El temor se apoderó de la comunidad en el barrio Santa Clara de Ocaña, Norte de Santander, donde dos hombres arribaron a un establecimiento comercial y abrieron fuego contra varias personas.
Una de las balas, impactó a Diego Andrés Caballero, de 12 años y estudiante de quinto de primaria, quien según su familia se encontraba cuidando vehículos para ganarse unos pesos.
Durante un consejo de seguridad, las autoridades anunciaron que reforzaran las medidas para prevenir nuevos hechos de violencia. Entre tanto, Ejército y Policía buscan a los responsables del crimen.