Denuncian que presos en las URI de Bogotá cobran ‘vacuna’ a otros detenidos para no hacerles daño

Más de un millón de pesos exigen a los familiares de las víctimas, a quienes les lanzan hasta excremento para presionarlas.
El caso más reciente ocurrió en la URI de Puente Aranda el pasado sábado. Familias de varios capturados aseguran que, al ingresar a la celda, otros internos los atacaron.
“Los pusieron a simular que eran animales, les echaron excremento y los dejaron en una esquina”, dice una de las denunciantes.
Las agresiones que sufrieron buscaban presionar un pago para que les garantizaran su bienestar en las celdas. “Tenían que dar 1.200.000 para no pegarles”, agrega.
Una de las familias accedió a cancelar la suma de dinero exigida para evitar que su familiar recibiera más castigos. Sería una mujer quien recibe la plata.
Armando Vergara, veedor de la Policía, manifiesta que efectivamente este fenómeno se está presentando “a diario”. A través de llamadas desde las Unidades de Reacción Inmediata hacen la extorsión, añadió.
Las autoridades anunciaron que le pondrán la lupa a este tema en las URI de Bogotá.