Ilma Alfaro, diagnosticada con esta enfermedad hace tres décadas, habla de la forma como ha enfrentado “las crisis y treguas” de este mal.
En ocho de cada diez pacientes, la esclerosis aparece y desaparece, causando diferentes problemas neurológicos como dificultad para la movilidad, el equilibrio, en la visión, así como fatiga y pérdida de memoria.
Ilma señala que pasó cinco años en una silla de ruedas y que cuando la diagnosticaron pasó 12 años sin que le recetaran un solo medicamento.
Ella afirma que a veces falla el habla y el cansancio es extremo.
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Según estudios, con la esclerosis múltiple las defensas pueden atacar el sistema nervioso, lo cual interfiere con los mensajes que envía el cerebro y la médula espinal al resto del cuerpo.
Hay factores de riesgo genético para desarrollar la enfermedad, pero también puede influir la obesidad y el tabaquismo.
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