Parecía imposible que una guerra a gran escala se diera en Europa y que Rusia nuevamente estuviera en el centro. Este jueves, 24 de marzo de 2022, se cumple exactamente un mes desde que las tropas rusas, por orden de su presidente, Vladimir Putin, lanzaron el primer ataque contra Ucrania.Le podría interesar: Ucrania, el ajedrez de la guerra: el conflicto que tiene al mundo en viloMaría Teresa Aya, analista internacional, habló en Noticias Caracol Ahora sobre el primer mes de guerra y los posibles escenarios que vienen.La invasión por parte de Rusia deja más de seis millones de desplazados de Ucrania que han salido hacia otros países, más de 800 civiles muertos y miles de heridos. Esto sin contar las bajas en las tropas ucranianas y rusas.Vea acá la entrevista completa.
Fotos: AFPEl especial Ucrania, el ajedrez de la guerra es una mirada al conflicto que ha puesto al planeta en máxima alerta y que ha desencadenado un enfrentamiento y muchas restricciones entre potencias mundiales. ¿Por qué que Vladimir Putin ordenó la invasión de Rusia a Ucrania? Hablamos con expertos internacionalistas. En este documental de Noticias Caracol salen a la luz los rostros de la guerra, de quienes han huido y los que han optado por quedarse a defender su país, Ucrania. Las bombas han dejado destrucción, centenares de muertos y el dolor de abandonar todo lo que alguna vez fue su vida.
¿Cómo llegó el mundo a una guerra con potencial de expandirse a toda Europa e involucrar las grandes potencias del planeta? Detrás del ajedrez político y militar que ha desatado la invasión rusa a Ucrania, hay pactos incumplidos y sueños expansionistas.Papa Francisco: "En el nombre de Dios les pido que detengan esta masacre" en UcraniaSiglo IXUna tribu vikinga se impone sobre los eslavos en lo que hoy es Ucrania, Rusia y Bielorusia y así nace la Rus de Kiev.1240Los mongoles invaden Kiev, la capital, y arrasan la ciudad. Moscú se convierte en la capital de una segunda Rusia.1613 -1917La dinastía Romanov se instala en el poder hasta la muerte del último zar Nicolás II.Octubre de 1917Estalla la Revolución de Octubre y nace la Unión Soviética con sus 15 repúblicas, incluida Ucrania.1924 -1953Stalin en el poder continúa con la saga expansionista del zarismo e invade, entre otros países, a Hungría y Checoslovaquia.1989Cae el muro de Berlín.1990 – 1991Se desintegra la Unión Soviética. Sus 15 repúblicas se independizan.Zelenski acusa a Rusia de crímenes de guerra tras ataque a escuela en Ucrania con cientos de civilesUcrania, vecino fronterizo de Rusia, declara su independencia en 1991 y tres años después firma el Memorando de Budapest con el que entrega a Rusia su arsenal nuclear con la condición de que jamás será invadido y sus fronteras serán respetadas.A pesar de los pactos para el desarme de la Unión Soviética a cambio de que la OTAN no se expanda hasta la frontera rusa, entre 1990 y 2000 esa organización militar llegó a países como Lituania, Letonia y Estonia, antiguas repúblicas de la extinta Unión Soviética.Para Vladimir Putin, quien llega por primera vez al poder en el 2000, la presencia de la OTAN en sus alrededores y las manifestaciones sociales de 2014 en la plaza de La Independencia en Kiev que terminaron con la caída de su aliado, el presidente Viktor Yanukovich, resonaron en él como si fueran ataques a su Rusia soñada.Como en ‘La vida es bella’, así son los juegos para distraer a los niños de la guerra en UcraniaLas protestas en las calles duraron tres meses, dejaron cientos de muertos y un presidente derrocado. Fueron convocadas elecciones y ganó Petro Poroshenko. En medio del caos, Putin aprovecha el desorden e invade Crimea, que hacía parte del territorio ucraniano, para tener salida al Mar Negro y asegurar la base naval rusa en Sebastopol. Simultáneamente, ataca la región de Dombás, donde hay mucha población rusa, con el objetivo de anexarla a su territorio.Desde entonces se desarrolla en Dombás una guerra civil, a pesar del tratado de paz de Misk, mediante el cual Ucrania se compromete a respetar la autonomía de los rusos en Dombás y Rusia a respetar las fronteras ucraniana. El pacto, firmado en la capital de Bielorrusia, no se ha cumplido. Las refriegas se registran a diario.En 2019, llega al poder Volodímir Zelenski, un joven actor y guionista que obtuvo el 73% de los votos y cuya meta es terminar lo que las revueltas del 2014 pidieron: hacer parte del bloque europeo y aliarse con la OTAN.Vladimir Putin, enredado en la nostalgia de un imperio perdido, abrió el 24 de febrero la puerta de la guerra para impedir lo que un pueblo pide a gritos: su plena autonomía para decidir su futuro.Vea las otras historias de 'Ucrania, el ajedrez de la guerra':Kiev: la joya de la coronaVladimir Putin, el líder frío y calculador que gobierna con dos carasZelenski, el comediante que enfrenta a PutinLa guerra Rusia-Ucrania se vive como una partida de ajedrezLa tragedia de los ucranianos: muchos huyen y otros se quedan a resistir
Niños llorando sin consuelo, perros solitarios en busca de sus amos, maletas en el camino y sin dueño, familias viendo como sus viviendas se consumen tras los bombardeos son algunas de las imágenes desgarradoras de la guerra en Ucrania y cómo sufren sus pobladores. Mientras unos huyen, otros se quedaron a resistir.Niños de EE. UU. escriben cartas de esperanza para víctimas de guerra en Ucrania: “Estamos para ti”Olga Tarnosvka es maestra de español y una patriota decidida que no quiso abandonar su país y se quedó a defenderlo. Vive en las afueras de Kiev y su padre de 71 años está en el frente de guerra.“Hace algunos días la Organización Mundial de la Salud hizo un cálculo de que en Ucrania hay 18 millones de personas en estado de emergencia, hay 3 millones de refugiados que salieron del país, porque no puedes estar tranquilo en ninguna ciudad. Te puede caer un misil, nos están bombardeando desde Crimea, Bielorrusia, son misiles de largo alcance. Caen en cualquier parte entonces, por eso la gente sale del país”, explica.Viven en un constante asedio y denuncia que los corredores humanitarios no están funcionando. Asegura que “hay ciudades que ya son escombros, al lado, a 15 kilómetros, incluso hay gente que se queda viviendo en esos escombros y lo terrible es que no nos dejan entrar ni siquiera al corredor verde, a ese paso seguro. O sea, no hacen el alto al fuego, aunque negocian y dicen al final disparan contra los autobuses y camiones con comida y eso es terrible porque están violando las propias palabras todos los días y por eso no nos podemos fiar”.Zonas residenciales están hechas pedazos en capital de Ucrania, que suma 222 muertos en 3 semanasUna tragedia humanitaria que el mundo presencia en vivo y en directo. Lo que actualmente ocurre en Mariúpol es un genocidio, asegura Olga: “Estamos viviendo una catástrofe humanitaria de una escala tremenda que todavía no calculamos porque los datos oficiales dicen que son 2.500 muertos solo en esa ciudad, pero me temo que pueden ser muchos más”.Ante las alarmas, confiesa que mientras unos se aferran a su fe otros como ella se acostumbran a vivir el día a día con mucha angustia y poco sueño: “Uno se acostumbra, ¿sabes? Es como vivir con el riesgo a la vida constante".Pablo Vasilinsky es otro ciudadano ucraniano que también lleva su cruz a cuestas. El día en que inició la invasión huyó con su madre a Polonia, pero es tan alto el número de refugiados que no hay suficientes sitios para dormir, no hay mucha comida.Para cumplir ultimátum de Rusia “tendrían que eliminarnos a todos”, dijo presidente de UcraniaPolonia no es un país muy grande y a pesar de que la gente quiere ayudar, hay una situación muy precaria en los campos de refugiados. Como todos sus compatriotas, Pablo pasó difíciles momentos en su camino al exilio. “Fue caótico, logramos salir con mi mamá justo dos horas antes de que cerraran frontera porque en un principio Polonia cerró la frontera, todo fue caótico en la estación del tren porque estaba cerca de una base militar, y pues no querían enviar trenes, esperaron más de seis horas y con la incertidumbre de estar cerca de una base militar porque en cualquier momento podía ser atacada”, dice.Mientras ellos luchan, cada uno desde su trinchera, no cesan los ataques y piden con urgencia la solidaridad del mundo porque dicen cuando llegue la calma tal vez ya no haya una Ucrania a donde regresar.Vea las otras historias del especial ‘Ucrania, el ajedrez de la guerra’:Pactos incumplidos y sueños expansionistas: los antecedentes de la guerra Rusia-UcraniaKiev: la joya de la coronaVladimir Putin, el líder frío y calculador que gobierna con dos carasZelenski, el comediante que enfrenta a PutinLa guerra Rusia-Ucrania se vive como una partida de ajedrez
En el día y en la noche, el sonido de las sirenas se ha convertido en la compañía permanente de los habitantes de Kiev. Es la aterradora señal de que por aire y por tierra las tropas rusas lanzaron un ataque contra la capital de Ucrania. Después del aullido que salen por los altoparlantes en toda la ciudad, las calles quedan desiertas mientras los misiles caen en diferentes lugares, la mayoría de ellos impactando blancos civiles.Como en ‘La vida es bella’, así son los juegos para distraer a los niños de la guerra en UcraniaDesde el comienzo de la invasión los rusos estimaron que tomarían en menos de una semana Kiev, una de las ciudades más grandes de Europa con cerca de tres millones de habitantes. Pero encontraron una gran resistencia del ejército ucraniano y de las llamadas fuerzas de defensa territorial, que básicamente son civiles armados con fusiles y bombas molotov que están atrincherados en puntos estratégicos para defender su hogar. Varios de los puentes que cruzan el río que atraviesa la ciudad, y que comunican con otras poblaciones, fueron dinamitados por los propios ucranianos para dificultar la toma. Aunque están rodeados por tropas rusas, Kiev lleva varias semanas en resistencia. Tomar Kiev es fundamental para Vladimir Putin."Rusia nunca renunciará a su convicción de que los rusos y los ucranianos son un solo pueblo”, dijo el mandatario ruso en uno de los múltiples discursos en los que busca justificar la invasión.Esa frase resume en parte por qué para Putin, y una gran parte de la población rusa, Ucrania, y en particular Kiev, tienen un gran valor histórico que se remonta a las raíces mismas de Rusia. Para el siglo noveno, Kiev era la capital más importante de una serie de estados eslavos conocidos como la Rus de Kiev, los cuales fueron fundados por tribus de Varegos, vikingos que llegaron desde la península nórdica. La Iglesia ortodoxa nació y se expandió desde allí a lo que después sería conocida como Rusia. Durante varios siglos Kiev fue considerada más importante que la propia Moscú. Pero fuera de las razones históricas Kiev tiene una importancia estratégica para Putin.El desgarrador video que mostró Zelenski en el Congreso de EE. UU. sobre la guerra en UcraniaCuando se hace una invasión de esta naturaleza no solo es importante derrotar a las fuerzas que se pueden oponer. Para los rusos es clave detener y neutralizar a quien tiene la jefatura de Estado y la jefatura de las fuerzas armadas. Llegar hasta donde están las sedes del Gobierno significa la posibilidad de detener arrestar o asesinar al presidente, de anular la línea de mando de las tropas y generar las condiciones necesarias para buscar una rápida rendición por parte de quienes están gobernando el país. De allí la importancia de tomarse el palacio presidencial, el Parlamento, el Ministerio del Interior o sitios emblemáticos como la Plaza de la Independencia. Por todo eso, Kiev es la joya de la corona para los rusos. Tomarse Kiev sería el golpe definitivo de la invasión rusa.Vea las otras historias del especial ‘Ucrania, el ajedrez de la guerra’:La tragedia de los ucranianos: muchos huyen y otros se quedan a resistirPactos incumplidos y sueños expansionistas: los antecedentes de la guerra Rusia-UcraniaVladimir Putin, el líder frío y calculador que gobierna con dos carasZelenski, el comediante que enfrenta a PutinLa guerra Rusia-Ucrania se vive como una partida de ajedrez
El ajedrez, vieja metáfora de la guerra, fue uno de los instrumentos de la Unión Soviética para demostrar poderío y superioridad intelectual. La guerra Rusia-Ucrania se puede interpretar como una partida de este antiguo juego. El 24 de febrero de 2022, el líder ruso Vladimir Putin inició la partida más difícil y arriesgada de su ya largo régimen. Invadió Ucrania con toda la fuerza de su alineación, desafiando un rival aparentemente débil. Volodímir Zelenski habló ante el Parlamento alemán y reprochó una falta de apoyo más decididoPero en ese complejo tablero hay muchas más fuerzas en juego y se disputan, ni más ni menos, el respeto a la soberanía de las naciones y las reglas de la seguridad en Europa, que ya vivió la devastación de dos guerras mundiales.En línea con ese lenguaje, hablamos con la voz de un gran maestro del ajedrez. Es ucraniano y tuvo que abandonar Kiev. Ahora es uno de los casi tres millones y medio de desplazados de este duelo cruel. “Empecé a jugar cuando aún no cumplía cuatro años. Le pedí a Santa Claus que para el nuevo año deseaba un ajedrez. No sé por qué, pues mis padres no jugaban ajedrez, ni mis abuelos. Así que ¿por qué lo elegí? No lo sé. Creo que fue el destino. Todavía creo que eso es”, dice Kirill Shevchenko, gran maestro ucraniano de ajedrez.Era un helado diciembre de 2005 en Kiev. A orillas del río Dniéper, un futuro campeón daba sus primeros y tímidos pasos de peón que pronto empezaría a ganar y a hacerse un lugar entre los grandes: “Mi nombre es Kirill Shevchenko, soy gran maestro ucraniano, el más joven en Europa, tengo 19 años”.Hace menos de tres meses, el joven Kirill celebraba en Letonia y Eslovenia dos grandes triunfos, entre ellos el campeonato europeo por equipos. Pero los aplausos y la admiración por su inteligencia y su destreza fueron silenciados por las bombas.“El primer día nos despertamos pasadas las cuatro de la mañana por el sonido de las explosiones. Rápidamente reunimos nuestros documentos y nos fuimos al sótano. Al día siguiente, a las 5 de la mañana, los fragmentos de un proyectil impactaron un edificio que está localizado a solo unos metros de nosotros. Esa fue la razón por la cual nos fuimos de Kiev”, contó.Kiev arde. Y los sueños de Kirill están cercados por las llamas, así como los demás de un centenar de niños y jóvenes ya se apagaron para siempre. Los de una generación entera estarán sembrados de minas recuerdos oscuros que acecharán en los recodos. Trampas empeñadas en convertirlos en pesadillas.Los Shevchenko ahora están en Vinnytsia, un lugar más seguro cerca de la frontera entre Ucrania y Moldavia. Más seguro, si se puede decir.Papa Francisco oró por niños de Ucrania: “Son las víctimas de la soberbia de los adultos”Dos ajedrecistas luchan desde orillas distintasLa invasión a ucrania enfrenta a dos de los mejores ajedrecistas de todos los tiempos, dos soviéticos. Anatoly Karpov y Gary Kaspárov están de nuevo en lados opuestos de un tablero, esta vez ideológico. Karpov, ahora legislador de la duma, aprobó la operación militar de Vladimir Putin. Kaspárov, ahora nacionalizado croata, escritor y activista político, la condena y reclama mano dura: “Nunca en la historia un dictador fue detenido con la moderación. Estamos en guerra, y no solo estamos defendiendo a Ucrania, estamos defendiendo el orden mundial, la seguridad y nuestra civilización. Putin es una amenaza existencial. Lo he estado diciendo durante años, pero ahora podemos verlo. Está cometiendo crímenes de guerra y no le importa. En realidad, incluso se enorgullece de poder cometerlos sin que el mundo libre lo castigue instantáneamente. Entonces, reconociendo este hecho, ahora deberíamos considerar la estrategia”.Junto a Kaspárov, en carta abierta a Vladimir Putin, una larga lista de grandes maestros clamó que la sangrienta partida pare ya. Ellos, que al menos en el régimen soviético gozaban de gran respeto y consideración moral, sentencian: «El ajedrez te enseña a responsabilizarte de tus acciones; cada jugada tiene valor y un error puede conducirte a un punto fatal de no retorno. Esto solía ser un deporte, pero ahora las vidas humanas, los derechos humanos y las libertades, la dignidad humana, el presente y el futuro de nuestros países están en juego».Vea las otras historias del especial ‘Ucrania, el ajedrez de la guerra’:La tragedia de los ucranianos: muchos huyen y otros se quedan a resistirPactos incumplidos y sueños expansionistas: los antecedentes de la guerra Rusia-UcraniaKiev: la joya de la coronaVladimir Putin, el líder frío y calculador que gobierna con dos carasZelenski, el comediante que enfrenta a Putin
"La invasión de Putin a Ucrania ha reestructurado la geopolítica a lo largo del mundo, las alianzas globales y el sistema global fundamentalmente se ha desplazado”. Lo dice el analista Doug Klain, quien recuerda los motivos de la agresión de Putin o, al menos, lo que él presentó como motivos.La expansión de la OTAN hacia países antiguamente parte de la Unión Soviética, y por supuesto, la posibilidad de que Ucrania se acercara a Europa, no solo siendo miembro de la Unión Europea, sino incluso de la Organización del Tratado del Atlántico Norte. Pero con su agresión, está claro que Putin cometió un error estratégico.Joe Biden vuelve a cargar contra Vladimir Putin: “Dictador asesino”Durante las últimas semanas no solo la OTAN, sino occidente, han respondido en bloque. La Unión Europea, por primera vez en su historia, está financiando la compra y envío de armas por aproximadamente 500 millones de dólares. Inclusive, varios países rompieron con tradición histórica de no enviar armas a zonas de conflicto, como Alemania, Finlandia y Suecia.Pero lo que más deja en evidencia el error de Putin es que al haber invadido a Ucrania propició un giro en la opinión pública en países que antes eran neutrales y que ahora están más cerca de la OTAN, como Suecia o Finlandia.El otro protagonista de este pulso ni siquiera está en el continente, pero para Putin, es el principal responsable: Estados Unidos.Zonas residenciales están hechas pedazos en capital de Ucrania, que suma 222 muertos en 3 semanas"Esto va a ser un momento de quiebre mayor para el orden internacional que fue establecido al final de la Segunda Guerra Mundial. Estados Unidos principalmente creó un sistema con reglas en el que las naciones no podían invadir y cambiar las políticas de otro país", señala Klain.Ha habido intentos por una salida diplomática, ahí, Francia ha intentado abrogarse un liderazgo, con aproximaciones directas entre Emmanuel Macron y Vladimir Putin, algo que no salió bien.Analiza Klain: “Macron realmente terminó quedando como algo tonto por Putin quien le mintió en la cara en numerosas ocasiones, en persona, macron se sentó y luego salió diciéndole al mundo que no iba a haber guerra".Pero uno de los países que hay que ver de cerca es Alemania, que se ha encontrado en medio de una encrucijada. "El gobierno alemán ha tomado la decisión de que los alemanes no pueden pagar el precio de quedarse sin energía rusa, desafortunadamente la gente que realmente va a lidiar con las consecuencias de las decisiones de Alemania son los ucranianos".Rusia también tiene su propio eje, en el que el primer país que figura como aliado estratégico es Bielorrusia.“Hemos visto efectivamente que el ejército ruso ha estado a cargo del ejército bielorruso por meses. El dictador bielorruso Alexander Lukashenko se ha subordinado a sí mismo a Vladimir Putin, ha transferido su propio poder y la soberanía de Bielorrusia a Rusia"Nada más en Bielorrusia se concentraron 30 mil de las 190 mil tropas que Putin movilizó para cercar a Ucrania.Junto a Rusia figura otro aliado clave: “China está en el medio de la cerca, pero no están dispuestos a ir a ucrania junto a tropas rusas y es una gran pregunta la de qué tanto respaldo podrá contar Rusia de su compañero autócrata en Beijing".Independientemente de ganadores o perdedores, lo que se vislumbra es un nuevo andamiaje que corrija las fallas en el sistema internacional dando garantías a las partes y manteniendo un objetivo global: la paz.
Horas antes de comenzar la invasión de Ucrania, el Kremlin difundió uno de los episodios que mejor refleja el carácter prepotente de Vladimir Putin. Sergei Naryshkin, jefe del servicio de inteligencia ruso, un hombre que fácilmente puede ser de los más temibles del mundo, quedó literalmente sin palabras frente al presidente ruso y no fue capaz de sostenerse en una propuesta que implicaba darle una última oportunidad a Ucrania.Sergei Naryshkin: Tenemos que intentar forzar que Kiev cumpla el acuerdo de Minsk. En caso contrario tendremos que tomar decisionesVladimir Putin: ¿A qué te refieres con en caso contrario? ¿Hay que negociar?Naryshkin: No, yo...Putin: ¿Hay que reconocer la soberanía de las repúblicas?Naryshkin: Yo…Putin: Habla claramenteNaryshkin: Yo apoyaré la propuesta de reconocimientoPutin: ¿Apoyarás? ¿O apruebas? Dilo directamente, Sergei.Naryshkin: Lo aprueboVea todo el especial Ucrania, el ajedrez de la guerraLa declaratoria de territorios independientes ambientaba una sola cosa, que Putin pudiera enviar tropas a la frontera del este de Ucrania para facilitar un ataque militar que tiene al mundo en vilo por el temor de una tercera guerra mundial.Vladimir Putin es un hombre de dos caras. Por un lado, difunde la imagen de un líder carismático, un hombre común y corriente que se deja grabar mientras monta a caballo sin camisa, practica judo, juega hockey con niños, conduce un carro de carreras y protege los valores familiares y las creencias religiosas.Pero su otra cara infunde temor. Es un líder frío, calculador, que no tiene el menor escrúpulo al momento de ordenar asesinatos de opositores o comenzar una guerra en la que caen miles de inocentes.“Mientras yo sea presidente, no habrá matrimonio homosexual”: Vladimir PutinNació en 1952 y creció en un ambiente de limitaciones económicas. Estudió Derecho como una forma de convertirse en lo que realmente quería ser un espía. Y lo logró: en 1975 entró a la KGB y, tras, el colapso de la Unión Soviética se convirtió en jefe del FSB, organismo que reemplazó a la KGB.En 1999 consiguió que un debilitado Boris Yeltsin lo nombrara presidente interino de Rusia. Seis meses después, Putin salió elegido presidente. Casi de inmediato desató una invasión a Chechenia como represalia a una serie de ataques terroristas en territorio ruso.A un periodista de un periódico francés que se atrevió a preguntarle si la utilización de bombas de fragmentación en Chechenia contribuía a la erradicación de la población más que a la erradicación del terrorismo, Putin le respondió con molestia y crudeza: "Ellos han hablado de la necesidad de matar a todos los no musulmanes y si es usted cristiano, está en peligro. Si usted es ateo, también lo está. Tiene garantizada la liquidación".Aunque la comunidad internacional lo veía con reservas, durante muchos años se hicieron los de la vista gorda por estar alineado en la lucha antiterrorista global. Esto le permitió destapar su discurso nacionalista en busca de restaurar la vieja gloria del imperio ruso.Usó su cuerpo para proteger a su bebé ucraniano de un bombardeo rusoEsto implicaba retomar a la fuerza antiguos territorios perdidos tras la disolución de la Unión Soviética, como ocurrió con la Península de Crimea.Esas campañas militares estuvieron acompañadas por una oleada de asesinatos selectivos por envenenamiento en todo el mundo. Algunos países protestaron y ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas responsabilizaron a Putin por los crímenes y anunciaron sanciones que nunca se concretaron.Mientras su vida personal sigue siendo un misterio, Putin lleva más de dos décadas demostrando que está dispuesto a todo, siempre con las dos caras que lo han caracterizado. Hace dos años visitó al Papa Francisco en el Vaticano, en un intento de enviar un mensaje de paz a occidente. Hoy, bombardea a un país sin importar quien caiga.Vea las otras historias del especial ‘Ucrania, el ajedrez de la guerra’:La tragedia de los ucranianos: muchos huyen y otros se quedan a resistirPactos incumplidos y sueños expansionistas: los antecedentes de la guerra Rusia-UcraniaKiev: la joya de la coronaZelenski, el comediante que enfrenta a PutinLa guerra Rusia-Ucrania se vive como una partida de ajedrez
Durante los primeros días de la guerra, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski recibió una llamada de Joe Biden. El presidente estadounidense le ofreció ayuda para que escapara de Ucrania, pues se había divulgado que Zelenski es el principal objetivo militar de los invasores rusos. “La lucha es aquí. Necesito armas, no un transporte”, respondió Zelenski, según publicaron fuentes oficiales de su gobierno. Así se completó la metamorfosis de un comediante en un guerrero.En contexto: Ucrania eligió como presidente al comediante Volodymyr ZelenskyEn apenas tres años, Zelenski pasó de ser un afamado actor de dramas y comedias de la televisión ucraniana a liderar la defensa de su país ante el ataque de uno de los ejércitos más poderosos del mundo. Hoy es uno de los hombres sobre los que cae el peso del orden mundial. Y también es el ídolo de un pueblo en el que la guerra exacerbó un sentimiento patriótico que Zelenski, con sus cualidades de actor, con su teatralidad, ha sabido encarnar.Desde que comenzó la invasión, Zelenski cambió los trajes y las corbatas de mandatario. Ahora solo viste camisetas y chaquetas verde oliva, como las que usa cualquier soldado. Así se presentó incluso en un discurso ante el Congreso de Estados Unidos, en el que salió aclamado por su elocuencia. Allí dijo: “Ahora tengo casi 45 años. Hoy mi edad se detuvo cuando los corazones de más de 100 niños dejaron de latir. No le veo sentido a la vida si no puede detener la muerte".Usó su cuerpo para proteger a su bebé ucraniano de un bombardeo rusoZelenski también fue ovacionado por el Parlamento Europeo el 1 de marzo. “No nos rendimos y no perdemos, llegaremos hasta el final. Lucharemos en los mares, lucharemos en el aire, defenderemos nuestra tierra, cueste lo que cueste. Lucharemos en los bosques, en los campos, en las costas, en las ciudades y pueblos, en las calles, lucharemos en los cerros”, aseguró.En ese discurso, Zelenski pidió la adhesión inmediata de su país a la Unión Europea, una propuesta que lo llevó a la presidencia tres años atrás. Como candidato fue un fenómeno viral de internet que no apareció en los grandes medios tradicionales. Así triplicó los votos de su contrincante, el entonces presidente Petró Poroshenko.Su elección sorprendió al mundo. Lo único que Zelenski tenía de político, había sido su papel de presidente en una comedia que él mismo dirigió. Al final el chiste se volvió realidad, incluso el nombre de su show de televisión se convirtió en el nombre de su partido político: El servidor del pueblo.Volodímir Zelenski habló ante el Parlamento alemán y reprochó una falta de apoyo más decididoPor su inexperiencia recibió ataques políticos de quienes lo señalaron de carecer de la altura para el cargo. También se le ha cuestionado su cercanía con el oligarca Íhor Kolomoiski, señalado por Estados Unidos de presunta corrupción.La popularidad de Zelenski decaía a niveles históricos mientras avanzaba su mandato sin las transformaciones prometidas. Sin embargo, desde el comienzo de la guerra repuntó. El apoyo de los ucranianos hacia su presidente es hoy casi unánime. Ese respaldo proviene de un mensaje que él ha enviado una y otra vez: que no abandonará su país. Es lo mismo que le ha pedido a los ucranianos, que defiendan su territorio hasta el fin.Vea las otras historias del especial ‘Ucrania, el ajedrez de la guerra’:La tragedia de los ucranianos: muchos huyen y otros se quedan a resistirPactos incumplidos y sueños expansionistas: los antecedentes de la guerra Rusia-UcraniaKiev: la joya de la coronaVladimir Putin, el líder frío y calculador que gobierna con dos carasLa guerra Rusia-Ucrania se vive como una partida de ajedrez