Autoridades no cierran el acceso hasta que el parqueadero, con cupo para 3.000 carros, se llene. En Cholón también es evidente llegada descontrolada de navíos.
Los mototaxistas han sido los que han aprovechado el caos para entrar a Playa Blanca
y llevan a los turistas que intentan encontrar un espacio para disfrutar del sitio turístico de Barú, en Cartagena.
“Hay un trancón allá afuera, están parqueando los buses en el parqueadero y nosotros les prestamos el servicio de moto, les cobramos 5 mil pesos por dos personas hasta acá, la playa”, dijo Luis Gabriel Herrera.
El gran problema en esta zona turística radica en que la playa se cierra cuando se llenan los parqueaderos, que tienen una capacidad para tres mil vehículos, y no cuando se alcanza el tope de personas, 3.162.
Y si la situación es difícil en Playa Blanca,
en Cholón también se hace evidente la llegada descontrolada de embarcaciones, que parece evidenciar la ausencia de los controles por parte de la Armada Nacional y el cuerpo de guardacostas.