Haciéndose pasar por policías, dos hombres llegaron hasta la finca cafetera La Bogotana, donde ocurrió la masacre en Betania, Antioquia, que al parecer fue ordenada desde la cárcel por presuntos miembros del Clan del Golfo.
Los asesinos ingresaron a uno de los dormitorios donde se encontraban 8 personas. Allí dejaron salir de la habitación a la esposa de una de las víctimas y sus dos hijos de 1 y 4 años.
Posteriormente, dispararon indiscriminadamente dejando 5 hombres fallecidos en la masacre en Betania.
Las víctimas fueron identificadas como: Alejandro Carrillo, Carlos Carrasco, Gilbert Carrillo, Gerardo Úsuga y Alex Mendoza.
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Tras un consejo de seguridad, las autoridades ofrecieron una millonaria recompensa para encontrar a los responsables de la masacre en Betania.
“En este caso son $50 millones que nos ayuden al esclarecimiento del día de hoy, que es lamentable, y de igual forma vamos a estar haciendo un monitoreo”, dijo el mayor general Herman Bustamante, director de seguridad ciudadana nacional.
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Óscar Yesid Zapata, defensor de derechos humanos del proceso social de garantías, cuestionó “los consejos de seguridad, (que) generalmente se convierten en comités de aplausos y no solucionan los problemas de fondo que tienen estas comunidades; para nosotros es muy importante, no solo la implementación de la paz, sino el desmantelamiento de las estructuras”.