La emergencia se presentó en el municipio de Juan de Acosta, Atlántico. El fuego consumió una casa histórica en el centro del municipio.
La propiedad del señor Otoman Molina era, junto a otras dos construcciones, patrimonio arquitectónico de la población, al ser una de la únicas con el tradicional techo de palma.
Las llamas que alcanzaron una escandalosa proporción causaron pánico entre los pobladores, quienes de inmediato se volcaron a la ayuda de los residentes de la vivienda afectada.
Un adulto mayor y cuatro niños fueron rescatados.
De acuerdo con la comunidad, los Bomberos no llegaron a tiempo al lugar y cuando arribaron no tenían agua para extinguir la conflagración.
El voraz incendio arrastró con todo a su paso y debilitó la estructura al punto de que sus paredes están por colapsar.