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Iván Lalinde contó la "maldad" que le hizo a un cliente cuando trabajó como mesero

Antes de su llegada a la televisión, Iván Lalinde consiguió empleo en un restaurante de Medellín para costear sus estudios. Allí se vengó de un comensal "mala clase". Conozca la historia.

Iván Lalinde
"Esto se los cuento para que tengan cuidado en los restaurantes", advirtió el presentador antes de contar cómo fue su venganza -
@Ivanlalindeg.

El reconocido presentador Iván Lalinde recientemente concedió una entrevista en el programa The Juanpis Live Show en el que reveló algunos detalles de su vida antes de llegar a la televisión. Sorprendió especialmente con una historia de cuando trabajó como mesero.

La personalidad de Iván Lalinde ha conquistado a miles de televidentes de Caracol Televisión con su participación en diferentes programas. Sin embargo, parece que hace algunos años atrás el presentador fue "maldadoso".

"Venga le cuento esta historia", le dijo Lalinde a Alejandro Riaño, quien personifica a Juanpis González. "Cuando estaba en la universidad fui mesero en una hamburguesería en Medellín".

El presentador de La Voz Kids contó que en ese entonces tuvo una experiencia particular con un cliente que iba todos los fines de semana: "El tipo iba con la novia y me pedía siempre un chacarero de aguacate, yo se lo llevaba y me decía 'pero le dije que sin aguacate' y me hacía cambiarlo".

Según Iván Lalinde la situación se repitió en varias ocasiones haciéndolo quedar mal, hasta que en una de esas visitas el hombre llegó con varios amigos. Como se le había convertido en costumbre, el cliente empezó a tratarlo mal y hacerlo sentir que estaba equivocado.

"Esto se los cuento para que tengan cuidado en los restaurantes", advirtió el presentador antes de contar cómo fue su venganza.

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Detalló que al llevar el plato que le había regresado a la cocina tomó el pan de la hamburguesa y lo lamió: "El man de la parrilla me miraba asombrado y yo le dije 'es que es un hp'. Le eché sal y pimienta en la gaseosa y un recuerdito de mi ADN con saliva".

Tras devolverle el plato al cliente, Iván Lalinde señaló que "me senté en la barra a mirar y yo decía 'ay, qué dicha. Disfrútame bebé'. Desde ese momento le dije a mi jefe que no lo atendía más, pero el man después volvió".

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