Por segunda vez en menos de un mes, la empresa Triple A se vio obligada a suspender el servicio de agua por tapones en las compuertas de captación.
La monumental cantidad de basura fue arrastrada por el aumento en la corriente, de los arroyos Don Juan y El Salao’, hasta la bocatoma del acueducto en el río Magdalena.
"Esa lluvia arrastró todo ese volumen de residuos y lo depositó justo a la entrada de nuestra bocatoma de la dársena del acueducto", explicó Ramón Hemer, gerente de operaciones de Triple A.
Ante la vergonzosa situación, la compañía tuvo que suspender el bombeo de agua potable por cerca de una hora en Barranquilla y Soledad, mientras realizaba la limpieza.
Las directivas de Triple A señalaron que esta no es la primera vez que se registra una emergencia similar: hace 15 días el servicio fue interrumpido por la misma causa y en abril las proporciones fueron aún mayores.
"Fue un mayor volumen de residuos, que quedó depositado justo en la bocatoma y nos tocó remover la carga y eliminar toda esa cantidad de residuos", afirmó el Hemer.
Triple A extendió un llamado a la ciudadanía para que no arrojen basuras al cauce de los ríos y los entreguen a los camiones recolectores para que sean tratados.