Hallaron sin vida al patrullero Jefferson Valencia, que había sido secuestrado junto a su compañero Neider Pérez. Ambos estaban de descanso en Junín, zona rural de Barbacoas, Nariño, y desaparecieron cuando se movilizaban en la vía entre Pasto y Tumaco.
El inspector de Policía de El Diviso encontró el cuerpo del uniformado en el Kilómetro 97, según información preliminar. No se ha establecido quiénes son los responsables del asesinato, pues en la zona delinquen disidencias de las FARC y hombres del ELN.
Sobre el otro patrullero, Neider Pérez, se dijo que logró llegar al municipio de Llorente, donde está bajo el resguardo de las autoridades.
Jefferson Valencia había salido de descanso para celebrar su cumpleaños en Tumaco, de donde era oriundo.
La situación de orden público en Nariño ha sido crítica en las últimas 24 horas, tras hostigamientos a por lo menos tres poblaciones y los secuestros del hermano del alcalde de Leiva, Hermes Sánchez, y de un líder indígena en el municipio de Ricaurte.
“En La Llanada tuvimos una moto cargada con explosivos, en el corregimiento de Remolino del municipio de Taminango también, un artefacto explosivo cercano a la estación de Policía, y un hostigamiento en el municipio de Leiva”, detalló Darío Alexánder Chávez, gobernador (e) de Nariño.
De este departamento también es oriundo el soldado Juan David Estrada, secuestrado en el Cauca.
Su familia hizo un llamado desesperado para que las disidencias de las FARC lo liberen: “Somos personas campesinas y humildes, pedimos al señor presidente Gustavo Petro, a la Cruz Roja, a la ONU y al Ejército Nacional que intervengan, nos ayuden y hagan llegar este mensaje a las personas” que lo tienen.
El uniformado fue retenido el sábado 12 de agosto, cuando se desplazaba entre los municipios de Caloto y Santander de Quilichao.
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