Conformaban toda una empresa delictiva que les permitía preparar la droga, incluso frente a menores de edad, y comercializarla en Neiva.
Operaban cerca de escuelas, colegios y barrios del suroriente de la ciudad, de acuerdo a la Policía.
“La droga llegaba allí, ellos empezaban a hacer los cigarrillos para la venta, lo mismo el bazuco en las papeletas y utilizaban a menores de edad para la venta a exteriores del barrio”, explicó el coronel Juan Carlos León, comandante de Policía Metropolitana del Neiva.
La banda lograba ingresos cercanos a los ochenta millones de pesos mensuales en la comercialización de marihuana y bazuco en la ciudad.
Updated: octubre 03, 2017 04:43 p. m.