Un nauseabundo olor alertó a las autoridades, que encontraron en la vivienda otros 130 animales en condiciones deplorables.
Como Donna Roberts, de 65 años, fue identificada la mujer. Hasta su casa, ubicada en Nueva Jersey, Estados Unidos, llegaron representantes del departamento de salud local tras llamadas de vecinos.
Al ingresar al lugar, encontraron una escena realmente deprimente: había más de 130 perros vivos en la residencia, al menos cuatro de ellos en situación crítica.
Pero el hallazgo más desagradable se dio cuando, dentro de congeladores, descubrieron los cadáveres de 44 animales guardados en bolsas plásticas.
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"Aunque las circunstancias que rodean la muerte de los 44 perros que fueron descubiertos dentro de bolsas plásticas en congeladores continúan bajo investigación, las condiciones de vida deplorables e inhumanas que los perros rescatados tuvieron que soportar son trágicas", informó el coronel Patrick Callahan, de la Policía de Nueva Jersey.
Uniformados que participaron en el operativo terminaron mareados y con nauseas debido a la fetidez presente en la casa.
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Según el New York Post, la señora dijo que los perros eran recién nacidos y que los olvidó en las neveras desde hace cerca de siete años.
“Me olvidé de ellos, estaban en una nevera en la bodega. Nacieron muertos y no los maté. Están haciendo un gran lío por nada”, habría asegurado.
Así mismo, de acuerdo con el medio de comunicación, Donna sostuvo que decidió junto a su novio congelarlos para enviarlos luego a un veterinario con el fin de que les realizaran una autopsia.
Aunque fue arrestada, la dejaron en libertad mientras una corte la cita para que responda por cargos relacionados con maltrato animal.
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Imagen de referencia: Pixabay
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