La tragedia ocurrió tras la quema de un kiosco que funcionaba como restaurante en la bahía. Allegados del presunto homicida tuvieron que huir de la zona.
El conflicto entre los Guerra y los Matos inició hace unos seis años, cuando dos miembros de estas familias fallecieron.
Desde entonces habían estado enfrentados, pero en la semana de Año Nuevo fue quemado un kiosco que pertenecía a los Matos.
Tras el incidente, uno de los miembros de esa familia asesinó a uno de los integrantes de los Guerra e hirió a cuatro personas más.
En venganza, los allegados de la víctima quemaron un carro de sus rivales.
Edudaldo Matos, líder comunal de Taganga, lamentó que haya “personas inocentes que caen a veces y por eso les pedimos a todas estas familias que lleguen a la cordialidad, al entendimiento”.
La familia del presunto homicida tuvo que salir de la zona turística de Santa Marta por motivos de seguridad, pues su vivienda fue destruida.
El Esmad, la Policía y el Ejército se tomaron el corregimiento para garantizar la tranquilidad de quienes por esta época visitan el lugar.
Además, buscan una mesa de diálogo entre los integrantes de las familias Guerra y Matos para conjurar la rencilla.