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Hotel de Cartagena se disculpó con joven afro por discriminación, pero este no quedó satisfecho

Víctor Padilla ganó una tutela que obligó al Cartagena Plaza a presentarle excusas públicas por un comentario sobre su cabello. Aunque el gerente también lo hizo, anunció que impugnará el fallo.

En Cartagena se cumplió el acto de perdón que un hotel ofreció a Víctor Padilla, un joven afro que se declaró víctima de discriminación racial durante un trámite de vinculación laboral. El resultado no logró satisfacer del todo al reclamante.

Tal como lo ordenaba el fallo de tutela, el hotel Cartagena Plaza presentó excusas públicas. El joven había argumentado que, durante un proceso de selección de personal, la persona encargada le hizo un comentario despectivo sobre su cabello.

“Hemos pedido las disculpas al señor Víctor por haberse sentido discriminado”, dijo Carlos Monroy, gerente del hotel Cartagena Plaza.

Sin embargp, acto seguido, se cuestionó la exigencia judicial.

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“Hemos impugnado el fallo porque nosotros tenemos, como ustedes se han dado cuenta, un alto número de afrodescendientes”, expresó Monroy.

La advertencia de las directivas del hotel dejó una sensación de insatisfacción en la víctima de la acción discriminatoria. “Al hotel Cartagena Plaza no lo veo en disposición de aceptar sus errores, de aceptar lo que son”, replicó el agraviado.

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El hotel argumenta que la impugnación no busca desconocer un acto de exclusión racial, sino defender la imagen de respeto que guarda esa organización turística a las minorías culturales.

“Este es el único hotel, me atrevería a decir, uno de los hoteles que resalta precisamente porque en nómina contempla un gran número de personas afrodescendientes”, dijo Sony Agámez, abogada del Cartagena Plaza.

Pero la representación de la víctima insiste en que una impugnación equivale a justificar un episodio de exclusión.

“Dicen que el juzgado no tiene razón en el fallo, entonces lo que quiere decir básicamente es que considera que Víctor se inventó una carreta, y no ha sido así”, señaló Kriss Urueta, abogado defensor del joven.

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De lo que parecía un acto de reconciliación, ahora se desprendió una nueva confrontación verbal y jurídica, pues la víctima anuncia nuevas acciones legales.

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