Una herramienta que hace uso de inteligencia artificial ha tomado fuerza en las empresas para detener el acoso sexual en mujeres y hombres. Funciona en Bolivia, Colombia y Perú y fue desarrollada por Espacios Laborales sin Acoso Sexual (ELSA). La herramienta está apoyada por la empresa privada y por el Banco Interamericano de Desarrollo y busca motivar la implementación de mecanismos que prevengan el acoso sexual laboral.
El último informe de ELSA se realizó en 10 sectores del que hacen parte 75 empresas en Panamá, Bolivia, Chile, Perú y Colombia. Determina qué tanto el acoso sexual afecta el desempeño laboral en las empresas de América Latina.
De aquellos que han reconocido haber pasado por acoso, el 28% consideran que su rendimiento laboral fue afectado negativamente. En los lugares en los que más se afecta ese rendimiento son en sectores como los bancos y los seguros. Si solo se toma a Colombia, ese efecto sobre el rendimiento por el acoso sexual es del 23%.
¿Cómo se miden las afectaciones al rendimiento laboral?
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Con las ausencias al trabajo y a las reuniones, por ejemplo. En Colombia, el 21% de los que se sienten acosados se ausentan, un porcentaje mayor al de Perú, donde lo hace el 17% y al de Bolivia donde lo hace el 12%.
Otras consecuencias del acoso sexual y su impacto en el rendimiento laboral
El estrés, con el 72%; la ansiedad con más del 50%, así como no poder dormir o concentrarse.
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Después de ocurrido el acoso, dice el estudio, tres de cada cuatro personas optan por evitar a la persona que lo hizo. Dos de cada cuatro no comenta lo que le ocurrió a nadie y una de cada cuatro pide que le cambien de lugar de trabajo sin ser precisos en los motivos. Solo el 10% de los entrevistados denunció, el 12% acudió a recursos humanos y un 28% contactó a su jefe directo.
Finalmente, el 37% de las mujeres y el 32% de los hombres reconocieron ser objeto de manifestaciones concretas de hostigamiento o acoso sexual laboral en los últimos 2 años.