A bordo de un avión, les mostramos los protocolos de bioseguridad que implementará Avianca

Con gratitud recibieron las aerolíneas la noticia de que Bogotá tendrá su primer vuelo comercial de prueba en septiembre después de superar el pico de la pandemia por coronavirus. Avianca explica que lleva varios meses preparándose para operar bajo todas las medidas de bioseguridad, según su vicepresidente de operaciones, Julián Laverde.

Para empezar, habrá varios filtros en las instalaciones del aeropuerto El Dorado, los cuales incluyen toma de temperatura y otros procedimientos.

Una vez se pase la fase del check-in, el avión se va a abordar en grupos pequeños. “No todo el mundo al tiempo y de atrás hacia adelante para evitar que se aglomeren las personas”, detalló el directivo.

El uso del tapabocas debe ser permanente durante el trayecto. Ni los pasajeros ni la tripulación de cabina van a poder quitárselo.

“Estos aviones cuentan con una tecnología de punta que son los filtros EPA, estos garantizan que el flujo del aire sea horizontalmente sino verticalmente. Es el mismo sistema de purificación de un quirófano”, precisó Laverde.

Otras determinaciones tienen que ver con los sistemas de entretenimiento (pantallas en las cabeceras), los cuales no estarán habilitados. Además, después de cada viaje habrá desinfección de todas las superficies de contacto.

Sobre el servicio de comida, se entregarían alimentos fríos y se limitará la oferta de comidas regulares.

El vicepresidente de operaciones afirmó que recientemente Avianca obtuvo la certificación por parte de Icontec sobre operaciones bioseguras.

Llevan tres meses haciendo planes piloto, por lo que esperan que en septiembre se haga efectiva una fase de reactivación con seis vuelos de entrada y seis vuelos de salida por hora inicialmente, como lo definió la Aeronáutica Civil.