El gobierno venezolano dio su balance sobre laintervención de la cárcel de Tocorón,
sin mencionar siquiera al líder del grupo criminal Tren de Aragua, alias ‘Niño guerrero’, que estaba recluido ahí. La ONG Observatorio de Prisiones denunció que el cabecilla se habría fugado y, luego, salió del país. Cuatro agentes de seguridad fueron detenidos, acusados de complicidad con los delincuentes.
En el nuevo balance del gobierno venezolano sobre el operativo en la cárcel de Tocorón, para tomar control de ese penal donde mandaba y operaba el líder del Tren de Aragua, el ministro de Justicia no dio información sobre el paradero de este criminal, pero sí reconoció que hay varios delincuentes en fuga.
“Tenemos más de 60 individuos pertenecientes a una gran banda criminal, nos va a aportar asuntos de interés para las futuras capturas que vamos a realizar", dijo Remigio Ceballos, ministro de Interior y Justicia.
El ministro Ceballos aseguró que el resto de los detenidos estaba sometido a una especie de esclavismo por parte de esta megabanda. Detalló que para ejecutar el operativo hubo una planificación de un año.
“Aquí hemos incautado armas largas de francotiradores, granadas, explosivos, narcóticos, lanzacohetes, munición diversa", subrayó el jefe de la cartera de Interior y Justicia.
Sin embargo, la ONG Observatorio Venezolano de Prisiones hizo una grave denuncia: que la intervención fue pactada entre el gobierno y los líderes criminales, por ello no hay rastro de los cabecillas del Tren de Aragua que estaban allí detenidos.
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"No capturaste al responsable de la banda, llamado el ‘Niño Guerrero’, que es el plan. Por informaciones y fuentes, ya el ‘Niño Guerrero’ no está en nuestro país”, aseveró Humberto Prado, director del Observatorio Venezolano de Prisiones.
La organización no gubernamental calificó el operativo como un fracaso, pues fueron desplegados más de 11 mil funcionarios y aún no hay resultados claros.
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El gobierno confirmó la muerte de un militar durante el operativo, pero no especificó cómo, tampoco dio cifra de fugas, pero sí señaló el presunto uso de la delincuencia con fines políticos.