Un lamentable homicidio accidental se presentó en Medellín luego de que, al parecer, un sujeto perdiera la vida tras jugar con un arma de fuego cargada, en una barbería de la capital antioqueña. Aunque el señalado responsable se entregó voluntariamente ante las autoridades una vez cometido el hecho y aseguró que "no lo quería matar", este lamentable caso provocó indignación entre conocidos y cercanos a la víctima.
Todo ocurrió en una barbería de Medellín en la que se encontraban departiendo varios amigos. En eso, uno de los sujetos sacó un arma y empezó a jugar con ella. Si bien todas las personas tenían conocimiento de que este arma era real, no se percataron de que la misma estuviera cargada.
El desconocimiento previo condujo a que uno de los amigos accionara el arma contra la víctima mortal, la cual recibió un impacto de bala en la cabeza y murió casi inmediatamente. Posteriormente el responsable, en medio de lágrimas, hizo el correspondiente llamado a las autoridades y se entregó voluntariamente para responder por este accidentado crimen.
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La muerte, según reportaron las autoridades, se registró en una barbería del barrio Santa María, en la comuna 7, y más exactamente en la carrera 95 con la calle 70B, según lo dieron a conocer varios medios locales de la capital de Antioquia.
Quién era el hombre que murió en barbería de Medellín tras recibir disparo accidental de amigo
Según lo dieron a conocer las diferentes barras aficionadas al club Independiente Medellín que lamentaron su muerte, la víctima fatal se llamaba Julián González y tenía 24 años. Por su parte, el homicida fue identificado como Yoiner Estiven Montoya Marriaga, otro joven de 23 años que ya se encuentra a disposición de las autoridades.
Otro de los enfoques que mantiene la investigación de las autoridades, además de conocer las circunstancias bajo las que se presentaron los hechos, consiste en saber a quién pertenecía el arma con la que se cometieron los hechos. Y es que, según lo dio a conocer El Colombiano, la pistola con la que aconteció el delito habría provenido de un grupo delincuencial en la zona y fue entregada días antes de que ocurrieran los hechos.
Lo anterior coincide con otro dato citado por el medio antioqueño, el cual sostiene que, supuestamente, las cámaras de vigilancia con las que contaba la barbería —y que eran clave en la investigación— fueron retiradas misteriosamente sin que hubieran podido ser revisadas por los investigadores correspondientes.
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