Ariel López Romero fue ultimado dentro de su casa. Presentaba múltiples heridas de arma blanca. Vecinos vieron entrar a dos personas.
Alumnos y padres del colegio San Antonio de Padua, donde trabajaba el docente, prendieron las alarmas al extrañar su ausencia en el plantel.
“Es recurrente el mismo patrón, en su casa, con arma blanca y sevicia”, comentó Heriberto Mejía, amigo del profesor asesinado, sobre este y los otros siete crímenes de personas homosexuales que se han reportado en Atlántico.
Los restos del docente serán trasladados a Arjona, Bolívar, su pueblo natal.