos armados ilegales, cifra que desde el año 2022, a la fecha, ha alcanzado los 213 menores.

Gracias al trabajo de las autoridades también se han entregado importantes resultados como la ubicación y destrucción de 295 minas antipersonal en zona rural de Argelia, la destrucción de 170 laboratorios de clorhidrato de cocaína, la incautación de más de 60 toneladas entre marihuana y base de coca, generando considerables afectaciones económicas a los grupos armados ilegales por un valor superior a los $38 mil millones.

Por otro lado, la ola invernal también ha generado en el Cauca millonarias pérdidas, ya que las constantes precipitaciones han afectado vías, cultivos, viviendas y ha dejado a más de 3 mil familias damnificadas.

Situación en Nariño

Uno de los temas prioritarios que deberá ser atendido por el nuevo gobernador de Nariño es la seguridad. En lo corrido del 2023 se han registrado 21 desplazamientos masivos, lo que ha originado el destierro de más de 14.000 personas especialmente en el pacífico nariñense.

Así mismo, entre el 2018 y el 2023 se han registrado 23 alertas tempranas en el departamento. Durante este año van cinco líderes asesinados, se han registrado dos masacres, unos 164 homicidios, 22 suicidios y más de 50 enfrentamientos armados en diferentes zonas del departamento.

Al 29 de mayo de 2023, Nariño es el quinto departamento del país con más grupos significativos de ciudadanos aprobados para las elecciones de gobernación 2023.

Chocó

Además, se han aumentado los actos terroristas en las vías y la instalación de minas antipersona, poniendo en riesgo la seguridad alimentaria.

La competitividad en el Chocó es otro desafío. Según un reciente informe de la Universidad del Rosario, el departamento ocupa el puesto 29 en el índice de pobreza multidimensional, que de acuerdo con las cifras del DANE, llega al 36,8%. A esto se suma la reducción de 3.6 billones de pesos en el plan de desarrollo del presidente Petro para las inversiones en el departamento.

La salud y la educación también son un enorme desafío para el nuevo gobernante.

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Norte de Santander (Catatumbo)

Los retos para el gobernador de Norte de Santander con respecto a la zona del Catatumbo tienen que ver con el orden público. En esta subregión del departamento hace fuerte presencia el ELN y las disidencias de las FARC, y son constantes los ataques contra la fuerza pública.

Por lo menos 12 uniformados, entre policías y militares, han sido asesinados este año en la región el Catatumbo.

También hay un reclamo de la comunidad de los 10 municipios que integran esa subregión, tienen que ver con la inversión en la infraestructura vial, especialmente en las vías terciarias. También se contempla el anillo vial para la paz, que beneficiaría a 30.000 habitantes de Acarí, El Tarra y San Calixto.

El Catatumbo reúne cerca del 18% del potencial electoral de Norte de Santander.