Un niño de dos años fue encontrado muerto por deshidratación y hambre al lado del cadáver de su padre, quien también falleció, producto de un paro cardiaco. Los hechos ocurrieron en el condado de Lincolnshire, en Inglaterra.
El cuerpo del niño, identificado como Bronson Battersby fue hallado acurrucado junto a Kenneth Battersby, su papá, de 60 años.
De acuerdo con el diario The Sun, el menor había sido visto con vida por última vez el 26 de diciembre de 2023, por un vecino que visitó a la familia para ver un partido de fútbol.
Los resultados de la autopsia del padre del niño indicaron que habría muerto el 29 de diciembre.
Una trabajadora social, que hacía visitas rutinarias a la casa donde vivían el niño y su papá, alertó a la Policía el 4 de enero de 2024. Ella se percató de que algo andaba mal cuando tocó a la puerta y nadie respondió.
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Los cuerpos de las víctimas fueron hallados cinco días después de la alerta a las autoridades, cuando la funcionaria utilizó una llave del propietario de la vivienda para ingresar.
La mamá del pequeño, identificada como Sarah Piesse, de 43 años, afirmó que la última vez que vio a su hijo fue un día antes de Navidad, luego de haber tenido una discusión con su expareja. La mujer expresó que "si los servicios sociales hubieran hecho su trabajo, Bronson todavía estaría vivo. Pero no hicieron nada".
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El niño de 2 años se quedó en la oscuridad de la casa sin comida ni agua. La madre manifestó que "tenemos que poder confiar en los trabajadores sociales para mantener seguros a nuestros niños". Según The Sun, la trabajadora social no fue suspendida, pero decidió ausentarse de manera voluntaria.
La directora de servicios para niños, Heather Sandy, informó que llevan a cabo una revisión del terrible suceso con agencias asociadas para comprender las circunstancias: “Estamos esperando los resultados del forense”.
La mamá del niño manifestó que “ahora en lo único que puedo pensar es en él, hambriento, extendiendo la mano y tratando de atrapar comida. No puedo soportarlo".