Tuvo como epicentro la isla de Mindanao, misma área en la que hace dos semanas un movimiento telúrico de 6,4 dejó siete muertos y 200 heridos.
La víctima mortal es un hombre de 66 años que murió a causa de un traumatismo en la cabeza, según el recuento preliminar de la Oficina de Defensa Civil, que confirmó 30 heridos en Kidapawan y otros 13 en M'lang, ambas en la provincia de Cotabato del Norte.
Las autoridades todavía no han informado sobre los daños en viviendas e infraestructuras, aunque advirtieron que se esperan "daños importantes" y posibles réplicas.
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El epicentro del sísmo, de "intensidad destructiva", se situó cerca de Tulunan, la misma ciudad donde se localizó el epicentro del terremoto del 16 de octubre, informó el Instituto de Vulcanología y Sismología de Filipinas (Phivolcs).
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El organismo localizó el movimiento a unos 60 kilómetros de Davao, la ciudad más grande de Mindanao y la tercera mayor de Filipinas, donde el temblor se sintió con intensidad "muy fuerte".
Phivolcs situó el hipocentro del seísmo a 7 kilómetros de profundidad, aunque el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que vigila la actividad sísmica en todo el mundo, lo ubicó a 15,3 kilómetros.
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Filipinas se asienta sobre el llamado 'Anillo de Fuego del Pacífico', una zona que acumula alrededor del 90% de la actividad sísmica y volcánica del mundo y que es sacudida por unos 7.000 temblores al año, la mayoría moderados.
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Terremotos de magnitud superior a 5 se registran de manera esporádica en la isla sureña de Mindanao; en el archipiélago de Batanes, el extremo septentrional del país; y en la región de Bicol.
Este año el país ha sufrido varios terremotos de más de 5 grados de magnitud. Los más letales ocurrieron en la provincia de Pampanga el pasado abril, que dejó 16 muertos, y otro el pasado julio en Batanes con nueve fallecidos.
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El último gran terremoto que golpeó el país fue un temblor de 7,1 que mató a más de 220 personas en el centro de Filipinas en octubre de 2013; y en julio de 1990, más de 2.400 personas murieron en la isla de Luzón por un seísmo de 7,8, uno de los más fuertes que han azotado el país.
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