Muchas estuvieron en guarderías y al retomar su rutina experimentan cambios físicos y temperamentales. No baje la guardia y lleve a su amigo a un chequeo.
El menor de 14 años no pudo resistir la emoción al ver a Piper, su pug negro. Juntos otra vez, se fundieron en un abrazo que es simplemente emocionante.
No es un tratamiento nuevo, pero sí es poco conocido. Permite trabajar de una forma más lúdica patologías que afecten tanto la salud física como mental.