Ellas eran Rayane y Rithiele, hermanas que murieron tras secuestro en Brasil

Rayane Alves Porto y Rithiele Alves Porto, de 25 y 28 años, fueron secuestradas, torturadas y asesinadas el pasado 18 de septiembre en Brasil. Autoridades manejan tres hipótesis sobre el crimen de las jóvenes, una de las cuales se había lanzado recientemente a la política.

“Nacieron en el circo”

Un tío de las hermanas, citado por el medio TN, contó que ellas se habían criado en un circo, del que su padre y abuelo eran dueños.

Sin embargo, “la pandemia obligó a su cierre. Tras esto, se mudaron con su abuela paterna en Indiavaí y, después, hace unos 2 años, se trasladaron a Porto Esperidião para estar cerca de su abuelo materno, en Glória D’Oeste, donde fueron enterradas”, detalló.

La mayor de las hermanas estudiaba derecho y la menor se desempeñaba como maquilladora. Alternaba este oficio con la política, ya que recientemente se había postulado para ser concejal.

Ambas continuaban con la tradición familiar y dirigían un circo, según se ha informado.

¿Cómo las mataron?

Rayane y Rithiele habían salido de una fiesta junto a su hermano y el novio de una de ellas. Los cuatro fueron abordados por sujetos que los secuestraron.

Horas después, la pareja de una de las hermanas, que tenía signos de tortura, logró escapar de sus captores y acudió a la Policía de Brasil para denunciar lo que había ocurrido.

Los uniformados llegaron a la casa donde el joven dijo que estaban los tres hermanos. A su cuñado lo hallaron vivo en una habitación, pero le habían mutilado una oreja y un dedo, además de haberle causado cortadas en la nuca.

En otro cuarto encontraron pelo y dedos de una de las hermanas, a las que localizaron sin vida en otra recámara.

Preso es acusado de coordinar el crimen a través de una videollamada

El sujeto está recluido en el Penal Central del Estado (PCE), en Cuiabá. Al parecer, mantuvo una videollamada de casi tres horas -mismo tiempo en que las hermanas fueron torturadas- para guiar a sus cómplices en la forma en que debían lastimar a las jóvenes.

En la celda hallaron el celular que habría usado para tal fin.

Inicialmente se creyó que el crimen de las hermanas tenía que ver con un secuestro extorsivo, pues los criminales que retuvieron a los cuatro jóvenes exigían dinero para liberarlos con vida.

Sin embargo, hay otras dos hipótesis en el caso. Una tiene que ver con la carrera política de Rayane y la otra tiene que ver con una foto que las jóvenes se tomaron haciendo un gesto asociado a una facción criminal, el Primeiro Comando de Capital (PCC).