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Cecilia Cubas era una joven empresaria paraguaya que fue secuestrada, torturada y asesinada el 21 de septiembre de 2004 por miembros del partido Patria Libre. Era hija del expresidente Raúl Cubas. Rodrigo Granda está vinculado con este caso.
Su primo Emilio Cubas, quien vivió de cerca las horas de dolor del cautiverio y asesinato de Cecilia, cuenta cómo lograron desenmascarar a los responsables del crimen.
“Hicimos una bitácora de todo lo que vamos recibiendo, tanto de e-mails, de llamadas telefónicas, como también de mensajes que se nos hacían llegar y esa bitácora fue presentada y analizada durante el juicio de Cecilia a los que se habían capturado que fue un juicio que comenzó en 2005”, relató Emilio.
En noviembre de 2006, la Fiscalía de Paraguay reveló ante el tribunal de sentencia varios correos electrónicos de Osmar Martínez, señalado cerebro del secuestro, con el que fue considerado el canciller de las FARC, Rodrigo Granda, en los que hablaban en clave refiriéndose a la joven como fruta y al secuestro como empresa.
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“También ellos se referían a términos como la fruta, la fruta se va a podrir, amenácenla de esta forma o de otra. Cuando ellos terminaron con la vida de Cecilia, también había invitaciones de Granda para ir a Colombia y hablar un poco de la experiencia y de lo que fue el cultivo y la siembra como hablaban ellos con base en el secuestro”, aseguró el primo de Cecilia.
Los textos de esos correos fueron comprobados con información hallada en el computador de Raúl Reyes, tras la operación militar en su contra en 2008. A pesar de que su familia pagó una millonaria suma de dinero por su rescate, la joven jamás fue liberada y, por el contrario, fue torturada y enterrada viva el 16 de febrero de 2005.
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“Ellos llevaban un manual y cumplían el manual a cabalidad, eso se demostró justamente en lo que es el manual de las FARC. Nosotros nos enteramos de lo de Cecilia, del hallazgo, primero un lugar donde había una cueva, donde no había nada, después los bomberos hallaron un cuerpo, ahí fuimos a ver y después ya todo lo que es de público conocimiento. Ella sí fue sometida, fue torturada. Lo más posible es que hasta haya sido violada”, señaló Emilio.
A pesar de lo ocurrido, sus familiares aseguran que entienden que ahora prima el interés general de la paz sobre el particular, en este caso, el de ellos por buscar justicia en el caso de Cecilia.
Sin embargo, aseguran que no hay interés de diálogo con el exintegrante de las FARC y que esperan por lo menos justicia divina.
“No creo que merezca decirle nada a esta gente porque todo lo que uno diga a esta gente les pasa por la tangente, a ellos no les entra nada”, expresó Emilio Cubas.
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Por su parte, la Cancillería de Paraguay explicó que no solo se requería una circular roja para la captura de Rodrigo Granda, sino que se necesitaba una orden de captura por parte de una autoridad judicial de ese país.
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